Erick Pov.
Tenía que admitir que estar en una situación como esta me resultaba algo sumamente abrumador, las manos me sudaban como cascadas en alguna clase de manantial seguidas por un leve temblor en mis brazos y piernas que eran acompañados todo en conjunto con los desenfrenados latidos de mi corazón. Estaba aprensivo a cualquier cosa que pudiese salir de mi boca, pensando en el que tal vez mis palabras fueran usadas en mi contra, poniéndome muy al pendiente de eso, porque sabía que lo que estaba apunto de decirle a las dos personas que se encontraban enfrente de mí podían pensar cualquier cosa sobre eso. Conociendo los obstinados pensamientos de mis padres, sé que cualquier cosa que les diga me puede perjudicar por el simple hecho de que ellos ya sospechan de que mantengo una relación. Sin embargo no creo que se esperen que sea con un chico y por ende quiero ser lo más cauteloso posible en decir aquello.
Aunque no les voy a decir directamente que estoy saliendo con un chico, si pienso decirles que esta misma noche les presentaré a la persona que ahora forma parte de mi vida, que quiero con todo mi corazón y jamas pensé enamorarme de esta manera tan ferviente.
-Mamá... Papá... -pronuncié inseguro, pero ya había llamado la atención de ambos que me miraron con fijeza mostrando así que ya no había marcha atrás-. Hay algo importante que quiero anunciarles...
Mamá me dedico una sonrisa tierna a la vez que se acercaba a mí con notable interes, a la espera de mis palabras. Papá dejo a un lado lo que estaba haciendo y como si fuese la mejor noticia lo que sea que fuera a salir de mi boca, me prestó suma atención. Tragué saliva con dureza, esto iba a ser más complicado de lo que pensaba, y eso que apenas era el comunicarles que la persona con la que ando va a venir a cenar hoy.
-¿Y bien? ¿Qué es lo que tienes para decirnos? -Inquirió mi madre, esperando ansiosa a que hablase.
-Veran yo... hoy... pues... -Solté un gruñido hastiado, me sentía estúpido por no poder pronunciar la palabra completa, no quiero ni pensar como terminara todo esto cuando mis padres se enteren de mi relación con Daemon definitivamente.
-¿Es algo malo? -Preguntó esta vez mi padre posando su inquisidora mirada sobre mi, con más filo que antes.
Negué rápidamente con la cabeza, suspirando en busca de calma y solté el aire que parecía estaba conteniendo por los nervios acumulados.
-No en realidad... la verdad es que... bueno, ustedes me dijeron que querían conocer a la persona con la que salgo ¿no?
A mi madre pareció habérsele encendido una llama en los ojos apenas me escuchó decir aquello, se apresuró a tomarme las manos y mirarme con orgullo.
No sabía si era yo ó en verdad le estaban saliendo llamas de los ojos.
-¡Sabía que tenías novia! -Chilló entusiasmada, sin quitar ningún segundo su resplandeciente sonrisa- ¿Quién es? ¿Cómo se llama? ¿Qué le gusta hacer? -Mamá comenzó a azotarme con preguntas que se me hacían muy difícil de responder. Y más cuando sentí que mi corazón se estrujaba al oír la palabra «Novia» en la oración. Traté de decir algo pero el repentino carraspeo por parte de papá me interrumpió.
-Cariño, deja que termine de hablar -Dijo refiriéndose a mamá. Que algo apenada se calmó y regresó a su estado normal, ahora si dispuesta a escuchar lo que tenía que decir.
Suspiré una vez más sacando aquel aire que parecía mis pulmones estaban conteniendo. Dejé aquel miedo atrás para poder hablar lo más claro posible y acabar con esto de una buena vez.
-Bueno, aquella persona con la que estoy saliendo vendrá hoy en la noche a cenar con nosotros y de paso la presentaré a ustedes -Terminé de decir, algo jadeante por lo rápido que fui.
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Eres todo un Reto(Yaoi)
RomansaDaemon Steel un joven de 17 años de edad, tranquilo, serio y poco sociable. Él solo se concentra en estudiar, ser el mejor en clase, no le interesan las relaciones ni pretende tener alguna. Es muy popular con las chicas y a pesar de eso no se da el...