Tú...Idiota

Espejismo II

- ¿Bella? -oí que me llamaban y me giré. Alice me mirada con ansiedad.

Dejé mi rigidez y le sonreí.

- Estoy bien -le aseguré sabedora de sus preocupaciones.

Me dirigí a mi asiento con la mirada agacha y empezando a sentir escozor en mi mejilla. Si bien mi animo había decaído gracias a mi propio subconsciente, no dejaba de pensar que debía ayudar a Rosalie y de paso vengarme de Royce, porque ese golpe no se lo iba a pasar por alto.

- ¿Qué es lo que sucede contigo? -me recriminó Emmett. Alcé mi mirada y me encontré con sus ojos entornados y con la impotencia en ellos.

- Emm, no quiero que Rose...no quiero que esté mal y no voy a permitir que ese patán la destruya - «no como estoy yo» pensé.

- Pero, justo cuando estamos cenando ¿en serio, Bella? - luego de no contestarle nos retamos con la mirada y me abrazó con fuerza. Con dificultad detuve mis lágrimas, estábamos en un lugar público.

Nos separamos y me fijé en las personas que posaban, intentando disimular, su miraba en mi rostro ¿se estaría inflamando? Luego recordé que el incidente pudo haber sido algo escandaloso y probablemente me convertí en el entretenimiento de la noche. Miré mal a esas personas curiosas que de inmediato dejaron de husmear en nuestra dirección; tras esto fije mi vista en mis amigos y tragándome mi orgullo, decidí disculparme.

- Alice, Jasper, Emmett, Edward, lamento haber arruinado la noche con ese espectáculo que di -miré a cada uno y en sus rostros no encontré reproche, ni siquiera en el de Edward que, para agrandar la sorpresa, tampoco me sonreía con petulancia jactándose de mi escándalo.

- Yo no tengo nada que perdonarte, Bella, iba a hacer lo mismo, pero te me adelantaste -me sonrió Alice con amabilidad y solté una carcajada.

- Tampoco yo, llevo diciéndole a Rosalie que no me gusta Royce, pero no me hace caso, dice que son tonterías mías -me dijo Jasper con fastidio.

Comprendí la razón de su tono, porque, aunque son gemelos y teóricamente nacieron el mismo día, Rosalie siempre lo ha molestado con haber nacido quince minutos antes que él, de modo que ella es «la mayor»; supongo que Jasper no está muy cómodo con el novio de su hermana, pero seguramente Rosalie le ha dicho que no se meta en sus asuntos, que ella es la mayor y sabe lo que hace.Le sonreí a Jasper comprendiendo su estado, el hermano mayor siempre creyendo que toma una buena decisión sólo por haber nacido primero.

Luego miré a mi hermano que no dijo nada, sino que me miró con ternura y asintió en mi dirección, él sabe que yo no me suelo disculpar con frecuencia; sonreí con gratitud y miré a Edward esperando su reproche, que empezara a decir alguna elocuencia sobre el apodo que me tenía, pero no sucedió nada de lo que esperaba. No hablo, no sonrió, se limitó a fruncir su ceño y asentir con aprobación; consternada, le devolví el asentimiento y luego les sonreí a todos.

-Bueno, pasado el mal rato, terminemos nuestra cena.

Pronunciadas mis palabras continuamos charlando, esta vez sin la tensión que venía sintiendo antes, podía decir con total tranquilidad que estábamos disfrutando la cena. Hablamos de nuestras experiencias de niños, por supuesto que los sonrojos de vergüenza no faltaron para todos, incluso para el rey, quien estaba riendo y compartiendo sin su mascara de superioridad, con sus ojos esmeraldas, cálidos, y su sonrisa torcida totalmente sincera. Viéndolo ahora, sin su fachada, era realmente hermoso, no sólo físicamente, sino que su alma brillaba, era dulce y muy buena; no era algo que pudiera creer, él simplemente era la encarnación griega de un dios antiguo... Adonis.

- ...luego Bella salió volando de la bicicleta y se estrelló contra un auto ¿verdad, Bell's? -mi llamada por parte de mi hermano me devolvió a la realidad.