Pregúntame si te amo (Max Meyer)

30. Entrevista

—¿Qué viene para Max Meyer en la siguiente temporada? —el entrevistador lo miraba directamente a los ojos.

Max se encontraba en esos momentos sentado en un sillón con decenas de cámaras que tomaban cada ángulo de su rostro y contestaba a las preguntas que le hacían. Había pasado todo el día fuera de su casa desde la mañana en el entrenamiento hasta la tarde y parte de la noche que había dedicado para el ensayo y los últimos detalles de la entrevista que iba a realizar.

—Logros y éxitos. Sólo eso espero —contestó sin entrar en tantos detalles.

—¿Y qué hay acerca del equipo? ¿Permanecerás en el Schalke o hay ofertas de algún club extranjero? —el hombre cambió las tarjetas que traía en su mano al hacer la pregunta.

—Mi contrato con el equipo está vigente hasta el 2017; ha habido ofrecimientos por parte de otros clubes, dos de la Premier League y uno de la Serie A...

—Fascinante —interrumpió el entrevistador.

Max prosiguió.

—Pero creo que hasta el momento permanecer con el Schalke ha sido una buena decisión pues he crecido como jugador, como equipo hemos alcanzado logros y tenido vivencias o experiencias que tal vez no tendría con un equipo de otro país pues ha sido mi club desde los 14 años y los conozco como la palma de mi mano al igual que ellos conmigo.

El hombre se dirigió a Max.

—Y bueno, a lo que acabas de decir podemos agregar que eres un joven talento de Alemania

—Gracias —dijo Max asintiendo.

Volteó su vista a la cámara.

—Además Max Meyer formó parte de la lista de preseleccionados para el mundial de Brasil en 2014.

Algunos aplausos grabados se escucharon y Max solo sonrió. Había jugado una única vez con la selección mayor de Alemania, la experiencia fue demasiado agradable y hasta la fecha no lo olvidaba.

—Si no te molesta, tenemos algunas preguntas que se hicieron a través de redes sociales y seleccionamos para esta entrevista.

—No, adelante —aprobó Max.

—¿Qué haces en un día libre?

Alzó los hombros, en realidad no hacía actividades tan interesantes.

—Suelo dormir —todos en el estudio rieron—, ver películas, pasar tiempo con mis amigos, jugar FIFA —rio—, visito a mis papás en Oberhausen...

—¿Aún eres muy hogareño? —el entrevistador sonrió.

—No realmente, me he independizado mucho de mis padres desde que estoy en Gelsenkirchen.

El hombre asintió.

—Y... ¿qué hay acerca del amor? Creo que a más de una le interesa esta pregunta —rio.

Max no había contemplado que pudiesen hacerle esa pregunta. La verdad era que ni él mismo sabía cómo estaba su corazón pues jamás había sentido con alguna otra chica lo que con Alexandra. No podía mentir en cadena nacional acerca de ella pues la más afectada sería Alexandra y seguramente no se lo perdonaría.

—Estoy saliendo con alguien desde hace más o menos cinco meses —Max sonrió ampliamente—. Me siento feliz y agradecido con ella.

—Supongo que ella es parte de tu inspiración diaria —dijo el entrevistador casi afirmando.

—Así es. Ella es una chica magnífica que me ayuda a sobrellevar el día con día.

—¿Podemos saber algún dato acerca de ella?