Nuestro : James.

8.- Oficialmente norteamericano.

"¡Felicidades Wanda y James!".

El cartel extendido de un lado al otro del salón ejercía gran impacto apenas se entraba y Tony, quien mantenía su excentricidad se sentía satisfecho con eso. Resistió el impulso de comprar el fantástico y gigantesco oso de peluche que había visto, Pepper no aguantaría eso otra vez.

La fiesta ya era algo demasiado para todos, menos para Tony.

-¡Hey Cap!.- gritó Clint haciendo que Steve diera un salto.

-No me grites casi me da un infarto ¿Como están los niños y Laura?.- se dieron un abrazo y Clint le arrebato a James de sus brazos. Hoy cumplía seis meses y era oficialmente americano, al igual que Wanda.

-Todos bien, Laura quiere que vayan a cenar, los extraña.

-Quizas podamos ir este fin de semana.

-Seria genial, le avisaré.- sonrío y levantó a James por los aires.- ¡Cielos, estas enorme!.

-Comenzó con sus comidas.- dijo el soldado orgulloso mientras su hijo daba balbuceos alegres que resonaban por todo el salón contento de ver a Clint.

-¿Nat no a mencionado nada sobre ser una vaca humana todavía?.

-Deja de decirle así, esta algo...sensible últimamente, pero al parecer ya quiere quitarle ya sabes...la leche materna.

-Solo di que no quiere más a James ocupando sus chichis.

-Clint estas hablando de mi novia.- le espetó cruzándose de brazos.

-¿Quien habla de mi?.- Natasha apoyo su brazo en el hombro de Steve quien se volteo al oír su voz.

-¡Clint!.

-¡Steve!.

Dijeron ambos al mismo tiempo apuntándose cada uno. James río haciendo que varias personas que pasaban de un lado a otro preparando la fiesta se quedaran pegados en él.

-Será mejor que traigan a mi hijo a la cocina, su comida espera.- entrecerró sus ojos y Clint asintió. Le estiro una jirafa de juguete a su hijo quien sonrió recibiéndola mientras Steve rodó los ojos.

-Odio ese maldito animal.- bufó mientras James lo metía en su boca con euforia.

-¡Steve, mala palabra!.- se burlo Clint caminando detrás de Natasha a la cocina.

-Solo esta molesto con la bendita jirafa porque James le metió la pata en su ojo, lo tuvo irritado por casi toda la mañana.- soltó la espía aguantando una carcajada.

-Deberían gustarle los animales de peluche.

-Aún tienes el ojo extraño.- Wanda apareció de la nada seguida por Visión quien como siempre no mantenía muchas distancias con la joven.

-Quizas deba ir a que se lo revisen capitán.
-sugirió Visión.

-Es el capitán américa, no irá a enfermería por un ojo irritado.- soltó Natasha antes de darle el frasco con la comida de James a Clint.

-En realidad si quisiera ir a que me revisaran.- susurró.

-¿Que?.

-¿Puedes acompañarme?.

-No, tengo que darle la comida a James, si quieres ir ve tu solo.- dijo guiñándole un ojo con superioridad.

-Puedo dársela yo, nunca le he dado.- Clint sonrió y la espía bufó luego de un cruce de miradas.

-Que se coma todo Clinton, vamos Rogers.

Ya cerca de enfermería y en un cómodo silencio Steve miró de reojo a su novia y sonrió antes de acorralarla contra la pared, quedando frente a frente con sus brazos cada uno a un lado de su cabeza. Natasha quien al inicio se sorprendió ahora tenia una sonrisa iluminándole el rostro.