Capitulo 32.

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Que hago ahora? Ya van dos películas.
Y ahora ando de un lado a otro en la sala.
El sol ya se oculta. Me siento en el piso enfrente de la gran ventana a ver el atardecer.

-señorita Esmeralda. Disculpe que la moleste. Quiere cenar?-

-Mary, no hace falta que me digas señorita, puedes tutearme, dime Esmeralda o Esme- le digo con una sonrisa para que se sienta cómoda.

-esta bien. Esme quieres cenar?-

-no. No tengo hambre, gracias-

-segura?-

-si, segura. No te preocupes-

-esta bien. De todas formas si necesitas algo o quieres comer me avisas-

-gracias Mary-

La mujer sale de la sala y ya el sol se ha ocultado.

Daré una vuelta dentro de la casa para conocerla; ya que el dueño no se ha molestado en hacerlo.
El primer piso ya lo conozco, así que subo las escaleras.

El espacio entre todas las habitaciones parece una sala. Decorada con muebles y una mesita de centro.
Empiezo abrir puertas por mi mano derecha.

El primer cuarto consta de dos camas individuales, un televisor incrustado en la pared, un pequeño vestier y un baño. Parece que nadie lo usa, todo esta nuevo y los closet vacíos.

Salgo y entro a la segunda puerta que esta a unos dos metros separada de la primera. Casi todas las puertas estan separas por esa distancia. El segundo cuarto parece mas un pequeño cine que un cuarto. Una tele enorme cubre la mayor parte de la pared, una de las paredes es una ventana del techo hasta el piso, se puede ver la entrada de la casa, tambien tiene un vestier, el baño y una cama matrimonial muy grande.

La tercera puerta que sigue de este lado del pasillo esta cerrada.
Continuo con la única puerta que hay en la pared de al fondo, creo que mejor la dejo para el final, esta seguro es el cuarto de Allan, me tomare su tiempo para mirarla.

Paso al otro lado del pasillo. La primera puerta que esta cerca a las escaleras esta cerrada, la segunda es un cuarto espacioso, una mesa de billar, en una mesa pequeña con dos sillitas, una tabla de ajedrez, un mini bar en una esquina, un mueble en forma de L, el piso esta forrado en alfombra, un tv grande y como no, las consolas de video juegos, tambien un pequeño baño.

Salgo y sigo con la puerta de al lado. Un cuarto hermoso, una cama matrimonial grande redonda, se ve muy comoda, me siento y la pruebo, tan suave que podría quedar dormida enseguida, pero me falta por echarle un ojo al cuarto de Allan, así que me paro y sigo mirando el cuarto.

La pared enfrente de la cama es de vidrio abarca de un extremo al otro. Puedo ver desde aquí el jardín y el lago. El vestier es amplio, y mi ropa ya esta acomodada en los closet y mis joyas organizadas muy cuidadosamente en un mesón de marmol. En el baño todas mis cosas están organizadas muy meticulosamente. El shampoo, las cremas, jabones, todo. Una tina espaciosa ubicada encima de dos escaleritas, a un lado la ducha, es un baño muy espacioso. Al parecer este sera mi cuarto durante un buen tiempo. Me gusta.

Salgo y llego hasta el cuarto de Allan, seguramente tiene llave y no podré entrar, hago el intento de abrir la puerta y esta cede. Si mi cuarto me gusta, el de Allan me encanta.

El techo y la pared mas larga del cuarto es de vidrio, la luna llena se ve hermosa, el cielo estrellado, el reflejo de estos en el lago. Es espectacular la vista. Su cama enorme y cuadrada, podría dormir toda una familia ahí.
No hay televisor por ni un lado; y para que? Teniendo esta vista no querría mas distracción.

Me quito los zapatos y me subo a la cama, apoyo mi cabeza en una de las almohadas, huelen al perfume de Allan, respiro el aroma y me acomodo, apoyo mi cabeza en una almohada y otra la abrazo. Contemplo el cielo desde esta posición, todo esto es tan tranquilo, no parece que este secuestrada sino en un retiro, unas vacaciones alejada de todos; menos de ese hombre que me trae loca.

Allan Axel, el hombre del que me he enamorado perdidamente. Sus actitudes, palabras y acciones para nada común. Me va a volver loca.

Me duermo sin darme cuenta, pensando en él. En cómo seria una vida los dos juntos, despertando y durmiendo uno al lado del otro; aceptando nuestras virtudes y sobre todo nuestros defectos.

Te amo Allan, con toda mi alma.

Ojos Esmeralda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora