I LIKE YOU

CAPITULO 7

RAQUEL

Salí de la sala de grabación, y regresé en la noche al fanmeting.

Cuando estaba a punto de salir me encontré con YoungJae que se acercó con una estridente risa contagiosa.

Aunque no sabia de que reía, hizo que riera también.

-¿Qué es tan gracioso?

Le dije mientras hablaba y reía.

-Ya no importa. ¿Qué haces?

-Vine a ver a Jinyoung pero parece que saldrá muy tarde.

-Yo ya terminé mis grabaciones, ¿Quieres compañía?

-De acuerdo, ¿a dónde iremos?

-Conozco un lugar.

Me miro esperando mi respuesta.

-Sí, esta bien- Qué es lo peor que puede pasar.

Le dije mirando el lunar en su cuello. Me distraía cada vez que lo veía y una carga eléctrica corría por mi cuerpo.

El pareció notarlo y sonrió.

Caminamos hablando por el pasto oliendo el rocío de la mañana, y el sol justo en nuestros ojos.

Un mensaje llegó. Saqué mi celular de mi bolsillo.

Youngjae pareció divertido observándolo.

-Es un celular muy anticuado y feo.

Lo miré ofendida, y mis ojos escudriñaron la carcajada que se iniciaba en su rostro.

-No te lo permito

Lo señalé con el dedo índice.

-Este celular me acompaño toda mi vida secundaria. No te permito que lo trates de esa manera.

-Ahora entiendo porque te botaron de tu país, no podían ver tu horrible celular.

-¡Hey..! Voy a acabar contigo.

Comenzó a correr hacía atrás tan rápido que casi no podía alcanzarlo. Era una chica que le gustaban los libros y no el deporte.

Paro en seco cuando vio que me empezaba a cansar pero tomé fuerzas y corrí para embestirlo.

El adivino lo que pasaría y se hizo a un lado, ese movimiento me impidió mantener el equilibrio e iba directo al suelo, pero sus manos tomaron mis brazos rápidamente tratando de detener mi caída pero solo terminó cayéndose conmigo.

Caímos al pasto mojado, uno junto al otro. Y reímos muy fuerte. Más él, que su risa, estoy segura podía escucharse en América.

Él se levantó primero y me tendió su mano para ayudarme a levantarme. De pronto se agachó al suelo y recogió el celular que había caído en el pasto.

-Tómalo

Me lo entregó en las manos.

-Gracias.

Recordé el mensaje que había llegado hace poco tiempo.

Deslicé la pantalla.

(Nuevo mensaje) :Mamá

Hola mi vida, como estás, no has escrito hace dos días. Responde por favor. Tu hermano ha arreglado sus papeles. Puede que pronto este en Corea.

Mamá.

Mis ojos se cristalizaron. Y el celular cayó de mis manos. Doblé mis rodillas en el pasto para recogerlo pero las lágrimas me hicieron torpe.