-¡Vamos, Bell's con fuerza!- me dijo Emmett, animándome en las gradas.
Alcé el balón y lo lancé con fuerza, y para mi sorpresa, salió bien, pasó la malla y en la respuesta mi equipo se encargó. Habíamos ganado con este punto, y lo mejor, le había ganado a la plástica alfa, la del cabello rubio rosado.
Eso, pon esa cara, cariño- pensé.
- ¡Muy bien, Bella!- me felicitó Rose, quien estaba en mi grupo.
- Gracias, era hora de redimirme luego de que los primeros puntos fueran culpa mía.
-Oh, vamos, no te des tan duro.
- Rose, soy muy torpe, una de diez me saldrá bien.
-Créele, es muy torpe- anunció su llegada mi hermanito adorado.
Rose le sonrió en respuesta y a Emmett se le contagió la sonrisa. Su aura de alegría era contagiosa, sonreí yo también y gire mi cabeza a la derecha topándome con la mirada que sentía en mi espalda, la plástica torcía la boca a un lado mirando al chico de los ojos verdes, Edward, mientras este clavaba su fría mirada en mí, era tan desdeñosa su mirada que la retire de inmediato encontrándome con mi hermano y Rose abrazados.
-¿Tengo cuñada ya?- pregunté divertida. Se separaron y Rosalie estaba como un tomate, Emmett solo sonreía.
-No- contestó Emmett aun sonriendo-, pero me alegro que tengas una amiga como ella ¿sabes? Rose rompe el estereotipo- le sonrío a la aludida.
-Alguien tenía que poner en alto a las rubias- Rose me guiñó un ojo.
- Bueno, chicas las dejo, me toca a mí.
-Suerte, Emmett- le grité.
-No la necesito- contestó.
Rose y yo nos vimos, soltamos una risita, luego fuimos a las gradas a animar a mi hermano; solo que en su equipo estaba el hermano de Alice, y esa camiseta del uniforme se le marcaba en los brazos y sus piernas que estaban muy torneadas, bien, la verdad está más que apetecible, él tenía razones para presumir, debía admitirlo; sonrió torcido cuando notó que le miraba embelesaba. Me sonroje.
La suerte fue que Rosalie miraba al partido y a Emmett, no se percató de mi cara de tomate.
El partido terminó y el equipo de Emmett ganó, los puntos fueron anotados por él y por Edward.
-¡Bien hecho, grandulón!- lo felicité.
-Te dije que no necesitaba suerte.
-Vale, como tú digas.
-Bella, recuerda, a las dos o caminas sola a casa. - enarqué una ceja- hablo enserio- suspiré.
-Bueno, como digas.
-Adiós, chicas- se despidió de las dos de beso y luego fue a cambiarse. Rose y yo nos miramos e hicimos lo mismo. Allí dentro nos cambiamos y entraban las plásticas cuando nosotras salíamos.
Me miraron de arriba abajo, les clavé la mirada y ellas la retiraron, Rose hizo lo propio. Salimos y Emmett y Edward estaban hablando juntos y riendo. No podía ser cierto.
-Esto es una broma de mal gusto- mascullé.
-Lo mismo pensé cuando me sucedió con el mío, pero no te preocupes, él estará bien y nada cambiará- Rose me consoló, claro que ella debía saberlo, Jasper su hermano, también era amigo de él-. Vamos, Bella, ya está.
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Tú...Idiota
FanfictionBella vuelve a su hogar sin su más grande amigo, su padre, luego de su muerte, con su madre y hermano para empezar en el lugar que amaba su padre, Forks, allí el amor se dará solo que las situaciones no serán las épicas del amor consagrado, porque...