Lydia® [LIBRO 1-2] BORRADOR

2. San Valentín

Mi vida y las de mi padres después del cumpleaños cambiaron un poco, no fue un cambio tan radical pero si algo diferente. Desde aquel día mis papas y la familia de Robert cortaron toda amistad que tenían, por un lado mis papas se molestaron por lo que sucedido y por qué todos ellos decían que yo tenía la culpa de todo, ya que, mi familia era algo extraña. A mí no me importaba en lo más mínimo que se pelearan, incluso era mejor, así no soportaría las cenas con esos señores durante los fines de semanas.

Ahora, después de lo que supuestamente hice aquel día del cumpleaños. El abuelo ha venido a casa apenas papa le ha informado lo sucedido, me han dicho que es un don, pero en realidad no lo considero tanto así. Realmente desde que me he manifestado ha sido hasta casi imposible lograr mantenerme en calma. Mientras lloraba, hacia mover cosas y cuando carcajeaba las cosas se salían de control. Al nacer el don de papa y de mama se mezclaron, podía sanar y destruir si quería al mismo tiempo, el abuelo era alguien muy sabio, tenía la habilidad de lograr atravesar dimensiones, es decir, podía comunicarse con seres queridos que han fallecido.

¿Una familia muy normal no?

Desde ese día estado muy asustada ¿por qué? por qué pasando unos días volví a desearle el mal un profesor y terminó rodando las escaleras, ya no podía pensar nada me puse muy triste pero el abuelo me dijo que podía quitarles el dolor y a la vez hacer que no se cumpla lo que deseo ¿cómo? solo pensar en el "no cumplir". Solo era una palabra ¡una palabra! y podía haber evitado que el profesor se cayera de las escaleras, evitar que el cabello de una compañera de curso se llenara de goma, incluso evitar el accidente de Robert.

Hablando de ellos luego de lo sucedido con los Robert se mudaron lo más pronto que pudieron, algunos del vecindario ya ni nos hablaban por los rumores que hizo el señor Adam. (papá de Robert) Eran pocos que venían a cenar de vez en cuanto respecto a la casa que dejaron los Robert vinieron unos nuevos vecinos son muy agradables hasta ahora supongo ya que ninguno de los vecinos ha dicho sobre lo extraño que somos, recuerdo que estaba jugando en mi patio con mi amiga Violetta y lo primero que vi fue como un niño de cabello rojizo igual al mío bajaba emocionado al ver su nueva casa, tiene un año mayor que yo pero desde aquel día que nos presentamos me agrado mucho su nombre era Tom pero le decía Tommy nos hicimos buenos amigos con Violetta siempre salíamos a jugar en la tarde, después de meses de conocernos nos hicimos más que amigos.

Era la novia de Tommy.

Todo iba muy bien, incluso me sentí una niña normal, hasta me enamore. Deje de tener pensamientos negativos hacia los demás, le conté a Tommy sobre lo extraño que tengo pensé que se asustaría pero no fue así me apoyó y dijo que le parecía increíble. Pero como si estuviera escrito en mi vida algo tenía que salir mal.

Y esta vez la culpable fue Violetta, mi mejor amiga.

Todo iba bien mis padres aceptaron mi relación a los trece años y a sus padres le agradaba mucho, Violetta tenía novio pero terminaron por razones desconocidas recuerdo como vino llorando donde nosotros, estuvimos con ella todo el tiempo pero al pasar unos días noté como Tommy y Violetta estaban más juntos incluso me sentí excluida en muchas cosas.