Historial De Un Amor

Querida rival

Estábamos veinte de Agosto, cumplíamos un mes, el cual lamentablemente, no podíamos celebrarlo, porque nos encontrábamos distantes, sin embargo sentía una leve alegría, eso por no decir que era una gran alegría.

No había clases del curso hoy por la caminata religiosa que se hacía todos los años, de un canton hacia la ciudad con la imagen de la virgen, mucha gente venía todos los años de diferentes ciudades, devotos y no devotos, jóvenes, adultos, niños.

Era la primera vez que yo iría y eran bastantes kilómetros, ese cantón estaba a una hora en autobus, mi abuela y mi abuelo irían y decidí acompañarlos, mi abuela era una devota que iba cada año y mi abuelo alguien que estaba igual que yo, era primera vez para él.

Alex también estaría ahí y tenía esperanza de encontrármelo, pero era miles de personas las que venían a esa caminata, cualquiera diría que era algo imposible, pero soñar es gratis.

Partimos en la madrugada y estaba animada y segura de que avamzaría a caminar todo ese trayecto, compramos una botella de agua y caminábamos, muchas personas llevaban colchas y esponjas; pero nosotros solo una mochila cada uno.

Habíamos avanzado hasta las afueras del cantón, mi abuelo se adelantó mucho y se perdió entre la multitud que iba más lejos, mi abuela y yo íbamos al mismo ritmo. Yo aun no estaba cansada, sin embargo tenía hambre y solo había bebido agua, paramos en una tienda y compramos algo para comer, seguíamos y observaba a las diferentes personas, algunos con mascotas, otros con niños, unos solos, otros con amigos o con la familia.

Existía una variedad de gente, todos con diferente propósito; pero la mayoría eran devotos. Iba subiendo la cuesta a unos centímetros de mi abuela y divisé alguien conocido a lo lejos, no podía ser verdad, que casual es la vida, aquella persona también me observaba. Adriana con su blusa azul a cuadros, y uno jeans oscuros, esbelta y carismática como siempre me saludaba con la mano, recordé aquellos pocos buenos momentos con ella, era una buena chica aunque chocante; pero buena y no me caía tan mal, simplemente sentía que era mi rival, debido a Alex.

Le devolví el saludo con una sonrisa, me acerqué y me abrazó levemente en señal de saludo. La presenté a mi abuela y ambas intercambiaron un cálido saludo, continuamos la caminata las tres, y ella me señaló su familia que venía atrás, decía que de había extraviado un rato y por eso estaba divagando sola.

Estábamos ya a kilometros de donde nos habíamos encontrado, empecé a sudar y jadear un poco; noté que ella estaba en las mismas pero mi abuela se encontraba tan fresca como una lechuga, cada rato que nos regresábamos a ver, ambas nos sonreíamos. Yo sabía que Alex le contó que yo le gustaba; pero también sabía que ella aun no estaba enterada de que él y yo teníamos una relación.

Quería saber que pasaba por su cabeza, cuando Alex le dijo que ambos nos gustábamos se puso furiosa conmigo esa vez, al igual que Jake cuando se lo dije yo, ambos insultándonos, Adriana a él y a mí y lo mismo Jake, fue como si se hubieran organizado para hacernos sentir mal ese momento. Tal vez nuestro error fue que les dijimos por chat (claro está, Alex a ella y yo a Jake)
Adriana:
Lo que les pasa es que ustedes deben madurar, no quiero saber nada de ustedes hasta que lo hagan. Y dile a él que me desbloquee porque necesito hablar con él.

Ese mensaje vino a mi mente, lo recordaba detalladamente, recordaba todo. Incluso cuando Alex dijo que mejor sería olvidarlo; pues Adriana había armado un lío tremendo, Jake estaba igual.
Jake:
Eres tonta, jamás imaginé que me dejarías por alguien más estúpido que tú. Jamás te amará como yo.
El siempre con sus groserías y Adriana con su escándalo, ese día fue tan extraño porque terminé bloqueando a Jake y peleando con Adriana; pero luego todo pasó y ahora ya estábamos cumpliendo un mes con Alex, a pesar de no estar juntos yo estaba feliz.

-¿Y que tal tus vacaciones?.- voceó Adriana, interrumpiendo mis pensamientos.

-Normales, el curso en el que estoy es algo cansado.- dije sin verla.

La conversación continuó y hasta mi abuela se incluyó en ella, como a todos le hizo preguntas sobre su familia, sus notas académicas, la carrera que seguiría en la Universidad y un sin fin de cosas más, reímos, paramos a comer algo y la caminata se me hizo más animada de lo que habría sido si ella no hubiera estado ahí. Hasta que el momento incómodo llegó.

-¿ Y que fue todo eso de Alex?, ¿ Era verdad?.- preguntaba, mientra yo buscaba que contestar.

-Pues si, él me gusta y bueno yo a él también.- respondí, diciendo "creo" en mi mente.

-Y ...¿como así?, ¿ qué pasó con Jake?

-Relación inestable, algo que debía terminar. Adriana yo no quise que esto pase, solamente sucedió, a veces te enamoras de quien menos esperas.

-No pasa nada, disculpa por lo que te dije esa vez, aunque si fue raro y un poco feo pero ya que.

Sus ojos reflejaban angustia y algo de recelo, pero ella no decía nada más, también porque mi abuela estaba algo cerca de nosotras y no quería que se enterara de ello. Parecía que jamás íbamos a llegar, todavía faltaba mucho. Encontramos a un amigo conocido y se sorprendió de vernos, continuabamos la ruta, charlando las tres, sonreía y hablaba, mas mi mente no podía dejar de pensar en las preguntas que me había hecho y eso que me contó cuando mi abuela paró para comprar bebidas.

"Además él te quiere mucho, me lo dijo cuando fui a su casa la semana pasada. Necesitaba ayuda para dar el exámen de inglés y no reprobar el año, es primera vez que me pasa eso se quedarme en tantas materias. La otra semana doy el exámen".

Recordaba eso a cada paso que daba, ella y había ido a su casa, justo la semana pasada que no pude conectarme ya que Michelle y Louisa decían que debía ir con ellas a comer algo.

Mis piernas ya estaba débiles y empezaba a quejarme, Adriana se encontraba igual; pero mi abuela no quería descansar, ella ya estaba acostumbrada. Yo ya no resistía ya eran seis horas de caminata y segun mi abuela solo faltaba una cuesta y una curva.

-Media hora más y llegamos.- decía caminando tan fresca.

Mis piernas parecían ya no aguantar media hora más, pero lo hicieron, empezamos a caminar como personas con diarrea, el dolor era fatal. Llegamos a las afueras de Lichita y vi la casa del hermano de mi abuelo a unos tres metros, caminamos más hasta que nos detuvimos ahí, mi abuela no quería pero en cuanto vio que mi abuelo estaba ahí sabía que no quedaba más remedio.

La esposa de mi tío(de segundo grado) nos regaló un vaso de refresco y estuvimos ahí por un largo rato, luego Adriana dijo que debía irse, iría a casa sola pues su familia se extravió de ella durante la caminata cuando estaba con nosotras (era la segunda vez que se perdían de ella)
Me despedí y ella hizo lo mismo conmigo y mi abuela, antes de eso ella tomó una foto de las dos.

Mientra se alejaba pensaba en las veces que ella haya ido a la casa de Alex, no quería pensar en cosas malas, no debía. Sabía que aun sentían algo el uno hacia el otro; pero me gustaba creer que lo que sentía por mí era aun más fuerte.

Que pasará ahora?
Mil gracias por su apoyo y votos. Los quiero queridos lectores/as 😊