James Pov.
Una vena se me quiso salir de las sienes cuando vi el desastre que había en mi habitación, esto solo tenían un nombre y ese era Drake.
-¡Drake, maldito! -vociferé lo más fuerte que mis pulmones me permitieron.
Esto ya era el colmo, le dije que podía dormir en mi habitación mientras terminaba de pintar la suya. Claramente él aprovechó eso para dejarme semejante basurero municipal en todo el lugar.
De verdad le detestaba, no sé por qué el señor Freddy se tuvo que haber traído a su hijo. Lo hubiese dejado con su ex-esposa o en un orfanato.
Segundos después escuché su risa cerca de ahí, me giré con violencia encontrándome con una sonrisa de arrogancia iluminando su perfecto rostro.
-Tú, estúpido. ¿Me puedes decir que es este desorden? -le reñí, sintiendo como la sangre se me subió a la cabeza de la molestia.
Drake levantó las cejas negando con la cabeza, se acercó a mí sin borrar aquella asquerosa sonrisa y sacudió mis cabellos como si fuera alguna clase de niño pequeño al que estaba felicitando. Obviamente eso me frustó mucho más y le aparte la mano de golpe. ¿Quién se estaba creyendo ahora?
Suspiró cansado mientras tomaba asiento a una orilla de la cama. Se quedó así unos segundos antes de por fin abrir la boca y hablar.
-Tuve un pequeño inconveniente con las cosas aquí. De verdad lamento el desorden, no te preocupes lo arreglaré.
Mis ojos se abrieron grandes después de oír aquello. ¿Qué había dicho? No podía ser que a Drake le estuviese pasando eso, ¿o sí?
-Tú... ¿Qué dijiste? -inquirí, sin poder creerme su extraña actitud.
Luego soltó una fuerte carcajada mientras se recostaba por completo en la cama. Levanté una ceja confundido ¿Qué mierda se estaba fumando ahora?
-Oye James, te noto más amargado últimamente -Comenzó a decir, yo me mantuve expectante a lo que dijera-. ¿Hace cuanto no follas?
¡Maldita sea! Eso si no se lo iba a tolerar. Me acerqué a él y de un jalón lo tumbe de la cama. Como estaba distraído se me hizo más fácil ya que no ejerció fuerza. Este calló al piso de trasero y unos quejidos de dolor salieron de su boca.
-Mejor vete, yo ordenaré todo esto.
Escuché de nuevo su risa que esta vez me hizo sentir escalofríos.
-Entonces si se trataba de eso -lo oí decir. Me mordí el labio procurando contener la ira.
Él imbécil tenía toda la razón en lo que decía. Últimamente había estado muy amargado, pensé que era el estrés de las clases o cosas así. Sin embargo, me percaté no hace mucho que de verdad deseaba ir más allá con Alexis. Pero no era capaz de decírselo o siquiera comenzar con algo. Técnicamente tenía miedo, miedo de lo que pueda pasar, miedo de hacerlo.
Sentí su mano posarse sobre mí hombro así que me volteé a verlo, me dio una sonrisa natural como sólo él sabe hacerlo.
-¿A qué le tienes miedo? -preguntó tomandome de sorpresa.
Me quedé en silencio por un buen rato mientras miraba mis opciones, decirle a Drake lo que me pasaba no era una de ellas pero, algo dentro de mí quería contarselo.
Me aparté de su agarré con un movimiento brusco.
-Eso no te importa -respondí seco.
Otro suspiro se escapó de él, al tiempo que sentí el olor a cigarrillo dentro del lugar. La vena que estaba apunto de reventar antes, finalmente lo hizo y de inmediato intente patearle.
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Eres todo un Reto(Yaoi)
RomanceDaemon Steel un joven de 17 años de edad, tranquilo, serio y poco sociable. Él solo se concentra en estudiar, ser el mejor en clase, no le interesan las relaciones ni pretende tener alguna. Es muy popular con las chicas y a pesar de eso no se da el...