No me abandones: Los inicios

11 Terminus

Carl y yo simplemente nos quedamos petrificados, mirando cómo amenazaban a Rick y Michonne.

—Carl — susurré —. ¿Qué vamos a hacer?

—No tengo idea — contestó sin mirarme.

Miré hacia un lado, donde vi a Daryl. Él comenzó a hablar con aquellos hombres, quizás para acerlos razonar. Parecía que los conocía de toda la vida.

—¿Daryl? — dije con los ojos bien abiertos a más no poder.

Al parecer, Daryl sí los conocía, e intentaba hacer que nos dejaran en paz, pero fue en vano. Dos de los hombres que nos atacaban tomaron a Daryl por la espalda y lo estamparon contra la camioneta donde nos encontrabamos Carl y yo. Comenzaron a golpearlo sin piedad alguna. Me estremecí.

Por sorpresa, otros dos hombres abrieron la puerta de la camioneta y nos sacaron de ahi, tomándonos como amenaza.

A Carl lo tomó un hombre gordo y le colocó su cuchillo muy cerca de su cuello. A mí me tomó otro hombre y me apuntó con su pistola en mi cabeza.

—¡Dejenlos! — gritó Rick al hombre que lo apuntaba.

—Haremos esto de esta forma — comenzó a explicar su atacante —. Primero mataremos a golpes a Daryl; luego nos ocuparemos de las dos hermosas chicas; nos encargaremos del chico y al final te mataremos a ti y estaremos a mano — dijo riendo a carcajadas.

Me quedé quieta, viendo cómo Carl luchaba contra su atacante (el cual lo tenía preso) y cómo golpeaban a Daryl una y otra vez. Unas lágrimas comenzarón a salir de mis ojos. No lloraba por mí, si no por ellos, no quería que les hicieran daño. De pronto Rick golpeó con su cabeza al que lo apuntaba, haciendo que retrocediera. Rápidamente se levantó y comenzó a luchar contra el líder del grupo que nos atacaba. Se acercó a él y mordió su cuello, desprendiendo un pedazo de su piel, provocando que el hombe se desangrara y muriera. Michonne tomó la pistola de su atacante y le disparó, al igual que al hombre que me tenía amenazada. Tomé una pistola del suelo y maté a los hombres que golpeaban a Daryl, y después apunté al que tenía a Carl.

—Lo mataré — el hombre tomó a Carl con fuerza.

—Suelta al niño — exigió Michonne, apuntándole al igual que yo.

—Es mío — aclaró Rick acercándose a él. Hizo que aquel hombre soltara a Carl por una reacción temerosa y retrocedió.

Comenzó a apuñalarlo varias veces en el estomago hasta que finalmente murió. Daryl se acercó a mí y me abrazó fuertemente sin soltarme, al igual que Michonne con Carl.

Jamás había tenido tanto miedo.

(...)

Amaneció. Yo desperté dentro del auto. Miré atrás y Carl seguía durmiendo con Michonne a un lado de él. Rick y Daryl se encontraban hablando afuera.

Carl despertó e inmediatamente todos salimos del auto y seguimos nuestro viaje a Terminus. En el camino encontramos un letrero que nos indicaba cómo llegar.

—Falta poco — comentó Daryl.

—Sigamos caminando, pero por el bosque — insistió Rick.