Alaska se sentó a esperar el bus, había decido ayer que se levantaría antes, para así no perder el bus.
Minutos después se subió al bus, le sonrió al conductor, y se sentó en los primeros asientos, pero cuando iba a mojar el asiento se dio cuenta que no había traído la botella, se puso nerviosa, no quería que nadie se sentará, no quería hablar con nadie, empezó a mover los dijes de su pulsera ansiosa.
El conductor la vio, negó con la cabeza y sonrió.
— Eh Alaska— la llamo.
La chica lo vio.
— No te preocupes, sólo respira y recuerda que todo pasa por algo, ella asintió aún nerviosa.
Pero hizo lo que el dijo, respiro se puso sus audífonos le dio play a la canción y volvió a respirar.
Demons- Imagine Dragons
Alaska amaba esa canción. Media hora después sintió a alguien al lado suyo.
— Oye hoy no has mojado el asiento—, Alaska se relajó al escuchar la voz de Ian ya que por lo menos era el y no otra persona que de seguro se burlaría de ella— Tengo una duda ¿por que no viniste ayer?— ella lo miro confusa— hablo de qué por qué no te subiste al bus ayer, explico el.
— Perdí el bus, me levanté tarde— dijo Alaska en murmullo.
— Oh bueno—, Ian sonrió y le quitó el audífono para ponérselo— Me de 1975.
Alaska asintió.
— ¿Color favorito?, pregunto Ian.
— Azul, dijo ella en voz baja.
— ¿Cuándo cumples?.
— Cinco de septiembre.
— ¿Años?, el estaba feliz por que Alaska respondía.
— Dieciséis, y cuando el iba preguntar otra cosa, el bus paro frente al colegio.
Y Alaska bueno, pues Alaska se pasó por encima a Ian y salió corriendo.
ESTÁS LEYENDO
El asiento mojado.
Short StoryElla. Ella es asocial, muy asocial, tanto así que cada vez que sube al auto-bus, moja el asiento de al lado para que nadie se siente. Y nadie lo hace, nadie quiere mojarse el trasero. Excepto él, bueno él tampoco quiere mojarse el trasero, pero si q...