¿Donde está mi banda?[The vamps]

epílogo

Han pasado tres años. Tres años desde ese día en la granja. Tres años desde que Brad se fue.
Nosotras terminamos nuestros estudios. Al final, no sé ni como,James me convenció para ir con él ha Inglaterra,y obviamente Patitas de Pollo y Hufflepuff vinieron conmigo.
Tris y Patitas llevan saliendo desde hace un año y medio,y se puede apreciar lo bien que se complementan el uno al otro. Hufflenor sigue igual,a decir verdad. Pero, James y yo,ni de lejos. Desde la muerte de Brad James se empezó ha encerrar en su burbuja interna, empezó ha ser más frío conmigo,ya casi ni nos hablamos. Yo creo que él ha cortado indirectamente nuestra relación.
Estábamos en las afueras de Inglaterra,en una playa de una ciudad que ni me sé el nombre. Estábamos en una hoguera. Hufflenor estaban haciendo manitas,mientras que Tris y Patitas estaban dandose un baño en la playa. James estaba leyendo,siempre me había encantado ver a la gente leer,pero verle a él era como ver un universo distinto,quería hacercarme a él decierle las cosas que nos solíamos decir. Pero cada vez que le hablo simplemente me responde en una manera muy borde.
No podía hacer nada,no quería hacer nada. Así que me levanté del tronco en el que estaba sentada y empecé ha dar un paseo para volver a la vieja casa rural que habíamos alquilado para vivir mientras tenemos un "retiro espiritual".
Estuve caminando durante varios minutos hasta que James me alcanzó, ni siquiera me había dado cuenta de que me estaba siguiendo.
-¿A donde vas?
-A la casa. Tengo frío aquí fuera.
-¿Por qué lo llamas "la casa" y no casa o nuestra casa?
-No siento que sea mi casa.
Llegamos a la puerta y en el felpudo había una carta con ¡Estampado animal! ¡No es posible!
-James-le di unos golpes en el brazo por el asombro-llama al resto.
-¡CHICOS!-todos vinieron corriendo. Hasta Patitas de Pollo y Tristan, y eso que estaban empapados.
-Oh. Por. Dios.
-Puede que sea otra persona ¿Verdad?
-Solo hay una manera de saberlo.-cogí la carta y la abrí. Dentro había una foto de ¡Brad! Brad estaba en una silla atado con una venda en la boca,como aquel día. También había un periódico con la fecha del día en el que estamos. Y una carta. Una maldita carta.

The game isn't over.