Solo puedo pensar en la razón por la que se ha derrumbado de esa forma ante mí. ¿Cual será el motivo? Solo sé que verlo así a mi lado, roto, a la persona por la que más he sentido sin ser de sangre, me tienta a abrazarlo y llorar en sus brazos, pero el miedo me lo impide. Seguramente me apartará o me echará. Las lágrimas siguen cayendo por mi cara, no puedo dejar de llorar, pero lo que si que puedo evitar es el dolor y la pena que siento y que está oprimiendo mi pecho y amenazando con dejarme sin respiración. Bajo del coche y comienzo a caminar, a dar vueltas para intentar tranquilizarme un poco, pero Cameron sale del coche, con los ojos inchados a pesar de haber llorado escasos minutos.-Ven- me dice evitando encontrarse con mi mirada. Le da verguenza que le haya visto llorar, como a cualquiera, y solo querrá hacerme prometer que nadie se enterará. Me hace un gesto con la cabeza para indicarme que le siga mientras se adentra en el bosque, a través de los árboles.
Le sigo, contemplando a la distancia al coche, por si no sabemos como volver y consigo recordar el camino. Me lleva muy adentro, hasta un lugar sin apenas arbustos ni piedras, solo una especie de tierra rojiza.
- No sé por dónde empezar- se atreve a mirarme a los ojos, pero durante apenas segundos- Aver... Leah... Lo que ha pasado hoy no puedes....
- ¿ Que eres ?- Antes de que pueda decir nada más que de por finalizado todo lo ocurrido hoy, le tengo que preguntar lo que ha pasado por mi mente una y otra vez durante toda la noche. Una persona puede tener telepatía o algo de estas cosas que salen en la tele, porque tengo segurisimo que lo que hoy he visto entre Cameron y James no era simple fuerza, pero si fuera una de estas hablididades tan extrañas, seria muy raro que la tuvieran dos personas y tan conocidas. Demasiada coincidencia, y hoy no me pienso ir sin explicaciones.
-¿Qué? - tartamudea, seguro que para ganar tiempo.
-¿Eres un vampiro?¿Un hombre lobo? ¿Un alienigena ? ¿Un mago? Dime que eres. Lo necesito saber- le digo con la esperanza de tranquilizarlo, ya que esta tragando una y otra vez como señal de nerviosismo. Podría existir Harry Potter, o alíen o Dracula, porque ahora todos los jóvenes estamos a la idea de que podrían existir cualquiera de esos seres.
-No, no, no y no.- niega con la cabeza.
-¿Pues entonces?- tengo el don de saber si alguien miente o dice la verdad, y sé que nada de lo que ha dicho es mentira, por sus gestos tan seguros y su voz, temblorosa pero sincera.
-No lo entenderías- logra contestar.
-Pues hazme entenderlo, Cameron. No te entiendo a ti, para nada, nunca te he conseguido entender a pesar de conocerte de toda la vida, y creeme, lo he intentado. Y ahora, tienes poderes mágicos tipo Harry Potter que no puedo entender. Lógico que si no me lo explicas no lo entienda. Estoy harta. Confía en mí. Jamás te haría daño- le digo en voz baja, tranquila, acercándome a él cada vez más, hasta mirarle a la cara fijamente.
-No puedo, no es por mí. Es complicado. No soy solo yo.- me acerco a él con cara suplicante. Me mira con los ojos llorosos de nuevo, y se deja llevar otra vez por el revuelto de emociones que debe tener en su interior. Se derrumba frente a mí, apoyándose en un árbol, de pie, escondiendo su cara entre sus brazos.
Le tengo que abrazar. Necesita un abrazo tanto como yo necesito el poder sentirlo junto a mí.
- No llego a llegar a tiempo y James habría.... TE habría- comienza a explicar. ¿A caso está llorando por mí? - No sabes lo que es escucharte gritar y buscarte por todas partes, esperando que estés bien y que cuando te encuentre no haya llegado demasiado tarde, y luego, encontrarte así... con él haciéndote eso...- sigue diciendo, apretando la mandíbula mientras su débil voz me explica, mientras sus ojos me miran fijamente con preocupación y su voz se corta. Entonces, descaradamente, sus ojos se posan en mi vestido roto, que me deja la mita de mis pechos al aire.

ESTÁS LEYENDO
HIM
RomanceLeah es una chica de 15 años corriente, en un instituto corriente, con una obsesión poco corriente. Desde los 4 años esta locamente enamorada de Cameron Dessner, un chico de su clase que no es del todo un adolescente corriente, que trata a Leah com...