Capítulo 3

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Nos instalamos en una cabaña, Danna, Chris, Matt y yo, sinceramente era un poco extraño, pensé que tendríamos camas por separado, pero al parecer me equivoque, había cuatro camas una para cada quien, Chris tomó la que estaba alado de la mía, Danna la que estaba en frente y Matt la que estaba alado de Danna. Todos dormimos un poco y para mi suerte esta ves si pude conciliar el sueño. Todos despertamos tarde, realmente tarde, ya eran las seis y el cielo comenzaba a oscurecerse, no pensé que dormiríamos tanto pero creo que había sido mejor ya que, no estaba tan cansada como en un principio, todos nos levantamos y cada quien tendió su cama para después salir al patio trasero que se veía hermoso ala luz de la Luna y las estrellas.

Después de haber dormido un poco, (o mucho) y de salir afuera donde se encontraba un lago hermoso, que alrededor tenia muchos árboles pequeños y grandes que se veía muy bien por la luz de la luna y las estrellas, y que realmente era un paisaje bellísimo, nos paramos un rato para después hacer algo.

-¿Por que no hacemos una fogata y comemos algo? -dijo Matt.

-Si, por que no. -dijo Danna.

-Buena idea primo, la mejor hasta ahora -dijo Chris.

Todos me miraron cuando se dieron cuenta que no respondía, estaba completamente perdida, el lago lleno de agua me llamaba la atención, quería ir y volver a usar ese extraño poder, pero sabía que seria imposible por que ellos estaban aquí, y no podría explicarles por que podía hacer eso, y quizá pensarían que soy una bruja o algo así.

-¿Coral? -dijo Matt, sacándome de mis pensamientos.

-Ammm.... ¿Que? -dije confundida.

-¿Que si te gustaría que hiciéramos una fogata junto al lago? -dijo Chris.

-Ah, claro, buena idea -conteste.

-Bueno entonces voy a buscar un poco de leña -dijo Matt.

-Yo te acompañó -exclamó Danna.

-Iré a buscar algo para comer -dije.

Camine hacia la cabaña a buscar algo para la fogata, fui directo hacia la cocina y abrí el refrigerador, saque carne y una pequeña bolsa de salchichas, aunque no eran de mi gusto, quisa a ellos si le agradaría comer algo de carne o tocino o lo que fuera esta cosa que tenía en mis manos (que por cierto tenía un aspecto horrible).

-Es un lugar maravilloso, ¿no? -escuche la voz de Chris.

-Si, es un lugar muy hermoso. -dije sonriendo mientras volteaba.

-Si, igual de hermoso que tu -sonrió.

Y hay fue donde mis mejillas se sonrojaron, sabia que ese comentario me habia puesto nerviosa, por que mis manos sudaban y sentia calor en todo el cuerpo. Lo mire y le sonreí, el hizo lo mismo y me sonrió. Realmente era tan lindo y muy simpático, Chris era una persona amable y comprensiva, aunque no sabia si acercarme a él ya que era el primo de mi casi mejor amigo, de Matt.

Me diriji hacia una alacena y saque una bolsa de bombones, fue un poco complicado por que estaban en la parte de arriba y yo como no soy una chica de gran altura (en pocas palabras como tengo estatura de minion) se me dificultó, y Chris tubo que ayudarme a bajarla, me sentí un poco nerviosa al sentirlo cerca de mi, así que me aleje y deje que él bajará la bolsa.

-Gracias -dije tímidamente.

-De nada pequeña -dijo acercándose a mi.

Y otra vez estaba muy cerca de mi, me tomo por el brazo y como es mi costumbre baje la mirada, el tomo mi barbilla y levantó mi cabeza, quería moverme pero no podía parecía que mis pies se habían atorado en el piso y mi cuerpo fuera como de piedra por que no podía moverme, se fue hacercando más a mi y sentí su respiración otra ves.

CORALINE: LA PRINCESA PERDIDA #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora