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-Ali, Sophie me ha invitado a su casa, ¿puedo ir? -me pide Noah con ojos tristes en cuanto sale de la escuela. No sé ni por qué intenta ablandarme, si siempre termino diciéndole que sí haga lo que haga.

-Claro -me encojo de hombros, y él sonríe ampliamente.

-Pelo ven tu tambien, que eles la novia de Liam -dice.

-Y dale, que no soy su novia -suspiro.

-Pelo os disteis un beshito, ashi -dice, imitando un beso.

-Bueno, pero no somos novios -digo.

-Ah... Entonshes, ¿vienes?

-Está bien -cedo.

- o -

-¡Alice, Noah! -exclama Angela en cuanto entramos en el piso junto con Liam y Sophie-. Es genial volver a veros, Noah se queda a dormir, ¿no?

Shi! -exclaman Noah y Sophie al unísono, y Angela ríe.

-Eso parece -sonrío.

-Alice, cariño, ¿quieres un té o algo para beber? -me pregunta.

-No, gracias -declino su oferta con una sonrisa. Esta mujer es tan agradable, ojalá yo hubiera tenido una madre así.

-¿Está papá? -pregunta Liam, y su madre asiente con una sonrisa.

-Sí, nos estamos preparando porque esta noche tenemos una cena de empresa en Birmingham.

-Es verdad -asiente Liam.

-Dormiremos allí, ya que está bastante lejos -explica Angela-. Os he dejado dinero por si queréis pedir algo para cenar.

Entonces se abre la puerta de una de las habitaciones y aparece un hombre alto, muy alto, con gafas y abrochándose una camisa blanca.

-Oh, no sabía que había gente -dice, mirándonos a Noah y a mí.

-Es el amiguito de Soph, Noah, y su hermana Alice -nos presenta Angela.

-Oh, encantado, yo soy Johan Alden -se presenta bastante formalmente, tendiéndome la mano.

-Alice Smeed -me presento, estrechando su mano.

-Vaya, ¿tenéis algo que ver con Ian Smeed, el actor? -me pregunta, bromeando.

-Por suerte o por desgracia, sí -me encojo de hombros ante su cara de sorpresa-. Es nuestro padre.

Por suerte el tema de la fama de mi padre -y de mi padre en general- no vuelve a salir, y hablamos un buen rato de varias cosas hasta que los señores Alden tienen que acabar de arreglarse, y luego se van.

Pedimos tres pizzas grandes para cenar y ponemos una de las películas de Doraemon para que la vean los pequeños, aunque Liam y yo también estamos muy concentrados en ella.

-Ali yo quelo un bolsillo mágico -dice Noah-. Como el de Dolaemon.

-Ya, yo también lo quiero, pero solo puede tenerlo Doraemon -le contesto, y Liam ríe.

-Pelo eso es ser edoísta, lo dijo la señolita Clarkson.

-Se dice egoísta, Noah, y sí, Doraemon lo es un poco -río.

Seguimos viendo la película mientras Liam y Noah se terminan la pizza, ya que Sophie y yo estamos llenas desde hace rato. No entiendo cómo cabe tanta comida en el estómago de un niño de tres años, es increíble, en el de Liam lo entiendo porque tiene veinticuatro.

Conociendo a Noah [Saga Smeed 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora