Miércoles #18

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Miércoles #18: ¿Es que le conoce?



Katrina, al despertar el miércoles por la mañana, sin la necesidad del despertador, se sentía algo mejor que la noche anterior. Revisó su móvil y Jourdan le había cancelado las salidas a correr y la invitaba ir al gimnasio por las tardes. Era lo mejor para el clima que comenzó a hacer días anteriores.

Era demasiado temprano por la mañana, no sabía qué hacer, así que se levantó y duchó rápidamente, volvió a la cama y comenzó a jugar con el móvil, revisar redes sociales y a distraerse un poco. Se sentía bien, como una adolescente cualquiera a punto de graduarse, sin novio y con amigos y familia grandiosos. Después de haber ojeado todas las páginas que le gustaban en internet, bajó a la cocina y se preparó el desayuno mientras Roko la observaba desde su cama. La nieve caía, pero no tanta como para obstruir los caminos.

Se sentó a la barra a desayunar, vio el portátil a un lado y decidió observar el correo electrónico, aun había un profesor que no le respondía y tenía la esperanza de que por la madrugada lo hubiese hecho. Y sí, lo había hecho, le había mandado el trabajo que habían hecho las clases anteriores y le avisaba que tenía que hacer un vídeo...

Katrina miró con sorpresa aumentada la pantalla al leer el correo completo. No solamente tenía que hacer un vídeo, tenía que subirlo a una plataforma electrónica y compartirlo a todo el mundo para poder tener comentarios sobre el vídeo. ¿Cómo se suponía que lo haría?

Cerró el portátil y tomó un trago de café.

-¿Cómo se supone que haré el vídeo? Soy pésima editando, ni siquiera sé cómo es que se hace.

La frustración comenzó a consumirla y ni siquiera lo había empezado. Algo o alguien golpeó la puerta de la cocina, Katrina dio un salto y volteó a mirar mientras Roko comenzaba a ladrar estruendosamente. Se puso en pie y abrió sin correr la cortina para ver qué o quién era, un Hyun cubierto de nieve en los hombros y cabeza la tomó por sorpresa.

-¿Qué haces aquí?

-Pues, realmente no lo sé-. Parecía diferente. No le había contestado como usualmente lo hubiese hecho, con sarcasmo e ironía, además, miraba hacia el suelo.

-¿Quieres pasar? – Comenzó a sentir algo en el estómago y no sabía qué era ese algo exactamente. Lo había visto el día anterior y estaba segura de que pasarían demasiados días antes de que eso volviese a pasar. - ¿Te apetece algo caliente? – Ofreció mientras se hacía a un lado sin esperar la respuesta de Hyun.

-Sí, un café, por favor.

Hyun ni siquiera se molestó en quitarse el exceso de nieve, Roko le ayudó cuando hizo que se tambaleara al ponerse en dos patas sobre su pecho, Hyun únicamente le respondió frotándole la cabeza. Katrina mandó a la cama a Roko pero lo único que este hizo fue alejarse un poco para que Hyun pudiese entrar y cerrar la puerta por donde una ráfaga de frío viento entró.

Negando con la cabeza, Katrina había ido a la estantería a tomar el paquete de café en grano para moler. Hyun se quedó parado en su lugar, Roko se acercó, se sentó frente a él y le puso la pata en la pierna. Hyun volteó a verlo y le sonrió, le había tomado cariño a ese cachorro. Se sentó en el piso, se cruzó de piernas y comenzó a rascarle la panza mientras Katrina terminaba de moler el café y ponía la cafetera a calentar.

Ninguno de los dos dijo nada hasta que el café estuvo listo. Katrina no tenía muy claro que podría pasar con un Hyun letárgico, por llamarlo de alguna manera. A ella le parecía que los movimientos de él eran perezosos y desganados, como quien no quiere la cosa pero aun las hace por obligación. Del lavavajillas tomó dos tazas y las llenó de humeante café, aunque ella ya tenía una taza servida, sabía que ya se había enfriado y a ella no le gustaba el café frío.

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