Capítulo 38.

676 39 9
                                    

|Narra _____|

Llego a casa, no hay nadie. Justin tampoco está. No he vuelto a verlo desde que discutimos. Necesito saber dónde está, cómo se encuentra y si está solo. 

Lanzo las llaves al recibidor y me sirvo en la cocina un vaso de agua. Finalizo y subo las escaleras. En una hora va a venir Vanessa, ella me dejará un vestido para la fiesta. Y también dice que me maquillará y todas esas cosas cursis que yo no he hecho en mi vida. Llego a mi habitación y antes de entrar me detengo. Otra vez me perturban mis pensamientos. Joder, no puedo dejar de pensar en él. Respiro hondo y me muerdo el labio tratando de encontrar el sabor de los de Justin. Pero no, no da resultado y me siento una completa estúpida. Entonces decido recurrir a mi querido diario. Escribo. Escribo mucho sin tener en cuenta la hora. Y me desahogo. Siempre funciona, nunca me abandona en mis peores momentos. Lo cierro y lo escondo donde siempre. Mi móvil vibra.

De: Vanessa.

Ya estoy lista, ¡ay! ¡Te he cogido también unos tacones que te quedarán geniales! Estoy de camino, en 10 minutos nos vemos.

¿Qué? ¿Diez minutos? ¿Enserio? Miro el reloj y efectivamente, se me ha hecho tarde. Corriendo llego a la ducha y rápido me baño de agua y me enjabono. Me siento mejor, aunque me es imposible sacarlo de mi cabeza. Cuando acabo me enrollo en mil toallas y trato de secarme el pelo lo más rápido posible. Tiempo récord. Creo que jamás en mi vida he logrado esto.

Llaman al timbre. Sí, lo he conseguido. Con una toalla que cubre todo mi cuerpo, y el pelo todavía un poco húmedo, bajo las escaleras rápido y abro.

-¡Tachán! –Vanessa gira sobre ella misma mostrándome su modelito.

-Joder, hoy ligas. –digo abriendo mi boca a medida que subo desde sus piernas hasta su abierto escote.

-¡Ay, nena! Eso espero. Seguro que tú también ligas así. –me señala carcajeando. –Estás muy sexy, Blair.

-Qué graciosa eres, Vann. –simulo una sonrisa.

-Tú no necesitas ligar, tú ya tienes a tu chico. –dice mientras entra dentro.

-Bueno... ¿vamos arriba? –trato de cambiar de tema.

-¡Claro!

Subimos arriba y llegamos a mi habitación. Vanessa deposita varias bolsas de plástico sobre mi cama y de una de ellas saca un precioso vestido color beige.

-¿Te gusta?

-¡Me encanta! –exclamo sorprendida.

-Pues pruébatelo, venga.

Me lo tiende en la mano y unos pocos minutos después aparezco en la habitación mostrándole cómo me sienta. Su boca forma una O. No sé si eso es bueno o malo. Me acerco al espejo y... me gusto. ¡Me gusto! ¡No lo puedo creer! El vestido se pega a mi cuerpo definiendo mi figura perfectamente y, aunque no es mi estilo, he de reconocer que me sienta realmente bien. Doy una vuelta sobre mí misma y... joder, me marca demasiado el trasero. Nunca me he visto así, tan...

-¡Es genial, Blair!

-¿De verdad?

-Creo que hoy todas las miradas van a ir hacia ti.

-Bah, no digas eso.

-Ya verás.

Vuelvo a mirarme. Aún no asimilo que ese sea mi cuerpo. Mi cuerpo metido en un vestido tan ajustado.

-Parece que vaya desnuda. –digo tirando la tela del vestido más hacia abajo.

-Eres una exagerada.

Improbable Dirección | Justin Bieber.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora