No paramos de correr después de unos minutos pero ya no podía más con lo que me quedo atrás, él reconoce mi cansancio y sin previo aviso me carga como princesa para evitar a los policías.
______: No es necesario esto, puedo correr yo sola ¡Bájame!
Ruben: Como digas -Entonces me suelta en un montón de hojas-
Mientras yo me sacudía las hojas adheridas a mi ropa Ruben buscaba entre las hojas algo hasta que yo me le acerque y tropiezo con algo volviendo a caer en montón de hojas.
Ruben: Creo que lo encontraste primero que yo.
Comienza a limpiar un poco en la zona donde tropecé para encontrarse con la cerradura de un bunker bajo tierra, la gira con un poco de dificultad pero lo logra, al abrirlo no se logra ver mucho más que unas escaleras para bajar.
Ruben se me queda mirando esperando de que entrara yo primero pero dudo de mi misma cada vez que bajaba las escaleras, hasta que Ruben baja y enciende las luces, era una zona de experimento ya que había cuartos separados abandonados con vidrios rotas y camillas de metal.
______: ¿Qué es este lugar Ruben?
Ruben: Aparte de ser un lugar secreto para esconderme, aquí comencé a ser quien soy ahora.
______: ¿A qué te refieres con eso? ¿Aquí naciste?
Ruben: De alguna manera, pero aquí comenzó mi historia.
Me toma de la mano me sienta en una camilla y se sienta a lado mío.
Mi historia comenzó como alrededor de los 10 años con mi hermana se llama Sam de 6 años que juntos con mi madre vivíamos en un pueblo no muy alejado de las afueras de este país, aunque no se parecía en nada a comparación de esta bella ciudad, y tal vez te preguntaras ¿En dónde está?...
Empezare desde mis primeros días de batalla, ya que nunca coci no quiero conocer a mi padre, abandono a mi mama el día que le digo que estaba embarazada de mí, a partir de eso me ha culpado de mi existencia.
Sin embargo desde que podía caminar limpiaba la casa ya que mi madre me encerraba en la casa mientras ella se emborrachaba yo hacia la limpieza, pero el día que decidí salir por una ventana camine a unas cuadras de mi casa y me encontré con un salón de niños... una escuela, fue cuando una maestra me llama la atención por estar a fuera de la escuela y comenzó mi primer día de clases.
Teníamos un techo de cartón el día de mi mama dio a luz a mi hermana, hizo lo mismo que me hizo pero a ella ni siquiera la miraba me tuve que hacer cargo yo de ella, fue difícil ya que tuve que dejar la escuela y comenzar a trabajar para alimentarla, al paso del tiempo empezó a ayudarme en la casa y ella iba a la escuela mientras que yo trabajaba y al regresar me enseñaba lo que había aprendido. Un día vino y me tenía un regalo para mí, era una pulsera hecha con cuentas y decía
Desgraciadamente un día de esos mi mama reaparece después de unas semanas con un hombre que se inmuta al vernos y mama nos toma de la mano a mí y Sam, en el camino nos da sándwiches para llevarnos al parque lleno de naturaleza, nosotros emocionados empezamos a jugar a las escondidillas, mientras mama y aquel hombre platicaban.
Después de un tiempo de que Regina se escondiera empiezo a gritar su nombre, cuando regreso a con mama ya no está, entro en pánico y me adentro al bosque, grito su nombre más de una vez hasta que logro escuchar su voz, grito aún más fuerte y la encuentro atorada en unas ramas la ayudo a salir con unos rasguños en su piel.
Cuando termino de consolarla se hace de noche, solos, congelados y sin alguna fuente de luz nos abrazábamos uno al otro por lo tanto nos rodeaban el sonido de los animales cerca, ella dormía mientras que yo hacía guardia, pero cuando baje los parpados ya no pude abrirlos hasta en la mañana.
Que al despertar ya no estaba conmigo, vuelvo a gritar su nombre, comino un poco más hasta que logro ver movimiento por unos arbustos, me acerco pero era un conejo, me relajo pero antes de dar media vuelta me toman por la espalda y me duermen con cloroformo, trataba de resistir pero era un hombre mucho más fuerte que yo no obstante a los últimos momento de volver a cerrar los ojos mire que cargaban a Regina un hombre de negro.
El golpe de varias maquinarias me hicieron despertar, estaba en una mesa amarrado de las manos y tobillos, no entre mucho en pánico pero al ver a lado mío a mi hermana rodeada de médicos con herramientas y agujas, gritaba, pataleaba, suplicaba, lloraba por que la dejaran en paz, pero al parecer estaba en una sala cerrada, mi voz se gastaba más conforme seguían los experimentos, día, tras día... además nos hacían evaluaciones físicos sobre la forma de desarrollarnos para la guerra y agregarnos aparados en nuestra piel, odiaba las inyecciones ya que se sentía como si pusieran acido en ti.
Fueron 7 años de tortura, el sentirte como rata de laboratorio para experimentos genéticos, las horas pasaban pero solo vivía en una pesadilla, Regina nunca despertaba y al momento de despertar la rodeaban los médicos. Un momento en el que le introducían sus porquerías en sus venas abrió los ojos y me miró fijamente, con un pestañeo cayo una lagrima con una sonrisa y pronuncio las palabras "hermano".
Desde entonces no siento nada por algo, ahí deje de sentir compasión por algo, jalaba las cintas de mis muñecas y trataba de levantar mis pies cada vez con más fuerza, hasta que logro romperlo para tomar la mesa y estrellara con el vidrio, todos los médicos escapan y viene la seguridad pero no tardó mucho en minimizarles, entro a la habitación con miedo y un vacío enorme en mí, me acerco a su cama, le compruebo el pulso y todavía está viva, le hago RCP y puede moverse poco ya que la droga la está contaminando.
Regina: Ruben, hermanito... por primera y última vez que nos vemos... cambiaste mucho...
Ruben: -desatándola de la camilla- No digas eso, debe de haber algo-buscando en la caja de medicamentos de la sala-
Regina: Basta Ruben me haces sentir peor, acércate... Solo quería decirte que fuiste más que un hermano para mi fuiste un ángel que me protegiste de todo... te quiero...
No hubo más respiraciones, caí en rodilladas tomando sus manos, suplicando por su regreso, me tomo más de una semana poder recobrar la compostura, me senté noches a su lado, le contaba historias creadas por mí, pero un día simplemente me rendí.
Cambie mis ropas y al encontrar los casillero de los científicos encontré las cosas de nosotros cuando nos encontraron, la minúscula camiseta con agujeros en ella al igual que el pantalón, en un pequeño contenedor con el nombre de Regina, lo abro delicadamente al encontrarme sus zapatitos de cordones, tenía que llevármelos pero no tendría un lugar donde esconderlos así que deshago los cordones y los amarro a mi muñeca o a mi tobillo.*Muestra su tobillo amarrado con unos cordones negros*
_____: Lamento escuchar todo eso –abrazándolo-
Ruben: -con los ojos húmedos- ¿Porque no pude protegerla? ¿POR QUE FUI DEBIL?
Se levanta y comienza a golpear a la pared, pero inmediatamente me levanto y me le acerco volviendo a abrazarlo.
______: Ruben todo estará bien, lamento volver a hacerte recordar todo esto será mejor que salgamos de aquí.
Ruben: -Comienza a relajarse- No podemos ahora nos están buscando, tenemos que quedarnos aquí hasta el amanecer, acompáñame encontré unas habitaciones para dormir.
Me toma de la mano y recorremos varios pasillos hasta que en uno de los cuartos logro ver un cuerpo en una camilla de metal, pero Ruben parece inmutarse de su presencia y lo ignora, hasta que nos topamos con una puerta que no logra abrirse con lo que Ruben va a buscar las llaves.
En lo que se alejó yo me acerco al cuarto con el cuerpo, en la entrada aparece el número de experimento pero esta tachado y dice Regina, abro lentamente la puerta, entro midiendo cada uno de mis pasos, y me acercó lentamente, no me atrevo a mirar su cara ya que sería demasiado para mí.
______: Hola, no me conoces pero solo vengo a decirte que fuiste una niña muy valiente al confiar ciegamente en Ruben, que nunca lo abandonaste y siempre hacías lo posible por ayudarle, fuiste una guerrera Regina.
Unas lágrimas escaparon con lo que salgo del cuarto, toda esa situación me recuerda a Taylor pero al levantar la vista miro a Ruben recargado en el vidrio esperándome, limpio mis lágrimas y salgo.
Ruben: Gracias por esas palabras, ya podemos ir a descansar.
Me rodea con su brazo para darme un apretón y guiarme al dormitorio.
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Extraños sucesos
FanfictionIba caminado tranquilamente por la noche, estaba perdida en mis pensamientos, tan perdida que me quede sin rumbo a donde ir, me encontraba en un callejón sin salida, en eso me doy media vuelta y regreso a mi camino, y cuando menos me lo espero regre...