23

63.6K 5.7K 398
                                    

-¡Noooo! -grita Noah, pegado a la pierna de Nate.

-Vamos, Noah, tienen que irse -le digo, intentando que se calme-. Van a perder el vuelo si no le sueltas.

-Pelo no quelo... -solloza-. Nate tiene que enseñalme a jugad a los viojuegos.

-Te enseñaré cuando vuelva -le promete Nate-. Pero ahora tengo que irme, campeón. Volveremos pronto a verte.

-Vawe... -suspira, y se suelta de su pierna.

Noah le da unos golpecitos en la pierna a Louis y éste se agacha para darle un último abrazo antes de entrar al control de seguridad.

-¿Cuando volvelán? -me pregunta el pequeño, cogiendo mi mano y observando a nuestros hermanos pasando el control de seguridad.

Nate pita en el detector de metales y es revisado por una chica de seguridad bastante guapa, por lo que no deja de sonreír pícaramente. Vaya hermanos me han tocado.

-No lo sé, pero no tardarán -le prometo, aunque no tengo ni idea de si volveremos a verlos pronto. Al fin y al cabo ellos se dedican a viajar por todo el mundo, Londres fue solo otra parada.

Él solo asiente, y empezamos a caminar hacia la salida. Cojemos el bus hasta Camden Town, que queda bastante cerca de casa, y comemos en un restaurante chino que hay por ahí.

-Ali, ¿qué es esto que tiene el arros? -me pregunta Noah, señalando las pequeñas gambas que contiene el arroz tres delicias que le he pedido.

-Son gambas, vienen del mar -contesto.

-¿Como los peses?

-Sí, como los peces, pero no son peces -asiento, y vuelvo a comer mi ensalada china.

-Entonshes... ¿qué son?

-Son crustáceos, como los cangrejos.

-¿Custáseos? -pregunta, confundido.

-Ya lo estudiarás en el cole.

Terminamos de comer y a Noah le entra sueño, así que me lo llevo para casa. Esta tarde viene Sophie a jugar con él, así que dejaré que duerma hasta entonces para que recupere energías.

Pero, cuando ya hemos subido las escaleras y nos encontramos en el rellano, me encuentro con algo que me enfada de nuevo.

-Alice -dice.

-Josh, vete. No me hagas montar una escena delante de él -le pido, señalando a Noah, quien mira a Josh con desconfianza.

-¿Quién es? -me pregunta Noah, señalando a Josh.

-Es un amigo mío -le miento, para que no se asuste.

Noah asiente, y Josh se mira al pequeño.

-¿Es tu hijo? -me pregunta-. Siempre fuiste muy desmadrada, pero tampoco imaginé que...

-Josh -gruño en señal de advertencia, y él suspira y se aparta para dejar que yo abra la puerta de mi piso.

-Solo quiero hablar, dame solo diez minutos -me pide-. Por favor.

-Está bien -suspiro, deseando acabar ya con esto.

Los tres entramos en mi piso y lo primero que hago es llevar a Noah a su habitación. Puede que las cosas se pongan mal, y no quiero que esté ahí para verlo.

-¿Pol qué está tu amigo aquí? -me pregunta.

-Ha venido de visita -contesto, fingiendo una sonrisa-. ¿Tú no tenías sueño?

Conociendo a Noah [Saga Smeed 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora