Capítulo 4.

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Narra Pablo.

Estoy en una habitación que no conozco de nada. Valeria está conmigo, detrás de mí, sus manos se pasean por mi espalda quitando mi camiseta y acariciándome.

Besa mi espalda subiendo hasta mi cuello, la doy la vuelta y la beso, no puedo aguantar con esto más, la beso deshaciéndonos de la ropa en un instante sin dejar de besarnos.

Estamos sólo en ropa interior.

Desabrocho su sujetador, sin llegar a quitárselo y ahora soy yo el que besa su cuerpo entero. Necesito hacerla mía ya. La tumbo en la cama, cuando voy a deshacerme de la ropa que le queda, todo se vuelve negro...

Me despierto de golpe, sudando y con Valeria en mi cabeza.

Me levanto de la cama y bajo a desayunar.

La idea de ir esta noche al bar yo solo e intentar verla sigue en mia cabeza.

Yo ni quiero, ni puedo seguir así. Lo que siento por ella es una atracción que jamás había sentido antes, es más fuerte. Por eso necesito verla, de lo contrario acabaré volviéndome loco.

Desayuno jugando con mis sobrinos y voy al gimnasio antes de comer, hace bastante que no voy y me apetece.

Antes de ir al gimnasio me paso por la casa de Lolo para que me devuelva el coche. Anoche me dejó en casa y se lo llevó, no estaba en mi mejor momento para conducir y nos llevó a Rafa y a mí a nuestras casas.

[...]

La tarde la paso encerrado en el estudio, componiendo. Ya sé que no he terminado por completo este Tour Terral que tantas cosas bonitas me ha dado, pero siento la necesidad y quiero componer para el próximo disco.

Me paso encerrado horas aquí abajo. De de vez en cuando mis pequeños, están conmigo un rato, les enseño alguna canción nueva y se la aprenden para después cantarmela y bailarmela. Y yo cada vez que hacen eso me derrito por completo, y no es para menos.

Después de salir de aquí ayudo a mis hermanos a bañarles y darles de cenar y subo a arreglarme para ir al bar. Ojalá la vea y acabe pronto con esto que me está matando.

Mi madre entra en la habitación mientras me termino de arreglar.

Elena: Pablo hijo... ¿Te pasa algo hoy? -se sienta en la cama-

Pablo: ¿A mí? No, mamá -la digo nervioso- ¿Por qué lo dices? -me siento a su lado en la cama-

Es mi madre y me conoce mejor que nadie, por eso en ocasiones como esta odio que me conozca a la perfección.

Elena: Hoy te he notado raro. Yo sé que algo te ronda por la cabeza, te conozco como nadie, y también sé que no me contarás ahora qué te trae tan loco, pero quiero que sepas que cuando me lo quieras contar, aquí estaré -acaricia mi cara con ternura y sonríe-

Su sonrisa tranquilizadora hace que quiera contarle todo aquí y ahora, pero prefiero esperar a estar seguro de todo.

Pablo: Sé que siempre estarás. Gracias, mamá. Te quiero -la doy un beso en la mejilla y se va-

Elena: Yo a ti también, hijo -me dice sonriendo desde la puerta-

Termino de prepararme y me voy.

Son las once y media y estoy de camino, no sé si veré a Valeria, Dios quiera que sí. Si la veo estoy dispuesto a hablar con ella y a tratar de averiguar porqué me tiene así. Esto es algo que jamás me había pasado con nadie.

Aparco en coche y bajo, estoy más nervioso que a primera vez que vine.

Entro y voy a la barra, hoy no está Macarena, sino una chica rubia de mediana estatura, muy guapa, la verdad.

Me acerco y pido un Martini, como siempre.

Después de estar una hora allí sin ver a Valeria por ningún lado mis esperanzas de volver a verla se van como si fuera el hielo de mi vaso. A si que decido pedir la última e irme a casa.

No dejo de pensar en ella, hasta que unas manos se posan en mi espalda y se pasean por ella subiendo y bajando, sacándome de mis pensamientos.

XX: ¿Qué hace un chico tan bueno como tú en un lugar como este? -me susurra en mi oreja sin quitar sus manos de mi espalda-

Nota de autor.

¡Familiaaaaa!

Sé que este capítulo es más corto, pero quiero que el siguiente sea un poco especial, por así decirlo 😁 Me muero de ganas por enseñároslo, creo que os va a gustar.

¿Qué os ha parecido? ¿Os va gustando? ¿Quién creéis que es la persona que está detrás de Pablo?

Disfrutar del capítulo, os quiero muuuucho 💛

La Escalera.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora