Juego de venganzas -Narry

Capítulo 23.

Niall


 

Louis no dejaba de mirarme fijamente, es como si estuviera tratando de descifrar algo en mí, algún tipo de indicio que le compruebe algo.

-Louis... -Le llamé. Este hizo caso omiso a mis palabras y siguió observándome con detenimiento. Empezaba a asustarme –Esto es absurdo –Murmuré por lo bajo con algo de cansancio. Lleva así una hora entera.

Después del indecente con Daniel, estuve con Harry las dos primeras horas de clases. Ambos decidimos saltarnos las primeras clases y quedarnos hablando un rato. Después de ello volvimos al instituto como si nada, cada uno por su lado.

Louis no me ha dejado explicarle porque falté, ni siquiera me ha dejado hablar. Lo único que ha hecho este tiempo es observarme, y como él dijo hace un rato: "Descubrir que fue lo que paso contigo con solo mirarte". Claro, y yo predigo el futuro.

-Estabas llorando –Dijo Louis a mí costado con tranquilidad. Fruncí el ceño y levanté la cabeza para encontrarme con la mirada inquisidora de Louis sobre mí.

-No, claro que no –Negué con la cabeza una y otra vez, tratando de parecer calmado.

-Sí, claro que si –Dijo este en el mismo tono que yo. Su mirada expresaba preocupación y un poco de confusión –Algo te paso, Niall. No creo que hayas estado llorando solo porque si, además ¿Por qué llegaste dos horas tarde? Eso es muy raro –Dijo con suspicacia. Él sospechaba algo.

-Louis, estas siendo algo exagerado. Primero, no estaba llorando; y segundo, falté porque tuve un pequeño inconveniente... -Louis enarcó una ceja y luego sonrió con diversión. No se creía nada de lo que decía.

-En primer lugar, Niall, no soy idiota. Sé que has estado llorando porque tus ojos hinchados me lo demuestran –Maldecí por lo bajo y luego bajé la cabeza, avergonzado –Y segundo, si hubieses tenido algún tipo de inconveniente, entonces no hubieras venido a clase, pero aquí estas –Louis mantenía una sonrisa triunfante en sus labios. Había dado justo en el blanco.

-Louis, no hagas esto tan difícil. No me ha pasado nada ¿Ok? No veo el porqué de tu jodida preocupación –Bufé. Louis suspiró con frustración y luego pasó una mano por su cabello.

-Mira Niall Horan, esta es la última vez que te lo diré y espero que escuches atentamente. Me dirás porque motivo, razón y circunstancia has llegado tarde y además de ello, llorando –Su voz sonaba firme y fuerte. No había ningún rastro de burla en ella.

 
-¿Por qué eres tan difícil? –Pregunté con una mueca. Louis sonrió ampliamente y luego se encogió de hombros.


 

-¿Por qué eres tú tan difícil? –Respondió con otra pregunta. Suspiré con pesadez y recé al cielo para que la impaciencia no me ganara.

-No te contaré nada, así que no sigas insistiendo –Louis se cruzó de brazos y formó un pequeño puchero con sus labios. Parecía que estaba a punto de llorar –Y no trates de chantajearme con eso, no funcionara esta vez –Louis hizo un gesto de desagrado y luego desdobló sus brazos, para luego sacarme la lengua infantilmente.