Don't you (forget about me) | NamGi |

60

YoonGi decidió hacerle caso a TaeHyung, le dio una patada a su orgullo de macho y cuando llegó el momento, por fin, de hacer por primera vez el amor con NamJoon, se ofreció a ser el pasivo.

Fue un absoluto desastre y ninguno de los dos disfrutó demasiado. Los dos tuvieron un poco de culpa de que las cosas no fueran bien, con un NamJoon demasiado inseguro y un YoonGi demasiado quejica. NamJoon se ponía nervioso porque hacía daño a YoonGi y YoonGi sentía dolor porque NamJoon estaba demasiado asustado. La pescadilla que se mordía la cola.

La primera vez fue insatisfactoria y un poco patética, pero volvieron a intentarlo unos días después, porque no podían simplemente rendirse al primer intento.

En la segunda vez, intentaron invertir los roles. YoonGi no eraba mucho más seguro de lo que había estado NamJoon, pero la calma que lo caracterizaba ayudó mucho a que NamJoon se relajara y fuese un poco más fácil para ambos.

Pero, según dicen, a la tercera va la vencida, y repitiendo la formula de la vez anterior, consiguieron tener éxito en sus pericias.

YoonGi se sentía todo un semental y le daban ganas de decirle a TaeHyung que se equivocaba, que él era mucho mejor como activo y que seguro le había dicho aquello por haberse dejado llevar por las apariencias, que sólo porque NamJoon fuera más alto y más fuerte, iba a ser mejor.

Pero YoonGi tendría que tragarse para siempre sus pensamientos de superioridad cuando NamJoon empezó a coger confianza y experiencia e insistió en volver a invertir papeles e intentarlo de nuevo como la primera vez.

No supo cómo, pero NamJoon lo llevó al cielo y más allá, le hizo el amor, le hizo perder la cabeza y cuando terminó con él, YoonGi era un desastre hipersensible que tardó más de media hora en recuperarse del mejor orgasmo de su vida.

YoonGi nunca confesaría que estaba dispuesto a quedarse con ese rol en adelante.