¿Cómo?

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-¿Es una broma verdad? No lo comprendo.
-Tranquilo, aún no voy a atacarte, porque aún no te puedes equiparar a mí y no sería justo.
-Que demonios pasa, ¿equipararme cómo?
-No tienes armas ni puedes crearlas, por no hablar de tu incapacidad para transformarte. Sólo has conseguido cambiar de tamaño y es insuficiente, así que no puedes seguir. Tendrás que aprender.
-A crear armas, de la nada, eso es imposible la materia no se crea ni se destruye, soló se transforma, esa ley es universal y.- me callé, no fue por voluntad propia, ella se había metido en mi cabeza y me había obligado a dejar de hablar.
-Bebe, hay muchas cosas que no sabes aún. Y yo no tengo el tiempo necesario para enseñártelas así que alguien lo hará por mi, estábamos debatiendo y hemos deliberado que te vamos a enviar sólo por los planetas para que allí te instruyan porque nadie quiere ir contigo y yo no puedo, lo siento. Has de viajar sin acompañantes partirás de inmediato y te dirigirás al mundo número 947 y allí aprenderás el arte de la transformación, si lo consigues, tú mismo podrás decidir qué es lo próximo que quieres hacer y dónde ir. Ten en cuenta que hay conocimientos que jamás dejaremos salir de la capital y que para aprenderlo todo lo que necesitas debes volver, pero una vez vuelvas no podrás irte de nuevo. Además no puedes regresar a tu planeta, pues nos obligarías a ir allí a matarte por desertar.¿Tienes alguna pregunta?

-¿Porqué no me habíais dicho nada de la parte de la ciudad en la que hay humanos? ¿Porqué nadie cree que deba ser emperador? ¿Porqué no podéis decirme cómo transformarme aquí sin enviarme lejos? ¿Y porqué no evitar que cada segundo que pasa piense que hice mal al venir?

-Por tu bien, porque nadie en el imperio cree en los humanos después de lo que han hecho en algunos mundos, por que para transformarse hay que saber bien en qué se quiere uno transformar y eso aquí no lo puedes aprender y a la última pregunta no tengo respuesta.

-¿Está muy lejos ese mundo?

-Sólo unas pocas decenas de años luz, llegarás allí en cuestión de horas usando las puertas de salto que te enseñé a usar en la nave mientras veníamos.

-Sé que hay algo que no me estáis contando. Voy a ir sólo en una de vuestras naves, si ni siquiera me dejabais andar por el parlamento.

-Si, considerarlo como parte de la prueba. Y con respecto al parlamento, espero que no vuelvas a más protagonizar incidentes ni aquí ni en ningún otro sitio.

-¿Y cuál es el objetivo de mi viaje, porque aún no me queda claro?

-Ya te lo he dicho, aprender y comprender, para que puedas ser un maestro del arte de la transmutación.

-¿Medio de transporte?

-Vamos a dejarte una nave, te la voy a mostrar y después podrás partir.- me dijo mientras se acercaba a mí, cuando pasó por mi lado lancé una última mirada a la sala, llena de lo que supongo serían los seres encargados de llevar a cabo la prueba de los dioses. Me di la vuelta, y descubrí extrañado dónde debía estar la puerta, a la que el lobo había arrancado el marco, había un hangar con naves bastante grandes pero sin llegar a ser de la escala de los imperiales . Hoy ya sé que lo que había hecho la emperatriz era abrir un portal, agujero de gusano o como queráis llamarlo, con el hangar para llegar allí rápidamente, una vez pasé el portal se cerró.

-El mundo al que vas es el mundo al que enviamos a todos los humanos que quieren pasar la prueba y no saben transmutarse, tienes que aumentar de tamaño hasta unos 7 metros, porque es el que tienen allí y una vez llegues di quién eres, no vamos a avisar de que vas para que sea más emocionante. No enfades a nadie por lo que más quieras, no les gusta que les toquen el pelo ni les llamen cachorros, no les pises la cola y no les insultes porque entienden perfectamente todas las lenguas que puedes hablar y te comerán si se sienten ofendidos. Puede que parezca que te quiero meter el miedo en el cuerpo, pero allí ya no tengo poder para salvarte si las cosas se tuercen, ya vas a estar sólo definitivamente. Tu nave es esa, te enseñarán algunas pocas cosas sobre ella que tienes que dominar para poder hacer tu primer gran viaje por ti mismo, yo ya te dejo, vuelve de una pieza. Esta es una prueba de sentimiento, no de inteligencia o fuerza bruta.

La Verdadera Gran Historia del Universo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora