Narra Samuél.
Nadie debería tocar a mi Guillermo. Si yo que soy su Daddy no lo hago seguido, otro no lo puede hacer.
Que si, que el trabajo; las reuniones de los sábados, las borracheras y las innovaciones que llegaban cada día no daban tiempo para pasar tiempo con él.
Haría una renovación, nuevo personal.
-Los siguientes mencionados serán despedidos.-Suspire y agarre una hoja-Lo siento, pero no me sirven para nada y es dinero botado a la basura.-Sonaré tacaño, pero ese dinero lo podrían aprovechar personas que en realidad quieren trabajar.
Mencioné más de veinte personas. Todas estas se quedaron con caras largas y un sabor amargo de boca.
-Les mandaré su ultimo cobro a todas sus tarjetas, no se preocupen.-Deje las hojas en el escritorio de Victoria y me metí a mi oficina.
Pondría un enorme cartel, si es necesario con estrellitas y adornos para llamar la atención, que diga que se necesita personal con buenas ideas y ganas de trabajar urgente, necesito recuperar la confianza y saber más de Guillermo para que el me diga el sí.
...
-Así que despediste personal...-Él asentía con la cabeza levemente.
-Así es querido Guillermo-Sonreí.
-Te aburres rápido de la gente como para ir despidiéndola, ¿No?-Lo ví voltear los ojos.
-¿Qué?-Arrugue mi entrecejo.-Claro que no, los despedí porque no hacen nada bueno en sus oficinas, no ayudan en innovaciones que la empresa necesitan-Alce las cejas.-Además, necesito gente que tenga buenas ideas para que trabajen mientras yo estoy aquí contigo, aprendiendo de ti-Sonreí mientras veía que en su cara se dibujaba una sonrisa fantasma.-¡Sonreíste por mi genial idea!-Me halagué.
-Eso no es cierto-Lo negó-Tú idea es muy estúpida, tendrás gente trabajando para ti solo para "aprender de mi". Lo único que quieres es que te diga que si. -Suspiró-En realidad-Me dirigió la mirada y sonrió -no es tan mala idea, me parece excelente que quieras pasar tiempo conmigo. -Sonrió.
-Que bipolar eres chaval-Admití.
-Pero así me quieres, ¿No?
-Te amo-Me acerque y le di un beso en su sonrojada mejilla.
-¿Te acuerdas que Freddi ya no esta?
-Ajá-En todo mi cuerpo recorrió un escalofrío.
-Bueno, tengo hambre-Carcajeo.-Pero tengo a alguien que quisiera ocupar su lugar.-Guiñó un ojo.
-Mhmh, me da miedo-Entre cerré mis ojos.-Pero vale, vamos a ver a quien tienes en mente.
...
Me hizo manejar hasta su antiguo trabajo, no me gustaba venir aquí, mucho menos por las miradas que Ericka, si no más recuerdo así se llama, le mandaba a Guillermo.
-¿Aquí?-Hice una mueca de disgusto.
-Te va a agradar, es muy buen chaval. -¿Otro hombre? ¿Era enserio? Se la esta ganando Guille...
Entramos al pequeño restaurante, a lo lejos pude ver a Ericka taparse la cara con sus dos manos y a un ojiverde abrazándola.
-¡Miguel!-Dijo con cierto entusiasmo Guillermo al que estaba al otro lado de la caja.
-¡William!-Le dijo. ¿William? ¿Con que derecho le dice así?-¿Que tal, como estas?
-Bien, oye ¿Y Rubius?-Arrugue mi entrecejo y mire al ojiverde.