Me despierto de repente dentro de la tienda de campaña. La luz del sol ilumina el interior de la estancia a través de la tela. ¿Cuánto tiempo llevaré durmiendo? No me he enterado de nada. Salgo al exterior, es plena mañana y el sol brilla con fuerza. He dormido una barbaridad.
No veo al caballero, hay mucho silencio. ¡Qué extraño! Empiezo a preocuparme. Desde donde estoy puedo ver a muchos metros de distancia y no está por los alrededores.
Camino en círculos de un lado para otro mirando a ver si lo encuentro pero parece que no está. Algo raro ha pasado aquí. ¿Es posible que se haya ido a alguna parte? Me siento sobre una roca a esperar a ver si aparece mientras contemplo desde mi posición privilegiada el entorno, ahora mismo es lo mejor que se me ocurre hacer. Es posible que esté cerca haciendo algo.
Después de mucho tiempo de espera, sigue sin aparecer. Sé que el nerviosismo hace que el tiempo pase más lento, pero han pasado varias horas aquí, sin hacer nada y me invade una sensación de que algo extraño ha pasado. No está aquí seguro.
Me levanto y voy hacia la tienda de campaña. Empiezo a mirar en el suelo en busca de algún indicio de algo que me indique qué ha podido pasar o dónde ha podido ir mi amigo, lo que sea. No veo ningún objeto en el suelo. Las películas de detectives son un fiasco: ¿Dónde está el típico mechero con la dirección de un club de striptease para ir a investigar? ¿Y dónde está el cigarrillo manchado con carmín? Nada. Menuda decepción, Hollywood me ha timado. No hay investigación que hacer si no hay club de striptease.
Me alejo de la tienda de campaña y sigo observando a ver si al menos consigo encontrar algún tipo de rastro. El sustrato del suelo es bastante sólido. "Sustrato" es una palabra de mi repertorio que creo que en estos momentos queda perfecta. La consecuencia del "sustrato bastante sólido" es que no dejo huellas al caminar, así que todo rastro de actividad es prácticamente imposible de encontrar en el suelo, desgraciadamente no hice el curso online de rastreo en sustratos sólidos. Tampoco hay suficiente vegetación como para notar si alguien haya pasado por encima, así que descarto también lo de encontrar una ramita rota o un pedazo de tela enganchada que me indique una dirección. En una observación minuciosa observo una pequeña marca en el suelo que me da la impresión de que el suelo ha cedido recientemente en ese punto. Me agacho y me fijo que hay arena desprendida. La marca se ha producido hace poco y yo no la he producido. Algo pasó por aquí encima, algo muy sólido o muy pesado. Piso con fuerza alrededor de esta marca para comprobar que, efectivamente, yo no consigo dejar marcas en el suelo. Parece que tengo algo.
Al final parece que Hollywood solo funciona en la parte en la que los indios encuentran un rastro...
Me apresuro y vuelvo rápidamente a la tienda de campaña. Aquí dentro están todas las cosas del caballero. Abro las dos mochilas y vuelco el contenido en el suelo de la tienda de campaña. Necesito tener la mente fría para saber qué me llevo y qué no. Meto las cosas que considero útiles en una de las mochilas. No puedo llevar todo encima, es demasiado peso. Creo que lo tengo claro y cojo comida, el cacharro de las chispas y algunos otros objetos que me podrían ser útiles. Algunos de ellos no sé exactamente qué son, pero por la forma que tienen parecen importantes. Éstos se vienen conmigo.
Me cargo la mochila pequeña a la espalda, cojo el arco con las flechas y también mi espada. Ahora que me fijo, no están ni la espada del caballero ni la escoba voladora. ¿Habrá huido de aquí? Aunque tengo miedo, entiendo que si se ha marchado tiene que ser algo muy grave, sé que nunca me abandonaría de ese modo. Y eso es quizás lo que más me asusta, ¿qué ha pasado?
He sabido amortizar la decisión, creo que llevo el peso justo. Todo lo demás se queda aquí. Cojo la mochila y salgo al exterior de la tienda. Sigo sin ver a mi amigo. No tiene buena pinta. Avanzo hacia el sendero por el que caminábamos ayer y tomo la dirección por la que vinimos. Voy mirando al suelo pero no veo nada. El suelo parece un poco más blando en esta dirección, si mi teoría es cierta tendría que estar viendo más marcas incluso más profundas que la de allá arriba.
Decido que por aquí no voy a continuar, doy la vuelta y camino montaña arriba hasta que llego a la parte más alta de la colina, donde está la tienda de campaña todavía montada. Sigo avanzando por el sendero y veo la muesca en el suelo. Continúo caminando, ahora en descenso por el otro lado del monte, la misma dirección que llevábamos. Continúo mirando el suelo a ver si consigo algo que confirme que voy en la dirección correcta. Tampoco le quito vista a los alrededores, en busca de un indicio que pueda darme una señal. Me da la impresión de que hay otro corrimiento leve del suelo, pero tampoco vayáis a pensar que es una marca clarísima. Podría ser algo natural. Con mil dudas, decido que este es el camino que debo de seguir. Tanto si voy bien como si no, he de abandonar los montes. Ocurra lo que ocurra tengo que continuar. Al fin y al cabo, es necesario que abandone este lugar en alguna dirección, así que tendrá que ser en la que creo que se "ha ido" el caballero.
No sé qué pensar, supongo que algo extraño ha pasado. Creo que de haberse tenido que ir me habría avisado. El hecho de que estén sus cosas en la tienda, me hace pensar que casi seguro, lo que está pasando, no es del todo bueno. Desciendo por el camino con paso apresurado.
Espero que esté bien. No veo nada salvo paisaje y más paisaje. Tiene pintade que va a ser complicado encontrarle.
A veces la pérdida de un ser querido puede ser muy dura, pero son miedos que tenemos que afrontar.
Gracias por estar leyendo.
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Sandwich de dragón
Aventura¿Alguna vez has probado un sándwich de dragón? ¿Has luchado contra piratas o bebido cerveza fantasma? ¿Creíste posible crear un golem o bailar con zombis mientras tienes que soportar los insorportables versos de La Muerte? Surfea con los protagonist...