#Te arrancare la ropa

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-Tienes razón, tu crees que se atreva a ir a mi casa. -Pregunto con un poco de miedo.

-Lo más seguro es que si, ya se lo que aremos ven vamos por matt. -Dijo entrelazando nuestros dedos mientras Caminábamos hacia donde estaba matt.

-Matt se encontraba en el suelo con las manos en su cabeza, se miraba triste, me acerque a el y me puse a su altura mientras lo abrazaba.

-Que es lo que pasa, tanto te afecto lo que hizo ese vampiro?. -Le pregunte volteando su rostro para que me viera.

-Me afecto bastante, solo quiero olvidar todo. -Dijo matt en un susurro.

-A que se refiere?. -Le pregunte a daimon.

-Creo que es mejor ir a llevarlo a casa no se encuentra bien arianna. -Dijo daimon con una mirada triste, no se como las personas pueden decir que son peligrosos si estos chicos son lo más dulce que e conocido.

-Íbamos camino a la casa de los Génova ya que matt enserio estaba triste y seria mejor que tuviera su espacio a solas.

-Llegamos y bajamos a acompañar a matt asta su habitación, cuando iba a entrar a su habitación lo tome el brazo y lo jale para abrazarlo me partía el corazón verlo hací.

-Puedes contar con migo sea lo que sea matt no me gusta verte hací de triste y si gustas des ahogarte aquí estoy yo vale te quiero. -Dije mientras me separaba de el y dejaba un beso en su mejilla.

-El toco su mejilla y me sonrió mientras me miraba con ternura.

-Gracias arianna eres una gran amiga y si cuando este mejor hablaremos te quiero. -Dijo mientras hacia una caricia en mi mejilla y sonreía.

-Matt entró a su habitación y daimon me jalo hacia un lugar de ubicacion desconocida, llegamos a una puerta que decía stop, daimon abrió la puerta me dejo pasar a mi primero y me abrazo por la cintura.

-Esta es mi habitación. -Susurro en mi oreja mientras su aliento recorría mi cuello para finalmente dejar un beso en el.

- Es una habitación grande las paredes son grises con blanco y hay en estas unos cuantos postrers de diferentes bandas, en una esquina hay un mueble repleto de libros más allá hay un escritorio con una computadora y varios portarretratos donde esta daimon los chicos y sus papás, a un lado de la cama se encuentra una mesita de noche donde se encuentra una lámpara y una foto donde estamos daimon y yo el día que fuimos al parque de diversiones, Sonreí al recordar ese día.

-Es muy bonita. -Le digo mientras volteo y lo abrazo por el cuello y sonrió.

-Tu eres bonita. -Dice mientras jugamos nuestras narices.

-Gracias. -Le digo mientras mi cara esta echa un tomate.

-En realidad no creo que estés enterada de lo bonita que eres. -Dijo viéndome fijamente mientras tenia una mano en mi barbilla para que lo viera a los ojos.

-Y no te debe apenar que la gente se de cuenta de tu belleza. -Dijo juntando nuestras frentes. -Pero esta belleza solo es mía, te e esperado por tanto tiempo y ahora se que a valido la pena la espera. -Dijo para finalmente juntar nuestros labios mientras estos danzaban rítmicamente, hací seguimos un rato asta que tuvimos que parar por que yo tenia que respirar.

-Quiero estar siempre junto a ti. -Dije mientras mi cabeza estaba acurrucada en su pecho.

-Y yo junto a ti, no dejare que nada te pase. -Dijo acariciando mi cabello.

-Pero no entiendes, puede que tu y los chicos me salven pero yo cada dia estoy envejeciendo y contra eso no pueden hacer nada. -Dije con mi voz apagada.

DAIMON // Libro #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora