Te prefiero a ti Cole Sprouse

Vuelves

Comienzo a sentir como la brisa calaba sobre mi piel. Una brisa fría.

Sentí como el cuerpo de Vanessa se estremecía así que por instinto la apreté más a mi cuerpo. Disminuyendo un poco su piel erizada.

La alarma comenzó a sonar y caigo en cuenta que es Lunes.

Abro los ojos y observó a mi mujer aún dándome la espalda. Beso su cabeza y aparto mis brazos de ella para salir de la cama. Siento como si solo fuéramos ella y yo al inicio de todo.

De repente veo una bola gris de pelos al pie de la cama y eso hace que salga de ella con cuidado.

—Vaya, hasta que te dignas en aparecer, Sr. Grey.

Le digo a nuestro gato quien esta placenteramente dormido al pie de nuestra cama.

Me apresuró a la ventana de nuestra habitación que da hacia la calle y la cierro totalmente.
Después entro al cuarto de baño y lavo mis dientes y hago algunas gárgaras con enjuague bucal.

Me miro al espejo y se que estos últimos 10 años no han pasado en vano sobre mi, jamás he dejado de aprender a ser buena persona, a trabajar más y desde que mis hijos aparecieron lo he entregado todo y de más. Por ende, hoy noto un par de canas en mi cabello al costado de mi cabeza.

Vuelvo a la cama y me meto debajo de las sábanas, en ese instante Vanessa se da la vuelta y queda frente a mi. Como siempre.

Abre sus ojos y yo ya estoy viéndola de la manera más atenta.

—Buenos días amor. - dice ella.
—Buenos días sirena.

Me acerco y le doy un casto beso.

—Iré a despertar a los niños, ya es hora. - le digo.
—De acuerdo. - ella asiente mientras vuelve a cerrar su ojos.
—Y recuerda que hoy salgo de viaje. -le advierto
—Entonces es verdad? - los vuelve a abrir de golpe.
—Si, sabes que no miento con el trabajo.

Salgo de la habitación y voy directo a la habitación de Niall.

Se que mi viaje en estos momentos no es lo mejor pero nunca he dejado mi trabajo de la nada. Ella es muy profesional al igual que yo y aunque no quiera dejarla sola justo ahora tengo que hacerlo por amor a lo que hago también, a pesar de todo, pero sé que ella lo entiende y me aconsejaría lo mismo que estoy haciendo.

Después de desaliñar el cabello de Niall y abrir las cortinas de su habitación diciendo que ya era hora de despertar, escucho su quejido y salgo de su habitación para ahora dirigirme al cuarto de Cloe.

Mr. Grey ya está entre los brazos de Cloe, quien placenteramente lo acaricia de la cabeza a la cola.

—Es hora de ir a la escuela princesa. - le digo con cautela al entrar a su habitación.
—Papi, Mr. Grey es un gato vagabundo? -dice mirando atentamente al gato.
—Tal parece, debería quedarse afuera como castigo, no crees? - me acerco hasta ella.
—No, es un gatito bueno, tal vez solo busca a su duquesa...
—Tu crees?
—Si, mira su carita, grita que quiere una duquesa... Pero no, es mio nadie le puede dar amor. Solo yo.

Y lo abraza de una manera tan incomoda que parece que solo al Sr. Grey le gusta.

—Ok mujercita, ok. Entonces tendré que decirle a Mr. Grey que cuide de mi adorada princesa mientras no estoy. - hice que lo soltara un poco mientras le hablaba con cariño.
—Vas a trabajar? -preguntó ella.
—Así es amor! Quieres que te traiga algo?

Me miro con sus grandes ojos azules y dejó de acariciar al gato para extender sus manos a mi y tomarme de las mejillas mientras yo me acercaba más a ella.