Locuras Contigo -Editando-

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~Anna~

Nos encontrábamos almorzando en un resto. Habíamos pasado toda la mañana recorriendo el palacio de Buckingham y sus alrededores.

No habíamos mencionado nada de lo que ocurrió entre nosotros. Fue un pedido estricto de Thiago, al principio dude pero luego me convenció de que no les dijera nada a las chicas. Me muero por contarles todo lo que ocurrió anoche, desde sincerarnos y de la manera en que conectamos al hacer el amor por primera vez. Obviamente no era la primera vez que estaba con un chico pero con el se sintió como si todo lo demás no existiera. Me acomode en mi asiento. Estaba a punto de confesarle a mis dos mejores amigas que el y yo teníamos una relación. Pero eso sería traicionar su pedido. Sonreí al ver a mis amigos disfrutando y charlando a gusto sobre el recorrido por ese bello lugar. Donde se me hizo imposible concentrarme en la belleza del lugar ya que Thiago cada dos segundos me sorprendía basándome, pero siempre siendo lo mas discreto que podía.

Su hermana, Mika y Karolth estaban hablando mientras ellos se desaparecieron por unos segundos.

-¿Anna? - alce mi vista y me encontré con las tres mirándome, alce mis cejas y ella rieron. -¿Que sucede contigo?

-Nada. - Me costo prenderme en la conversación ya que estaba muy metida en mis pensamientos.

-Estas distraída. - pronunció Bárbara. Y me sonroje. Ella me guiño el ojo, ¿Ella estaba al tanto de algo?

-Estas enamorada- pusieron carita de idiotas. Baja mi mirada avergonzada. Odio mostrar mis sentimientos. Pero con ellas no puedo fingir.

-¿Los demás?- busque por el lugar a los chicos. Pero no los encontré.

-Fueron por algo. La verdad ni nos dimos cuenta cuando salieron. - Karolth hablo con la paciencia y tranquilidad que la caracteriza.

Pasaron unos segundos mas y ellos regresaron. Realmente no lo había notado pero había un nerviosismo que Thiago cargaba con él. El se sentó a mi lado.

-¿Esta todo bien? - pregunte. El asintió. Estaba a punto de hablar. Pero el llamo la atención de los demás.

- Tengo que decirles una cosa. - comenzó. - En realidad Anna y yo tenemos que darles una noticia.

-Suéltenlo... - dijeron todos ansiosos por oír lo que estábamos por decir.

La sonrisa en el rostro no me cabe. El esta por decir lo que pienso que va a decir. - Anna y yo...- me miro buscando ayuda. Entrelace nuestras manos por debajo de la mesa y mire a nuestros amigos.

-¡Somos novios! - apoye mi cabeza en su hombro. Y nos dedicamos a observar la reacción de todos.

-¿De verdad? - pregunto Bárbara- Sabía que ustedes dos iban a terminar juntos. - se levantó y nos abrazo- No por algo este señorito me llamaba todas la noches ya Skype para contarme de su adorada Anna.

Lo mire y el se sonrojo.
- FELICIDADES.

Mientras seguíamos hablando a gusto, las chicas me abrazaron y se pusieron muy contentas. Pero me reprocharon porque no les había contado antes. Ellas entendieron que mi chico me pidió que no dijera nada. Quería dar la noticia el. Terminamos de arreglaría un poco en el baño del resto para terminar de recorrer algunos puntos atractivos de Londres. No pude escaparme de todas sus preguntas, obviamente con lujos y detalles.

-Eres única. Por eso mi hermano te ama tanto. - hablo con sinceridad- En realidad las tres son únicas, miren que cazar a esos tres.

- Son difíciles. Pero valió la pena la espera. - asegure.

-La verdad que si. Son un desastre y nosotras igual.

Ella nos observaba sonriente. La verdad que es una chica hermosa, simpática y amorosa al igual que sus hermanos.