Capítulo 13

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Pov Christian

-Fue muy divertida la fiesta, gracias por invitarme.-Anastasia, media dormida me da un pequeño golpee.

-De nada. La verdad me la pase muy bien contigo.

Nos empezamos a reír, hace unos minutos fue que terminamos de bailar como unos dementes. Por primera vez en mi vida, me sentí libre, me sentí yo mismo. Claro no por completo. Fue como un 90%.

-Vamos ahora si se está haciendo muy tarde.

-Bien.- Nos despedimos de todos, bueno en sí de los chicos. Cosa que estos últimos quedaron encantados con ella.

-¿Ya te vas?- Me agarran del brazo fuertemente e inmediatamente siento como si me quemaran la piel. Recordando al chulo de la Puta Drogadicta. Agarro velozmente las manos que me detienen, observo la cara y es nada más y nada menos que Leila.

-No me vuelvas a tocar, te lo prohíbo.- La amenazo ferozmente haciendo que ella de un paso atrás sobresaltada.

-Perdón.- Me dice ella que se le ve un poco arrepentida. Pero no del todo. Anastasia nos mira con el ceño fruncido. Sin entender nada.- Bueno te preguntaba si... ¿Ya te vas?

-Sí, ya nos vamos.- Le digo para que vea que no vine solo.

-¿Vamos?...- En ese momento ella mira a mi lado y ve a Anastasia con su ceño fruncido.- ¿Ella es tu novia?

-No, yo soy Anastasia Steele. Mucho gusto.- Se presenta Ana, en ese instante cuando le aclaró que ella no es nada mío, me pude dar cuenta la cara que puso Leila, fue como la cara de las malvadas en películas. Lo único que le falto hacer fue la risa demoniaca. Y La primera se dio cuenta de eso.

-Bueno Grey, cuando pueda estoy disponible ¿Sí? Solo llámame.- Responde asiéndole caso omiso a la presentación de Anastasia. Mierda ¿Tuvo que decirlo frente de Ana? Puta vida.

-Adiós Leila- Ahora soy yo quien le hace omiso a su último comentario.

Agarro de la mano a Steele y me la llevo al estacionamiento, desbloqueo el auto y nos metimos adentro. Yo no tome tanto Alcohol, así que puedo manejar perfectamente y ella lo sabe.

Ya estamos en la carretera, en un silencio un tanto incómodo.

-¿Qué la llames? ¿Soy yo o es que te ofreció cuando quieras que les abras las piernas?

-Anastasia, basta...- La regaño, bueno aunque todos sabemos que eso es verdad.

-¡No! ¿Ya te las has follado? ¿Te estaba diciendo para repetir?- ¿Qué?

-Mierda Ana, no. Yo no me he follado a nadie.- Mentí.

-¡Joder Christian! ¡¿Por qué me mientes?! ¡Yo sé que te escapas en la madrugada para follarte a quien se te cruce por adelante!

-¡¿Cómo mierda sabes eso?!- Le digo sorprendido que ella lo sepa.

-¡No importa como lo sé!- Respiró profundamente intentándose de calmarse, mierda ¿Qué le digo yo ahora?- Ve Christian, a mí no me importa a quien tú te folles ¿Sí? Ese no es mi problema. Puedes hacer con tu vida sexual lo que se de tu gana. No es mi rollo. Pero ¿Sabes que si lo es? Que tú te escapes en la madrugada para hacer lo que se te ocurra, ¿Qué pasaría si te pasara algo malo? ¿Con que cara yo le digo a tu mamá? : ¡¡¡No lo siento, no sabía que él estaba haciendo porque se me escapa en las madrugadas para hacer barbaridades!!! ¡Soy tu puta niñera!, tengo que cuidarte o al menos aconsejarte.

<No solo soy la que contrato tu madre. Soy tu amiga, y quiero lo mejor para ti. Por favor la próxima avisa si vas a salir. No quiero enterarme de terceros.-> Refunfuña molesta. Me quede sin palabras.

Cuidando al playboy GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora