CAPITULO 26

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RAQUEL

Ahí estaba Youngjae frente a mí, sin moverse y sin poder mirarme, hizo una reverencia y se marchó.

Mis ojos se cristalizaron y dejé caer una lágrima, una sola que no pude controlar, la limpié rápidamente, no necesitaba verme débil delante de Jinyoung.

-¿Estás bien?-preguntó Jinyoung preocupado

-Creo que no podré estudiar hoy, perdón por molestar-dije y me levanté tomando mi bolso con mis torpes manos.

-Raquel espera-me pidió-Solo acéptalo-tomó mi brazo

-Todos me dicen lo mismo, todos piensan que soy una persona que no soy, ..... inteligente, valiente...-miré a Jinyoung tratando de que entendiera lo que quería decirle pero el siguió con su incesante letanía.

-Raquel...si no fueras valiente no me hubieras salvado ese día, te hubieras quedado mirando como las fans me devoraban vivo, si no fueras valiente no estuvieras viviendo en otro país que no conoces, sola....., si no fueras valiente no te hubieras enamorado.-

-¿Enamorarme?-pensé-¿Realmente amo a Youngjae?-me dije

No pude resistirme y caí en los brazos de Jinyoung empapando su camisa.

-Me tengo que ir-dije apartándome.

-¿No quieres quedarte otro poco?-preguntó

-No, no puedo pensar en nada más- dije caminando hasta la puerta trasera.

"Tienes que dejar de usar la puerta trasera" Me había dicho Youngjae, pero la seguía usando.

********

Camine esa mañana por la Universidad y me salte la clase de Gramática, no estaba dispuesta ahogarme en signos coreanos que no entendía. Siento tantas ganas de ir a buscarlo, pero reprimo el deseo de salir corriendo.

-Raquel-escuché una voz que hería mis oídos sacándome de mis pensamientos-Te...he...buscado-jadeó, y paró en seco frente a mí con dificultad para formar una sentencia. Apoyo su mano en mi hombro recuperando el aliento.

-No te visto en ninguna clase de la mañana-dijo con el seño fruncido.

-Rebeca, lo siento, no me encuentro bien-dije empezando a caminar. Ella me siguió el paso.

-Estaba preocupada, no contestabas tu celular-me miro enojada

-Ya no tengo uno-dije-Ya no enciende-me lamenté

*******

-No estás disfrutando mi comida-dijo sarcástica Rebeca- y tanto que me costo hacerla para traértela-

Claro que no podía disfrutar de la comida, no sentía que debía comer, aunque la comida Rebeca fuera la mejor.

-Lo siento no tengo apetito-dije retirando el plato de comida.

-Creo que te invitaré a mi casa-dijo contenta. Tomo mi brazo, y camino conmigo hasta la salida de la Universidad.

-Raquel, no te alarmes pero nos están siguiendo-dijo Rebeca con la voz entrecortada, sufriendo e intentando caminar más rápido. Me tomo del brazo tratando de que acelerara el paso.

Gire mi cabeza buscando lo que asustaba a Rebeca, divisé a lo lejos dos personas corpulentas que caminaban muy rápido detrás de nosotros y tenían una malla oscura en su cabeza impidiendo que pudiéramos ver sus rostros.

Mi corazón comenzó a palpitar muy rápido y mi cerebro asimiló lo que Rebeca quería que hiciera. -Vamos...más rápido-dije-Corre-le grité.

Pero ellos empezaron a correr detrás de nosotros, sentí como la adrenalina se vertía por mi cuerpo y acelere el paso. Había una intersección más adelante y muchas personas circulaban por ese lugar faltaba muy poco para llegar y veía la salvación en mis ojos.

Escuche el chirrido de un carro en el asfalto, una camioneta blanca se detuvo frente a nosotros, y no hubo salida, sentí los brazos fuertes de mis captores empujándonos hasta la camioneta.

-No por favor-dijo Rebeca desesperada, agitando sus manos y pies, mientras cubrían nuestra boca y nariz con un pañuelo que desprendía un olor muy fuerte y que hizo que perdiera la conciencia.

Desperté con los ojos vendados palpando en donde nos encontrábamos, el suelo estaba frío y aún la camioneta se movía, escuchaba los murmullos de los hombres pero no podía entender nada.

-Rebeca-llamé despacito, recuperando la conciencia lentamente, pero no hubo respuesta-Rebeca-volví a preguntar un suspiro se escucho a mi lado.

-Raquel-dijo-Aquí estoy-sentí su mano contra la mía apretándome fuerte-¿Dónde estamos?-preguntó

-Quisiera poder responderte, pero...no tengo idea-dije enderezándome.

El auto se detuvo, el motor se apagó y no pude dejar de sentir temor.

Escuche la puerta abrirse y las voces que decían que nos sacarán. Nos tomaron muy delicadamente bajándonos con sus manos un poco torpes.

-Déjennos-supliqué-pero seguían arrastrándonos. Una puerta se abrió y percibe el olor a desinfectante.

Nos sentaron en el piso, y mi cabeza se golpeo con un palo de madera, lo palpé y llegué a la terminación, se sentía como una escoba, es una escoba me dije.

Escuché el barrullo de la gente caminando por los pasillos-¿Porqué hay tanta gente cuando nos tienen secuestradas?, debería ser un lugar en silencio profundo-pensé

Las fuerzas comenzaban a volver a mi cuerpo, me levante apoyándome en la pared, el olor a desinfectante me estaba dando dolor de cabeza.

Ayudé a Rebeca a levantarse y le quite la venda de los ojos. Examiné el lugar....-escobas, detergente. Era el olor inconfundible de un cuarto de limpieza-.

La puerta se abrió, y mi cuerpo instantáneamente se posó contra la pared. Vi a un chico muy apuesto entrar.

-Lo siento, espero no haber sido demasiado brusco-dijo rascándose la nuca.

No podía entender lo que pasaba. Agarré fuerte a Rebeca, hasta que miré por arriba de su hombro, y reconocí el pasillo, lo conocía muy bien. Este era el cuarto de escobas en el que Mark y Jinyoung discutían cuando vine por primera vez.

Mi rostro se encendió de furia. Y miré al chico con desagrado-¿Quién nos hizo esto?-dije furiosa con los puños cerrados apaciguando las ganas de salir corriendo contra este chico-¿Quién lo hizo?-volví a preguntar pero esta vez grité.

El muchacho se había quedado helado, un poco asustado quizás, pero alzo los hombros y dijo:

-No lo sé,.....bueno....te llevaré a él-dijo sonriendo un poco nervioso, dándose cuenta de que no creía ni una sola palabra de lo que decía.

-Por aquí-trató de tocar mi espalda para guiarme, pero lo aparte furiosa. Llevé a Rebeca conmigo.

Nos condujo por unas escaleras, mientras más me acercaba a lo que supuse la entrada a una plataforma, un escenario, escuché a Got7 sonando estrepitosamente en mis oídos.

-Eso es Got7-dijo Rebeca feliz

-Has olvidado que fuiste secuestada-pregunté

Ella bajo la cabeza, un poco avergonzada.

Entre en esa puerta, subiendo unos últimos escalones, y vi personas moverse de un lado al otro moviendo cables, y luces.

Me pare con Rebeca detrás del escenario observando como Jinyoung decía que no dejarán de apoyar a Youngjae,-¿Porqué?-pensé

Jinyoung le entrego el micrófono a Youngjae. Y se giró a mí.

Todas mis energías por matar a alguien se habían esfumado viendo a Youngjae con su mirada fija en mí. Y habló.

-Raquel-dijo-quiero decirte todo lo que no he podido decir durante todos estos meses-

Mi corazón palpito fuerte y mis piernas querían salir corriendo hacia él, pero solo di un paso, y entonces recordé a las fans.

I LIKE YOUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora