Deanna y yo salimos con los demás y nos guió hasta tres hermosas y grandes casas que serían donde nos quedaríamos.
—Bueno, estas son todas suyas. Pueden elegir quién dormirá con quién. Espero que se sientan cómodos. Ahora tengo que irme. Que pasen buena noche — dijo con una sonrisa y se fue a su dicha casa.
—Bien. Michonne, Carl, Ally, Amber Judith y yo nos quedaremos en una; Abraham, Rosita, Eugene y Tara en otra; y por último Sasha, Noah, Maggie, Glenn y Gabriel en la que queda — habló Rick y todos asentimos.
—No. Yo no me quedaré, creo que es mejor que regrese a la iglesia — se apresuró a decir el padre Gabriel.
—¿Estás seguro? Esto podría ser buena idea, podrías vivir mejor aquí — contestó Maggie, pero Gabriel se negó y abandonó Alexandria sin nada más que decir.
Cada quién se fue a sus respectivas casas asignadas por Rick y comenzamos a instalarnos.
—Oye — exclamó Carl, acercándose a mí — Mi padre dijo que durmieramos en una habitación nosotros dos. Hay dos camas individuales
Vayamos arriba a dormir, entonces — contesté.
Ambos subimos para por fin descansar una noche sin tener que dormir con un arma en nuestras manos.
A la mañana siguiente
—¡Hey! Ally durmiente, despierta — gritaba Carl tratando de despertarme, y claro que lo logró.
—¿Qué sucede? — pregunté mientras me levantaba de la cama con una cara no tan agradable.
—Vístete, iremos a caminar un rato y conocer un poco más Alexandria — contestó y asentí contenta.
—Espérame abajo mientras me cambio, estaré en un minuto — dije y Carl salió, dejando la puerta cerrada.
Me puse unos pantalones azules, una blusa color menta y y unas botas algo gastadas.
—Listo.
Salí de la habitación, bajé a la cocina donde se encontraba Carl esperándome, y en cuanto me vió ambos salimos.
—Oigan. ¿Qué tal chicos? Ustedes son los nuevos, ¿cierto? — preguntó acercándose a nosotros un muchacho de tez blanca y un hermoso cabello claro.
Carl y yo asentimos.
—Genial. Me llamo Ron Anderson, ¿y ustedes?
—Ella es Ally y yo soy Carl— contestó sonriente.
—Vengan conmigo, quiero presentarles a unos amigos míos.
Nos guió hasta una pequeña casa entre todas en Alexandria y entramos a una habitación, donde nos encontramos con tres chicos jugando... videojuegos, y una chica sentada en la cama leyendo cómics.
—¡Oigan! — exclamó Ron, llamando la atención de todos en la habitación — Les presentó a Carl y Ally. Chicos, el es mi hermano, Sam. Ellos son Patrick, Oliver y ella mi novia Enid.
—Mucho gusto en conocerlos — respondí con un saludo de mano y todos respondieron igual, excepto... Enid, ella solo se limitó a dirigir una cara de mala gana y siguió leyendo.
—Deanna me pidió que los invitara a una fiesta esta noche, aquí mismo para celebrara su llegada. Espero y puedan venir — comentó Ron.
—Claro. Nos encantaría — respondió Carl.
Después unos minutos hablando entretenidamente con los chicos, salimos de la casa para explorar un poco más Alexandria.
—¡Ally! — gritó Amber, quien se acercaba detrás de nosotros con su pierna vendada y cojeando un poco.
—¿Qué tal? Lamento lo que te hice. ¿Cómo te sientes? — pregunté apenada.
—Bien, me llevaron a la enfermería y dijeron que sanaría completamente en un mes, aproximadamente — contestó Amber — Y ustedes, ¿a dónde van?
—Echabamos un vistazo al lugar. Al parecer están muy bien protegidos. Aquí es muy seguro para todos nosotros — habló apresuradamente Carl.
—Bueno, Amber, falta poco para la fiesta de esta noche. ¿Qué te parece si vamos a cambiarnos? — le pregunté y asintió.
Caminamos los tres hacia nuestra casa y subimos a la habitación donde dormíamos Carl y yo. Observamos en la cama varias prendas con una nota:
Amber, Carl y Ally, les dejo esta ropa para la fiesta de esta noche. Creo que les quedará muy bien a cada uno de ustedes.
Att: Deanna
—Muy bien — exclamé, tomando un hermoso vestido hasta arriba de las rodillas de un color rojo brillante.
—Bueno, iré a cambiarme. Nos vemos — se despidió Amber tomando su ropa y abandonó la habitación, dejándonos a Carl y a mí solos.
—Bien. Te invito a pasar al baño donde podrás cambiarte — habló Carl, abriendo la puerta con un tono de voz un poco chistoso.
—Pero, ¿y tú? —pregunté.
—Yo me cambiaré aquí mientras tu estás en el baño — respondió y asentí con una sonrisa.
Entré al baño con mi vestido en una mano y unos tacones bajos en la otra, y así cerré la puerta con seguro para que nadie pudiera entrar.
Me coloqué el vestido, los tacones y me solté el cabello (me vestí de reina, me puse tacones me pinté y era beia). Busqué en todo el baño y encontré un labial de color purpura oscuro, así que decidí ponerme un poco.
—Y... Lista — exclamé y salí del baño donde me encontré a Carl terminando de arreglarse. Me miró con una sonrisa.
—Vaya. Estás... hermosa — dijo, provocando que me sonrojara un poco.
Capitulo dedicado a :Gracias por todos tus votos:')
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No me abandones: Los inicios
FanfictionPrimera parte EDITADO El apocalipsis ha comenzado. Un extraño virus se está propagando en varias partes del mundo, convirtiéndo a las persona en extrañas criaturas: zombies. Allyson está dispuesta a sobrevivir como sea, aunque se encontrará con muc...