¨Nathan¨
Pase tres veces por la habitación de Coral, y note que no estaba sola, la primera ves que había pasado estaba abrazada con su amigo Matt, ella estaba llorando y no entendía por que, no tenía ni la menor idea de porque. La segunda ves que había pasado estaban mirándose y coral se veía mucho mejor, al parecer su amigo había logrado calmarla un poco. La tercera ves que pase vi a Matt cargando a Coral en sus brazos llevándola a la cama, ella estaba dormida, seguí observando y Matt le estaba poniendo las cobijas encima después le dio un beso en la frente y se dirigió a la puerta, yo me quite de inmediato antes de que el me descubriera hay.
Cuando salió, cerró la puerta y luego se metió a su habitación, yo camine hacia la puerta de Coral, y me quedé parado por un momento, quería entrar para ver como estaba pero no quería molestarla, además era tarde y estaba dormida, así que decidí meterme a mi habitación y no salir de hay hasta el día siguiente.
~~*~~
Al día siguiente todo parecía más tranquilo, no había entendido por que había comenzado a llover hasta que vi a Coral llorar debajo de la lluvia. Era obvio que la lluvia había sido provocada por ella, ya que los que podían controlar el clima, o por así decirlo eran los que poseían los poderes de los cuatro elementos, en este caso ella, que era la única que los podía controlar.
Salí de la cama y me dirigí hacia afuera, era temprano y seguro todos estaban desayunando. Al salir de la habitación me encontré con los cuatro amiguitos afuera de sus habitaciones, todos se miraron con una sonrisa, yo los ignore y decidí bajar.
-Matt. ¿puedo hablar contigo? -escuche a Coral desde arriba.
-He.... si claro. -le contestó el.
Ya no escuche más y baje dirigiendome a la cocina. Al entrar encontré al Sr. Jonson y la Sra. Margaret conversando. No les hice caso y me senté, no tenía ganas de escuchar nada.... hoy no.
Cuando termine el desayuno, salí y me metí a mi cuarto, tome la pequeña piedra que había encontrado en aquel cofre debajo del árbol y salí al balcon, me senté en el suelo recargandome en la pared y comencé a observar el pequeño diamante o mejor dicho, la mitad del diamante.
-Hola... -escuche la vos de Coral.
-¿Acaso jamás tocas? -le dije mirándola.
-Sólo cuando la puerta esta cerrada. -dijo mirando a su lado.
Yo voltie, mirando hacia atrás y note que había dejado la puerta abierta.
-Claro. -dije agachadonme y mirando la piedra nuevamente.
Ella se acercó al muro de piedra, giro y se sentó quedándose frente a mi, sólo estábamos a un metro de distancia.
-¿y que quieres? -le pregunté aburrido.
-Solo quería saber como estabas, ayer saliste muy serio de la oficina después de aquella.... conversación. -dijo mientras alternaba su mirada entre mi y mis manos.
-Al igual que tu. -dije mirándola.
Ella me miro e hizo un gesto con sus labios.
-iiiOye...!!! -dijo exaltandose- tengo un dije parecido a ese.
Yo mire el dije que traía con gesto de no comprender lo que decía, la mire y ella estaba sacando algo de su cuello, se quitó el collar que traía puesto y lo puso en su mano, para después mostrarmelo, el dije que traía ella era idéntico al que yo tenía, sólo que el mío era un poco más pequeño de altura.
ESTÁS LEYENDO
CORALINE: LA PRINCESA PERDIDA #1
FantastikDespués del campamento Coraline encuentra en medio del bosque una enorme puerta, que tras aberla abierto se da cuenta que ya a estado ahy. Ella no sabe que es la princesa perdida de aquel lugar, y después de varios sucesos extraños que le habían pa...