24.- Ponerle fin.

3.8K 270 46
                                    

Narra Natasha.

Nunca me consideré inteligente, comencé a creerlo porque todas las personas que me rodeaban lo decían. Donde me entrenaron se cuchichiaba en los pasillos mi nombre y solían decirme que era inteligente,que por eso lograría suplir muchas de las necesidades que se tenia.

Que siempre lograría acomodar todo a mi favor.

No podían estar más equivocados...todo lo que he hecho con mi vida es arruinarla de a poco, destruir lo que amo y tirar por la borda todos los esfuerzos puestos en mi felicidad. Ahí estaba encerrada en esa cámara de entrenamiento con Clint esperando a que saliera con mi novio o ex novio confundido hasta las narices y mi hijo de seguro buscándome o esperando que llegue con él.

-Te lo advierto Natasha, si no abres la puta puerta iré a buscar a Banner. Es mi última advertencia.

Clint no podía habernos visto, o si quiera haberle preguntado a Bruce. Abrí de inmediato para evitar las teorías en mi cabeza y el sonrió satisfecho.

-Ni se te ocurra.

-¿Que pasó con Banner?.

-¿Que te hace pensar que es con él?.- arquee una ceja y me cruce de brazos. Clint me imitó y finalmente rodó sus ojos.

-Te pusiste así después de quedarte a solas con él, él ni siquiera se aparecido cerca de la sala y acabas de abrir.

-Solo quiero que se vaya Clint,que se aleje lo más posible de aquí.

-Pero...¿porque? Oye...¿Estás confundida?.

-¿Que? ¡No! Claro que no, amo a Steve pero...

-¿Pero que?.

-No soy para él, no soy...no soy suficiente para él.

-¿Eso es? Banner te metió esas ideas en la cabeza, por eso te pusiste así.

-Solo confirmó lo que creí desde que estoy con Steve.

-Él único que puede confirmarte eso es el mismo Steve, nadie más...te escogió a ti, porque te ama y no le importa nada más que tú. Vamos, lo tienes preocupado.- tomó mi mano con la intención de llevarme de vuelta a la sala pero me zafé antes de que pudiéramos dar algún paso.

-Clint, Bruce y yo nos besamos.

Su boca se abrió y pasaron algunos segundos, para mí los más largos que haya vivido y finalmente tragó saliva antes de hablar.

-¿Que hiciste que?.

-Osea...no...yo...me besó, me lo quite se inmediato pero...pero lo hice, lo traicioné, traicioné a Steve.

Caí en cuenta de que estaba llorando cuando Clint me atrajo hacia él en un abrazo. Dejé que toda mi tristeza y rabia cayera en mis lagrimas que humedecían su pecho cuando un balbuceo me hizo levantar la cabeza.

Era James.

En los brazos de Steve, quien estaba pálido como nunca lo vi, por un momento se me cruzó por la cabeza de que hubiera llegado hace poco, pero mi suerte nunca era tanta. Nunca estaba de hecho.

-Maldición...- susurró Clint. Yo ni si quiera podía moverme, solo miraba como Steve iba perdiendo ese brillo en sus ojos poco a poco.- ¿Lo oíste, Steve?.

Clint volvió a hablar ya que yo no estaba disponible para hacerlo.

-Yo...estoy de acuerdo contigo ahora Natasha, iré por mis cosas en un rato.

Después de años de agente, y millones de heridas sobre mi, ninguna era tan dolorosa como el dolor que sentía en esos momentos. Me dolía de esa manera que nada puede hacerte sentir bien.

Nuestro :  James. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora