Te prefiero a ti Cole Sprouse

Capítulo 14

Entramos al restaurante y Cole camino directo a una mesa desocupada y yo detrás de él.
Se sentó en una silla y yo en una frente a él, pero lo pensé dos veces no quiero que se dé cuenta de que que pasa conmigo.

—Sabes que vas a pedir?
—No lo sé.
—Bien, pediré por ti.

En seguida una mesera se acerco y preguntó por nuestra orden.

Mire la rosa entre mis dedos y Sonreí.....¿Sonreí? ¿Estúpida que te pasa?

—¿Te gusta?
—Me hace recordar al pequeño. Así que no te emociones.
—Si que sabes matar momentos. -rodeo los ojos
—Eso no me interesa.
—Me gustas.
—Cole, deja de decir esas cosas.
—¿No te gusta que lo diga?
—mmm ... -agache la mirada.
—¿Entonces?
—Me...
—¿Yo que ?
—Nada.
—¿Te pongo nerviosa? -dijo con cinismo.
—Dejas de decir esas cosas o me voy.
—Ok, ok, tranquila.

Nuestra orden llegó a la mesa y la meseta se retiró.

Mire el pay de limón y me quedé un momento pensando.

He tenido muchos momentos lindos con mis parejas anteriores y más con Dylan, pero Cole... Cole al ser un idiota me hace pasar tan bellos momentos,  así que ... ¿Se lo digo?

—Cole...
—Si... -me contesto después de tomarle a su té.
—¿Vas a comerte eso? -dije pensativa.
—Oye, eso es de Shrek.
—Lo sé. Soy patética.
—¿Lo quieres o sólo querías decirme algo?
—Solo quería molestar.

Seguimos comiendo pero ninguno de los dos decía nada. A pesar de que queríamos que esto se convirtiera en una conversación acerca de Dylan termino siendo silencio.

No tardamos mucho y cuando terminamos de comer salimos de la cafetería y comenzamos a caminar sin rumbo.

Llegamos a un café internet y Cole imprimió unos cuantos correos de la cuenta de Dylan.
Como evidencia, supongo.

Salimos y aún ninguno de los dos decía nada con que entablar un conversación.
Seguimos caminando juntos y decidí romper el silencio. Me estaba matando sin que no estuviera sobre mi molestándome o diciendo eso que sabe que me pone roja de las mejillas.

¿Estas loca?
Grito mi subconsciente.

Si, la verdad si lo estoy.

—¿Sabes? siempre pensé que no me enamoraría de dos hombres a la vez. Cuando a mis amigas les sucedía eso, pensaba que simplemente les gustaba estar de fáciles con todos... -seguí caminando junto a él.

—¿Y ahora? -enfatizo.

Pensé que se pondría como loco cuando mencionara esto pero es lo que me me agrada de él, que podemos hablar sin rodeos y no se emociona ni se molesta sólo actúa normal y eso me da confianza.

—Sé que estuve equivocada porque ya no puedo controlar esto por ti, pero a pesar de todo sigo queriéndolo a él también. Justificame el porque debería elegirte a ti. -dije un poco frustrada.

El mundo lo sentía crecer en mi vientre, no se cuanto valor tuve para decirlo, pero somos adultos, no niños de 15 años... Aunque mis manos están comenzando a sudar.

—Por que cuando me miras, cuando estoy cercas de ti te tensas, bajas la mirada y relames tus labios... ¿hiciste eso por él? -me detuvo sosteniéndome de la muñeca y me acerco mas a él.

—Un poco.... -baje la mirada.

Odiaba que tuviera la razón siempre, que me conociera a la perfección.
Ah sido poco tiempo hasta hoy desde que nos conocimos, pero yo lo siento como si ya hubiesen pasado años. Estoy loca.