**Vi Lexington**
"Cubro tus labios: la fresa húmeda me da sus frutos.
Avanzo por tu cuerpo: y la vida es más viva.
Amantes al filo del desastre
Ya no quedan paraísos"
"Cubro tus labios", Miguel Ángel Flores.
Mientras sus manos recorren mi cuerpo con cuidado, me retuerzo una y otra vez, cada roce es delicado y perfecto, cuidadoso y sincero, no quiero que pare, no quiero que se detenga.
Aprieto su mejilla en un agarre lleno de necesidad, pero retira el rostro con violencia, provocando que cese sus caricias en mi cuerpo.
-¿Qué pasa? —digo con voz ronca.
Entierra su rostro en el hueco de mi hombro y no se mueve, acaricio su cabello intentando relajarlo, pasan segundos, minutos, pero no se mueve.
-Lo siento —intento moverme, pero él me lo impide—, yo... no tiene que ser ahora, lo siento mucho.
Es terrible describir lo que siento, la vergüenza que adorna mi rostro es completamente visible, pues sentir que lo he decepcionado con mi cuerpo, o con mi manera de acarícialo, me hace sentir terrible, era obvio que no iba a ser sencillo para alguien cómo él tener que acariciarme...
-¿Lo sientes? —susurra.
Se incorpora y busca su camiseta, cuando se agacha por esta, puedo notar que su mejilla antes roja, se empieza a tornar de un color morado y rojo, me levanto rápido y camino hacia él.
-¿Qué te pasó? —lo intercepto cuando trata de evadirme.
-Déjalo, Vi...
-Dime qué te pasó, ahora mismo —esta vez repito firme.
Me voltea a ver con violencia y toma mis brazos para pegarme a la pared y poner su rostro a milímetros del mío.
-¿Qué se solucionaría con decirte? –Gruñe—. Dime, Vi, ¿qué se solucionará?
Una vena en su frente se marca, debido a la fuerza emitida en la expresión de su rostro.
-Deja de decir que lo sientes, deja de tener lástima por mí, no la necesito.
-No es lástima, Joe —muevo mis brazos pero no disminuye la fuerza de su agarre.
-Él siempre será una mierda, eso no cambiará —murmura.
-Tranquilo, cariño. Suéltame por favor, me haces daño —pido, pero él no cede.
-Deja de alimentarme con tu luz, si lo sigues haciendo, te quedarás en las tinieblas.
-¿Me estás pidiendo que te deje? —mis ojos se llenan de lagrimas.
-¡No!, mierda no, no puedes dejarme, eres lo único que me hace bien...
-Entonces, ¿por qué me dices todo esto?
-Porque deseo cada parte de ti, entregarme a ti, pero tengo miedo. Tú eres tan perfecta, que, no tolero la idea de que me conozcas por completo, tengo miedo a que te vayas, y siga hundido en este infierno que habito.
Trago el nudo en mi garganta y relajo los brazos cuando tranquiliza su agarre.
-Demuéstrame quién dices que eres —susurro.

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Eres hermosa para mí
Romansa"Vi", es una chica, que no tiene claro que es lo que quiere en la vida, su físico no es el más atractivo para el sexo opuesto, ha pasado toda su vida tratando de ser la invisible, la persona más desapercibida que haya habido en la tierra, y lo logra...