ÚLTIMO CAPÍTULO
Yo aún no reaccionaba del todo. Esto no podía estar pasando.
—¡RESPÓNDEME!— gritó, asustándome.
—¿Qué haces aquí?— pregunté perpleja.
—DESPUÉS DE LARGOS MESES, LLEGO ¡Y TE ENCUENTRO BESANDO A ESTE HIJO DE PUTA!
—OYE IMBÉCIL— le gritó Michael —A ELLA NO LE GRITES— iba a golpear a Bruno, pero este fue más rápido y lo golpeó tan fuerte que calló al piso.
Todos corrieron a ayudarlo ya que estaba inconsciente en el suelo.
Bruno corrió hacia mí y me tomó de los hombros.
—¡CÓMO TE ATREVISTE A HACERME ESTO!— me sacudía, gritándome.
—¡Suéltame!— salí de su agarre. No sabia que hacer. Lo he extrañado tanto. Quisiera llenarlo de besos, pero ahora llega, pasa esto y solo tengo ganas de llorar descontroladamente.
—Pensé que me amabas...— dijo con la voz rota.
—Te amo...
Él se rió cínicamente.
—Claro, ______.— negó con la cabeza pasando una mano por su nuca.
—Por favor, Bruno, dejarme explicarte...
—¡EXPLICARME QUE! ¿¡EH!?— gritó, mirándome —¿CÓMO ESTUVISTE ENGAÑANDOME CON ESTE? ¿ES ESO?
—Bruno, por favor...
—Venía a darte una sorpresa, ______. Ahora por fin puedo ver que solo me quieres cuando estas sola. Pensé que eras diferente. Eras mi mundo, y ahora sé, ¡QUE ERES UNA CUALQUIERA!
—¿CÓMO DICES?— grité enfadada también —¿CÓMO TE ATREVES A LLAMARME ASÍ?— tomé aire —¿Qué es lo que a pasado contigo? ¿ES QUE ACASO YA TIENES A OTRA?
—¡QUÉ! ¿¡QUÉ PARTE DE QUE TE AMABA, QUE SÓLO TENÍA OJOS PARA TI, QUE ERAS MI MUNDO, QUE DARÍA MI VIDA POR TI NO ENTENDISTE!? ¡NO SOY COMO TU! YO NO ME BESO CON IMBÉCILES A ESPALDAS DE MI PAREJA.
Lo miré indignada ¿Cómo podía decir una cosa así? Este no es el Bruno que yo conocí.
—Esta no eres tu, _______. Veo que nunca me amaste— dijo deceocionado —¿Cuántas veces más te has besado con este? ¿Eh? ¿CUÁNTAS?
—¡Él me besó! ¿Crees que yo haría algo así?
Se quedó mirándome por un momento, con una expresión que no lograba decrifar.
Se dignó a hablar.
—No te creo nada.
—¿Ah, no? Entonces, ¿Nunca confiaste en mi? ¿CÓMO SE QUE NO TE REVOLCABAS CON PUTAS ALLÁ?
Abrió los ojos con indignación e ira.
—No soy como tu.
—¡NO SOY UNA PUTA! ¿Por qué haces esto más complicado?— dije desesperada a punto de llorar.
—Yo no soy el que hace esto complicado, ______— dijo tratando de sonar calmado, mirándome fijamente, como si pudiera ver más allá de mis ojos.
Oí una ambulancia a lo lejos. Observé por un momento. Se llevaban a Michael en una camilla. Estaba inconsciente, con el rostro lleno de golpes y sangre que caía de su naríz.