Capítulo 47

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Narrador Externo

Cobarde.

Por la mañana todos habían despertado con un ánimo inesperado, hasta Levi parecía sonreír y reírse más fácilmente.

-Yuu aún no se levanta- comenta en voz alta Izbell.

-Vamos a llamarlo- propone Sebastian.

-Tal vez sigue hablando con su amorcito- se burla Ciel.

-Esperamos- suspiran Kimizuki y Yoichi.

-Mika-san es difícil de llevar ahora- se queja Shinoa.

-Una dosis de amor no le vendría mal- opina Mitsuba.

-Ya, callense, esos dos necesitan tiempo- regaña Levi.

Eren sube, dejándolos con la discusión sobre Mika y Yuu, Izbell decide seguirlo, rompiendo el circulo y haciendo que los demás les sigan.

Ya frente la puerta de su cuarto, Eren toca la puerta tres veces.

-¿Yuu?- pregunta.

Al no recibir una respuesta; entran, la puerta no tenía puesto el seguro. Dentro hay una escena hórrida.

Yuu está acostado en la cama, medio cuerpo cubierto con la sábana, los ojos abiertos de par en par debajo tenían unas ojeras horribles, acompañado todo de una expresión extraña y el teléfono en las manos, una posición incómoda que seguro lo tendría acalambrado luego de unas horas.

-¡Yuu!- su hermana reacciona, llegando a su lado, le quita el teléfono para descubrirlo apagado- ¿Qué te pasa?

El chico reacciona moviendo los ojos hacía su hermana. La ve unos cuantos segundos, hasta que gruesas lagrimas brotan de sus ojos.

-¡Izbell!- susurra, llorando.

-¿Yuu? ¿Qué tienes?- pregunta preocupada, sentándose en la orilla de la cama.

Yuu se cubre el rostro, entre gimoteos lastimeros y un mar de lágrimas Izbell se las arregla para calmar a su hermano lo suficiente para hacerlo hablar.

-Yo... Soy un cobarde- comienza a soltar la historia entre más lágrimas silenciosas-. Faltaba un minuto, unos pocos segundos... Y no pude. Apagué el teléfono. Cuando me decidí a hacerlo ya era muy tarde... Una llamada perdida de él. Sólo una. Como si supiera que yo no podía...

Todos los presentes se dan una palmada en la frente al reconocer lo tonto que podía llegar a ser Yuuichiro.

-¡Yuu, idiota!- regaña Mitsuba.

-Este pendejo- Kimizuki está muy frustrado.

-¡Yuu! ¡Pendejo! Mika solo te llama una vez en la madrugada- le recuerda Izbell-. No es que sea un brujo.

-¿Y ahora que hago? No va a volver a llamar...

-¡Yuuichiro!- Izbell levanta la voz- ¿No entiendes? Que Mika lleva más de un mes llamando sin esperar que contestes. Volverá a llamar, pero esta vez lo esperaremos todos contigo.

Los ojos de Yuu se llenan.

-¿En serio?- pregunta, entre emocionado y ligeramente decepcionado.

Emocionado por volver a escucharlo junto a sus amigos y decepcionado por saber que no puede hacerlo él solo.

-Sí, pero por ahora debe bajar a comer- se mete Sebastian, sacando de las sábanas a Yuu, cambiando de posición sus acalambrados brazos.

El grito de dolor es algo satisfactorio para la mayoría, es como el buen karma luego de dudar. Dejan que Yuu termine con su rutina de levantarse para bajar a comer con los demás.

Secre •MikaYuu•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora