Capítulo 10.

1.5K 68 0
                                    

|Narra _____|

''Buenos días, pequeño diario. Algo me atormentaba y me he levantado muy temprano. Sé que hace tiempo que no te escribo y antes estaba acostumbrada a hacerlo todos los días, pero te prometo que no volverá a pasar. Aquí estoy. Quizás es ahora cuando más te necesito porque... creo que me estoy empezando a enamorar. Nunca había escrito algo parecido, ¿verdad? Resulta extraño.

Su nombre es Justin. Es un poco más alto que yo, guapo, atractivo, sexy, de piel bronceada y tiene unos ojos color miel que hipnotizan. Por no hablar de sus labios... de vez en cuando se inflan y cogen el color de una roja manzana, de esas a las que pegarías un gran y apetecible mordisco. Va a mi clase (para variar) y tenemos la misma edad. Esa es una de las pocas cosas que tenemos en común. 

En el momento en que lo vi por primera vez supe que era un imbécil, y mi sexto sentido no me engañó. Lo es, y hasta él mismo es capaz de admitirlo. Empezó sacándome de mis casillas, molestándome, haciendo que perdiera los papeles e incluso le marqué mi mano en toda su mejilla. ¡En 2 días consiguió todo eso!

Pero luego algo ocurrió. Algo improbable. Algo que no esperaba. Poco a poco se iba colando en mis pensamientos sin avisar y cuando lo tenía cerca algo se accionaba dentro de mí. Me preocupaba, me sigo preocupando. Estas cosas nunca las he sentido, por eso estoy tan confundida. Todavía sigo hablando en presente, si te das cuenta.

Es el típico chico que va de flor en flor, que se folla (hablando en vulgar) a cualquier chica que lleve una minifalda y gran cantidad de maquillaje. Los sentimientos le dan igual, eso dicen. Es el chico malo de la universidad, resumiendo. Pero es que luego veo su carita y... todo lo malo desaparece.

¿Te cuento un secreto? Sus besos saben al mejor caramelo que puedas probar. Además tienen algo que los hacen adictivos. Y su sonrisa es increíble, sobretodo cuando se produce contra mis labios. Es algo que no puedo describir. Se está adueñando de mis pensamientos... y no quiero.

Es hora de ir a clase, odio los lunes, ya lo sabes. Me despido de ti hasta mañana.

Pd: tengo ganas de escuchar su voz cerca de mi oído, por muy cursi que suene.''

Cierro el bolígrafo con la tapa y escondo el diario donde siempre. ''Nadie tiene que saber que existes, pequeño'' le digo, hablando sola. Es mejor eso que decir mis pensamientos en alto a un ser que ni siquiera tiene vida. Me encojo de hombros y reviso mi móvil. Como siempre... no hay nada importante. ¿Alguien pensará en mí alguna vez? ¿Tan rara soy para que la gente ni se atreva a saludarme? Llevo mis pensamientos a un rincón apartado y hueco. Es inevitable sentirme sola, ya estoy acostumbrada.

Mi vista localiza el uniforme que Pattie dejó sobre mi mesita recién limpio. Me visto y por último coloco los zapatos perfectamente encajándolos en mis pies. Esta vez arremango mi falda, dejándola más corta, un palmo más arriba de mis rodillas. Pasito a pasito, con miedo, me acerco al espejo donde puedo verme reflejada completamente. Noto una punzada en mi vientre. Algo es diferente. Luzco bien. Mis piernas son finas y tienen una bonita forma. Nunca había percibido eso, siempre tenía ese miedo interior de esconder todo de mí.

Estoy sonriendo... no lo puedo creer. Dejo mi mente en blanco y olvido quién soy por un instante. ¿Qué ves? Una chica traviesa con ganas de ver mundo y vivir experiencias únicas. Con edad de despreocuparse de los diminutos problemas que con el paso del tiempo tendrán más importancia.

Mi melena recogida en un moño despeluchado me hace reír. No combina nada con el polo y la falda de cuadros, por no hablar de los calcetines que me cubren hasta un poco más debajo de las rodillas.

Sonrío avergonzada al espejo por mis propios pensamientos. Realmente no soy tan mala por fuera como creo. Además, Justin no estaría con una chica fea. Espera. De nuevo aparece en mi cabeza, dominando.

Improbable Dirección | Justin Bieber.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora