Capítulo 48

6.6K 746 64
                                    

Charlie in love

«Tal vez sólo sea un chico enamorado. Pero lo estoy de ti»

Nina leyó la nota y se sentó en las escaleras de su casa, él era tan romántico. Charlie era tan romántico. Aun se sentía extraña pensando que él era quien las escribía pero sus ojos no podían fallarle, ella lo había visto escribiendo una nota y estaba segura que había sido esta. Su madre llegó en el auto, se acercó a ella y la vio sonriendo.

— ¿Y esa cara de boba?

—No es de boba, estoy enamorada—su madre la miró con interés.

— ¿Del amigo de Bruno?

—No, de Charlie.

— ¿Y él quién es? ¿El chico con el que has salido? —preguntó recordando a Mike.

—No, Charlie es el que escribe estas notas—le entregó la que tenía—. ¿Te acuerdas? Una vez las viste—su mamá asintió.

—Pensé que lo hacía el chico con el que salías.

—No—rió Nina nerviosa—. Mike no las escribe, no estamos saliendo realmente.

Su madre frunció el ceño por lo que acaba de decir la morena, sin embargo decidió ignorarlo y seguir; se despidió de su hija y entró a la casa.

Nina guardó la nota en su bolsillo y caminó hasta la casa de Bruno, tocó el timbre y su madre apareció. Le sonrió y la dejó entrar avisándole que el moreno estaba en su habitación con Bianca por lo que tuviera cuidado de entrar en un momento inesperado.

—Los atrapé—dijo entrando en su habitación de golpe. Vio a Bruno acostado en su cama y Bianca sentada observando con duda la batería del moreno—. ¿Qué hacen?

—Veo como Bianca intenta tocar la batería—respondió Bruno—. Pero tiene media hora ahí sentada y no ha hecho nada.

—No sé cómo empezar—confesó ella y tomó las baquetas—. Es difícil, tengo miedo de romper algo.

—Si hubieras dejado que te ayudara sería distinto—la molestó su novio, Nina rió ante la expresión de disgusto que Bianca había hecho.

—Bien, como sea—dijo la morena—. Me llegó una nueva nota—la mostró, Bianca se levantó y la tomó.

—Ay, es hermoso—respondió—. Este chico está tan enamorado.

—Oh, vomito—dijo el moreno con cara de asco. Bianca lo miró mal y luego le sonrió a Nina.

—Entonces, ¿hablarás con Charlie?

—Sí, bueno si el deja hablarle. Porque vive huyendo—le respondió a la rubia.

—Que se lo pregunte Bruno, de seguro es tímido con las chicas.

—Mala idea, creo que le doy miedo—mencionó Bruno—. Si quieres saber si él es, lo harás tú. Aunque estoy seguro de que no lo es pero dejaré que sigas en tu fantasía.

—Ya verás, yo sé que es él.

Creí que era para míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora