Black Brother's ®

Capitulo 12.

Intenté por todos los medios posibles soltarme de su agarre, fallando olímpicamente. La fuerza sobrehumana que ejercía en mi era casi imposible de vencer, y me frustraba.

Finalmente se separó de mis labios con la respiración entrecortada y al ver su ojos, estaban totalmente negros. Presentía que nada bueno traería que él siguiera con los ojos así.

—¿Porqué no me sigues el beso, eh? –Rugió y me tomó de los hombros zarandeando mi cuerpo.

Gemí adolorida por la presión en mis hombros y él pareció darse cuenta ya que me soltó. Revolvió su cabello con frustración y volvió a verme ya con los ojos verdes habituales de él, por alguna extraña razón me sentí aliviada.

—¿Qué...que demonios le pasó a tus ojos? –Susurré intentando parecer tranquila.

Pero el miedo estaba ahí, mi sexto sentido me decía que huya. No podía irme sin obtener una respuesta.

—Eso es algo que no te importa. –Espetó con una mueca en su rostro y tomó aire. —Te dejare algo claro, dulzura, si yo te digo, bésame, tu lo haces. –Sus ojos volvieron a oscurecerse y los cerró por un momento. —si yo te digo, tócame, tu lo harás. ¿Quedó claro? –Sonrió con malicia en su rostro.

Negué con la cabeza, horrorizada con su evidente obsecion.

—Si no lo haces, créeme, no te gustará verme enojado. –Se acercó más a mi y dejó un beso en la comisura de mis labios. —Tu eres mía, que no se te olvide, mi dulce Sky. –Me dedicó una última sonrisa y se fue dando grandes zancadas con dirección al bosque.

Limpie con mi mano el lado en donde había besado. Él podrá ser muy guapo y todo lo que quiera pero no tiene ningún derecho a tratarme como un objeto. No se lo permitiría más.

Pov's Tyler.

Estaba en el jardín junto a Hanna, mi mejor amiga. Ella vino a verme ya que no habíamos tenido tiempo de hablar en la universidad, por Sky.

Hanna puede parecer una chica fría, pero en el fondo es muy dulce y tiene un gran corazón.

La conocí cuando me salvó de un clan de vampiros, ella es una bruja blanca, y usó magia para cegarlos momentáneamente. Huimos y desde ese entonces vive en mi manada.

Le pedí que venga para pedirle consejos sobre como conquistar a mi luna, Hanna es en quién más confío para hablar de estos temas, ella es muy inteligente.

Aunque a veces hable como si fuera de una época muy antigua, pero así es ella, especial.

—Así que...por fin encontraste a tu luna, Ty. –Acarició mi mejilla en un gesto dulce pero por alguna extraña razón pude vislumbrar en sus ojos un atisbo de enojo.

Decidí ignorar mis pensamientos y a mi lobo, el cual nunca se ha sentido cómodo con su presencia, a pesar de que nos salvó.

—Si. –Respondí con evidente entusiasmo, pensando en la sonrisa de mi luna. —Es muy bella y pura, mi lobo está tan contento de que la diosa luna nos haya otorgado esa bendición. –Suspiré y miré hacia la colina. — Yo siento que cada día junto a ella, es perfecto, la amo.

Mi lobo ronroneó recordando los labios de mi luna, definitivamente iría a verla hoy, moría por probar nuevamente sus labios.

—¿No crees que es muy rápido para amar? –Inquirió alzando una ceja y tomó una de mis manos. —Tengo entendido que es una humana, y los humanos no son de fiar.-

Me solté de su agarre y me levanté, no permitiría que nadie piense mal de mi luna, ni siquiera mi mejor amiga.

—Ella si es de fiar, es mi compañera de vida, no dudo en lo absoluto sobre ella. –Respondí tajante y recibí un bufido de su parte.

—Si crees que es lo correcto liarte con ella, bien, siempre te apoyaré en todo, mi Ty. –Se levantó también y me dio un abrazo a lo que correspondí algo incomodo.

Unos aplausos resonaron a nuestro alrededor y observe a Ashley acercarse a nosotros.

—Y así es como la bruja se disfraza de oveja. –Soltó una risa maliciosa y se acercó quedando junto a nosotros. —Aunque en tu caso sería, "la zorra". —Sonrió falsamente y me tomó de la mano alejandome de Hanna.

Ya sabía lo que venía, una pelea de ellas dos. Aunque Hanna sea muy pacífica, se notaba que quería golpear a Ashley, y viceversa, solo que Ashley nunca ha sido pacifica.

—Deja de abrazar a mi hermanito, que le podrías pegar tus herpes. –Hizo una mueca de asco.

Miré acusatoriamente a Ashley.

—Vamos Ash, no causes problemas. –La arrastré hasta la sala pero me detuve al escuchar a Hanna.

—Porque mejor no cuidas que le peguen herpes a tu Edward. –Sonrió y salió de la mansión.

Tomé de la cintura a Ashley evitando que vaya a golpearla y cause un alboroto.

—¡Es una zorra! pero cuando la encuentre sola...—Apretó los puños y tembló de ira. —Le arrancaré sus extensiones. –Rugió y se soltó de mi agarre.

Ellas dos nunca se iban a llevar bien, por mas intento que hiciera de juntarlas.

—Ashley cálmate, a nuestro padre no le gustara saber que la golpeaste de nuevo. –Intenté calmarla y conseguí hacerlo.

Al parecer recordarle el día en que le dio una gran paliza, le traía bastante alegría.

—La golpeare de nuevo, de eso no cabe duda. –Sonrió y camino hasta las escaleras. —Y tu, deberías alejarte de ella, a Sky no le gustará nada saber que la zorra quiere pegarte herpes. –Subió las escaleras despreocupadamente hasta su habitación.

Me quedé parado en medio de la sala analizando sus palabras, ya era de noche, así que decidí ir a ver dormir a Sky, como todos los días.

Creo que ya se había convertido en un hobbie verla dormir.

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En multimedia, Hanna Thorne.

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Eli.🌛💕