Silencio.

Capítulo 17.

"Her name is Noelle
I had a dream about her
She rings my bell
I got gym class in half an hour
Oh how she rocks
In keds and tube socks
But she doesn't know who I am
And she doesn't give a damn about me"

Las letras de esa canción me rebotaban en la cabeza con la tonada de una voz ronca y celestial. ¿Dónde había escuchado esa canción?

Abrí mis ojos, acostumbrándome a la luz de la habitación. Me senté bruscamente al darme cuenta que estaba en mi habitación. ¿Cómo llegué aquí?
─Hasta que despiertas ─escucho la voz de Matt cerca de la puerta e intento pararme sobre mis pies para darle una patada en los testículos, pero me caigo al instante de recargar mi peso sobre el pie izquierdo. Aquel gilipollas me ayuda a levantarme y no niego su ayuda porque mi cuerpo se siente agotado, pero si golpeo su mano una vez que me he sentado en mi cama.
─Tú me debes una enorme explicación ─le reprocho con el ceño fruncido y él tuerce la boca en una mueca de disgusto.
─Sí, bueno, tú preferiste a un desconocido en vez de tu hermano.
─¡Me has mentido todo el tiempo! ─le reclamé alzando la voz y él acerco su dedo a su boca indicando que me callara.
─Mamá está dormida.
─¿Y eso a mí qué? Que se entere del mentiroso que es su hijo.
─¿Quieres saber quién es el real mentiroso? ─me preguntó con los dientes apretados, su mandíbula tensa. Parecía más bien una pregunta retórica así que no respondí. Y él igual terminó auto─respondiéndose ─. Robert es el mentiroso.
─¡Deja de agredir todo el tiempo a nuestro padre! ¡Cometió errores y no los perdonaremos, pero él te dio la jodida vida que tienes! ─exclamé. No es como si lo estuviera defendiendo, pero al menos yo tenía algo de respeto por quien me había procreado. Aunque no haya pedido venir a este jodido mundo de todas formas.

─¡Él era un criminal, Noelle! ─me gritó de repente y entonces se tapó la boca como reprendiéndose por haber gritado, su mirada dirigiéndose a la puerta cerrada con pestillo, esperando no haber despertado a Header. Suspira. Pero yo simplemente no entiendo lo que sale de sus labios.
─¿Qué has dicho? ─trago saliva, y mi estómago comienza a revolverse. Matt parece frustrado, o en una pelea consigo mismo porque se toma los cabellos y los jala, como intentando buscar una explicación.
─Me has oído, Ellie ─me dice intentando sonar lo más calmado posible, pero eso solo me hace querer entrar en una crisis ─. Nuestro padre pertenece a uno de los grupos delincuentes más grandes de todo Estados Unidos.

Respiro entrecortadamente y por alguna razón aquello no me sorprende, de hecho esperaba que algo así fuera a suceder, aunque no con tal magnitud. Yo creía que la muerte de Ciara era su culpa. ¿Quién huiría lejos de su familia tras la muerte de su hija en un centro comercial, estando presente en el acto? Sin embargo, eso solo me dejaba aún más claro que pudo haber sido su culpa. Quién sabe, igual y estaba tan metido que ahora aquellos delincuentes se desquitarían con nosotros. Entonces eso me golpeó como un balde de agua fría. ¿Nuestras vidas también corrían peligro?

─¿Nos matarán a nosotros también como a Ciara? ─le pregunté con los ojos cristalinos, dándome cuenta de que mi tic en el meñique había iniciado desde hace rato. Mierda, debo dejar de llorar tanto. Parpadeé alejando las lágrimas de mis ojos y Matt suspiró, sentándose en el borde de mi cama.
─No, Ellie, no dejaré que eso les pase a mamá ni a ti.
─¿Y tú...? ─la interrogante formándose en mi mente de repente, como cuando te llega una idea de la nada y tienes que sacarla, y lo hice ─. ¿Tú cómo sabes de todo esto?, ¿cómo conoces a Silencio?

Vi su espalda tensarse y su mandíbula apretarse, entonces se levantó y empezó a caminar de un lado a otro por toda mi habitación, haciendo que el estrés creciera en mí, pero sobre todo la incertidumbre.

─Matt, ¿qué está pasando? ─le pregunté, comenzando a alterarme ante su conducta. ─Mierda, deja de moverte.
─Soy un agente en cubierto. ─soltó tan rápido que apenas entendí. Cuando mi cerebro proceso las palabras, creo que me atraganté con mi propia risa. Él me frunció el ceño ─. Crees que miento.
─¡Oh, Matt! Has visto demasiada televisión en la universidad. ─le dije entre carcajadas, y pronto pensé que todo lo que me había estado diciendo era mentira, y creo que me relajé pero no del todo. Él se puso rojo de furia.
─¡Nunca fui a la universidad, Noelle! Estaba en un curso policiaco entrenándome para ser agente.
─Sí, sí, sí, James Bond, lo que digas. ─me reí aún más y me pareció divertida toda esta situación. Pero entonces él me zarandeó de los hombros y su semblante serio nunca se perturbó, y comencé a creer que estaba diciendo la verdad.
─¡Noelle, hablo en serio! ─me gritó en la cara completamente frustrado, apretando mis hombros con una fuerza de más y haciéndome chillar. Pero entonces comprendí que estaba diciendo la verdad y él no podía soportar mis burlas.
─Oh, disculpa. ─hablé bajito, creyendo que no me escucharía pero alzó sus orejas cual perrito. ─. ¿Puedes soltarme? Me lastimas.

Y me soltó, y pensé que diría algo más. Pero ya lo había dicho, y creo que por eso él sabía aquello de Robert. ¿Pero qué hay de...?
─Aun no respondes cómo conoces a Silencio. ─murmuré jugando con mis dedos, mirando a todas partes menos a Matt. Sentí su mirada sobre mí, y otro suspiró salió de entre sus labios, como por milésima vez.
─Me mandaron a investigar su caso de cerca. ─me explicó, rascándose la nuca, pareciendo incómodo. Tal vez incómodo conmigo, quién sabe ─. Al parecer vivía en Minneapolis y hace un año que se mudó a Forks. He vivido aquí desde entonces, contactándome con él. Ya te dije, soy un agente en cubierto. Ellos creen que soy uno más de ellos.

Me atraganté con mi saliva. ¿Qué? ¿Silencio? ¿En Minneapolis? Toda mi vida teniéndolo cerca y tener que esperar hasta ahora para conocerlo. Espera, eso quiere decir...
─¿A qué te refieres a "uno de ellos"? ─pregunté, no muy segura de querer saber la respuesta. Pero igual me la dijo, y en su rostro no hubo duda, ni vacilación, y mi corazón se detuvo.
─Silencio es un criminal. Tal como Robert.