Capitulo 96.

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-si me das un beso me como esa asquerosa sopa- papá hace una cara de asco mientras mira la cuchara con sopa que le ofrece Sally.

-Antonio! Estoy trabajando, no puedo hacer eso- Sally le regaña. Muerdo mis labios para no reír.

-entonces no tomaré esa asquerosa sopa. Mírala nada mas, es verde- papá no exagera, en serio que esa sopa se ve asquerosa.

-Antonio, tienes que tomarla. Llevas mas de dieciocho horas sin comer, tiene que bajar algo liquido y suave a tu estomago- insiste Sally que vuelve a acercar la cuchara a la boca de papá, pero éste muerde sus labios y gira la cabeza hacia otro lado.

-Antonio! Pareces un niño, vamos tienes que tomarla-

-te dije que si me das un beso me tomo esa cosa.. Pero como no me lo quieres dar entonces no la tomaré- se queja.

Sally resopla y vuelve a meter la cuchara dentro de la sopa.

-será uno solo Antonio, y rápido porque nos podrían ver y me despiden del trabajo- a papá enseguida se le ilumina la cara y sonríe.

-nadie se atrevería a despedirte-  Sally duda en acercarse a papá.
Pero entonces papá pone su mano sana en el cuello de ella y la atrae a él.

-es malo espiar señorita Esmeralda- asustada doy un salto echándome hacia atrás, cubro mi boca con la mano para no hacer algún sonido.
Miro al dueño de la voz enojada.

-Allan me asustaste!- le regaño. Respiro profundo para tranquilizar mi corazón.

-que haces espiando detrás de la puerta?- me regaña ahora él.

-no estaba espiando.. Solo viendo- alza una ceja y se cruza de brazos.

-Esmeralda Parker...- ruedo los ojos.

-ya Allan! Esta bien! Reconozco que estaba espiando a papá y a Sally... Pero adivina que??- digo con misterio y bajando la voz. Allan vuelve a alzar su ceja.

-creo que se besaron!- digo chillando bajito para que nadie me escuche.

-los viste?-

-no, llegaste tu y no me dejaste ver!- le reprocho.

-entonces que bien que llegué a tiempo- me sonríe con suficiencia.

-eres pesado- golpeo su hombro con mi puño.

-y tu una chismosa!- abro la boca asombrada.

-me estas diciendo chismosa??!-

-si, y no me puedes contradecir porque es cierto- ruedo los ojos. Se hacen unos minutos de silencio.

-crees que deberíamos interrumpir?- pregunto mirando hacia la puerta entrecerrada de la habitación de papá.

-te gustaría que te interrumpieran cuando estas besándote conmigo?- resoplo, me cruzo de brazos y me siento en el mueble.

Allan se ríe por mi berrinche y se viene a sentar a mi lado abrazándome. Frank llega a los minutos, pregunta si sabemos algo y le digo que no se nada, estoy esperando a que aparezca Sally.

A los diez minutos llegan tio Kevin, y Cristina. Hacen la misma pregunta pero esta vez antes de responder, Sally sale de la habitación de papá con una sonrisa enorme, al vernos se sonroja un poco y nos saluda.

-como amanecen?-

-muy bien Sally, tu que tal?- le habla Allan.

-muy bien. Antonio ya se encuentra despierto, su estado de salud está muy bien. Tengan cuidado cuando vayan a abrazarlo, sus huesos fracturados aun siguen recuperándose- dice contenta.

-que hay de Jeff?- pregunto apenas termina de dar el diagnostico de papá.

-con el joven Jeff hay que esperar un poco mas, en éstas ultimas horas la hinchazón de su cerebro ha disminuido, aun esta en observación. Creo que hoy estará ahí todo el día-

-podemos verlos?- pide tio Kevin.

-a Antonio si, pero a Jeff no- nos sonríe y se dispone a irse, pero la detengo antes.

Todos entran a ver a papá, Joel llega a tiempo con los chicos y entran todos a ver a papá haciendo un escándalo de voces y risas. Allan se queda conmigo,

-Sally, gracias por todo lo que estas haciendo por nosotros. De verdad, no sabes cuanto te agradezco-

Frank se ha ido por el pasillo, su cara no expresa nada.

-no tienes nada que agradecer linda. Es mi trabajo- me sonríe.

-Sally, que me dices de Jeff? Se pondrá bien? Volverá a estar como antes? Se sincera por favor- le pido.

Ella suspira profundo, mira a Allan y luego a mi. Mi hombre entrelaza nuestras manos.

-Esme.. No puedo dar un diagnostico seguro de Jeff, hay que esperar un tiempo mas. Hay posibilidades de que pierda la memoria por completo, o puede que no y que solo olvide ciertos sucesos o personas que han estado en su vida. Pero con el tiempo, poco a poco ira recordando todo. Hay que tener paciencia y esperar veintiocho horas mas para ver que tanto puede disminuir la hinchazón. Él estará bien, no hay de que preocuparse-

-podrías hacer un favor especial?.. Deja que Frank entre a verlo, por favor- le pido.

-veré que puedo hacer- me guiña un ojo y sonríe. Se va caminando por el pasillo donde paso Frank hace unos minutos.

-Frank es muy inexpresivo-

-si.. Se que esta mal por Jeff, pero no lo demuestra. Por eso le pedí a Sally que le dejara verlo- mi hombre me sonríe y deja un beso en mi frente.

Entramos a la habitación de papá.
Todos están parados al rededor de la camilla, hablando con papá.

-denme espacio. Quiero ver a mi príncipe!- empujo a Alex hacia un lado y a tio Kevin.

-Papi!- murmuro.

No puedo evitar no llorar, su piel sigue pálida, tiene rasguños en su cara y brazos, uno de sus brazos esta enyesado, quiero abrazarlo pero recuerdo lo que dijo Sally y entonces solo lo abrazo por el cuello y le dejo miles de besos en su mejilla.

-estoy bien mi princesa, no llores-

-me asuste mucho papi- lo miro a los ojos y acaricio su cara con mis manos.

-te duele algo?-

-solo un poco, pero los medicamentos calman el dolor. No te preocupes- le sonrío y él me regresa la mirada.

Pasamos toda la mañana con papá, hasta que llega una enferma y nos pide que nos retiremos, no quiero irme pero la señora insiste y me toca salir.

-deberían ir a casa a descansar un poco, el horario de visita en la tarde es de cuatro a seis. Pueden regresar a esa hora- nos dice Sally y luego entra a la habitación de papá cerrando la puerta detrás de ella.

Tranquila por saber que papá esta muy bien acompañado, me voy junto con mi familia y mi hombre a casa a descansar. Estos días serán muy largos y pesados.

Mi preocupación por Jeff no ha disminuido, después de unos tres días muy largos y agotadores Sally nos informa que papá ya puede ir a casa acompañado de una enfermera, pero papá no quiere irse, y todos sabemos porque, pero nadie quiere decirlo en voz alta.

Tambien nos avisa que la hinchazón en el cerebro de Jeff ha bajado bastante y eso nos alegra un poco, a pesar de que él no ha despertado.
Con mucho cuidado y acompañado de una enfermera pasada de años papá es llevado a casa, acomodamos su cuarto llevándole varias cosas que estaban en su oficina para que no se queje y quiera bajar a la oficina.

Gracias al cielo su recuperación es fácil pero un poco lenta. Lo importante es que esta despierto y sano con nosotros.
Mientras con Jeff, aun tenemos que esperar.

Ojos Esmeralda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora