CAPITULO 7- SEÑALES DEL DESTINO.

728 48 120
                                    


NARRA MARTA.

Desde hace unos días mi vida no ha vuelto a ser igual, soy una completa desconocida incluso para mí misma.... El día 24 de Diciembre quedará marcado con tintas de sangre en mi corazón, ese mismo día que todas las torres de mi castillo se derrumbaron, en la que todas las estrellas de mi cielo se apagaron, aquel día siempre será el día más triste y a la vez bochornoso que he podido llegar a presenciar, ese día sentí la vergüenza más profunda que se puede sentir, noté que todas las miradas de pena se posaban en mí. El que creía hombre de mi vida, el mismo que me juro frente al altar un para siempre, el padre de mi hijo, por el único que dejé a mi familia y recorrí miles de kilómetros para estar a su lado, me traicionó, me clavó el puñal más doloroso sobre mi corazón, el que no sé si algún día lo podré recuperar.

Mientras todos cenábamos tranquilos, en casa de sus padres con su familia y mi hijo, el mismo que tuvimos con tanto cariño, una guarra de la que ni me acuerdo de su nombre, se presentó para cenar con él, por lo visto llevaban viviendo una doble vida más de un año, en el que nos había estado engañando a las dos, porque según cuenta ella no sabía que yo existía, solo quería cenar con la persona con la que mantenía un idilio desde hace poco más de un año, mientras que todos ponían cara de circunstancia y me miraban con pena en sus ojos me levanté de la mesa reprimiendo mis lagrimas, con el poco orgullo y la dignidad que me quedaba tomé a mi hijo de la mano y salí corriendo de esa maldita casa, Adrián solo preguntaba que había pasado y yo sin saber contestarle y con miedo de enfrentarme a la realidad de mi casa, volvimos... los siguientes días no fueron mejor, Ezequiel no volvió, ni una sola llamada, ni un mal gesto que denotara arrepentimiento, poco a poco los días fueron transcurriendo entre pesar y preguntas sin respuestas, el día de fin de año, mientras que escuchaba a los vecinos de fiesta y jolgorio yo estuve en mi cama con mi hijo conteniendo mis lagrimas y sin poder explicarle porque en realidad estábamos así y no felices y contento con sus abuelos como planeamos, a mi familia tampoco quise contarles nada, solo tuve el arrojo de ponerles excusas baratas de porqué Ezequiel no se ponía al teléfono o de por qué me notaba la voz triste, estaba sola sin nadie, con el único apoyo de mi hijo pequeño que evitaba que me viese en mal estado o llorando.

Desde ahí mi vida dio un giro, mi profesión que era una de las cosas que más adoraba se convirtió en algo rutinario que poco a poco empecé a detestar, me sentí sola en un pueblo que no es el mío ni conozco, sin apoyos de nadie, los días posteriores recibía pacientes sin ganas de atenderlos, se me olvidaba todo, estaba desganada sin ningún objetivo en la vida, solo llorar mis penas. Todo esto se recrudeció cuando a los dos meses, hace unos días, me encontré en mi buzón una cita de un abogado, mi marido o ex marido, la persona que me había hecho más feliz pero también a la vez más daño, después de dos meses sin querer saber nada de mí ni de su hijo, me pidió el divorcio con la consiguiente custodia total para él de su hijo, nuestro bebé, como única causa que no estoy centrada, que soy una mala persona a la que tuvo que abandonar como si fuese un perro y buscar otra vida porque conmigo se le hacía insufrible, llegué incluso a pensar quitarme de en medio, y creo que si no fuese por mi hijo lo hubiese hecho, pero como el refrán dice cuando se cierra una puerta una ventana se abre, y como si el destino me lo quisiese poner en mi camino, para darme la luz que me faltaba, un paciente muy especial llegó a mi consulta, sin casi esperármelo un rubio de ojos azules llamado Calum, hizo aparición estelar hace muy poco para hacerme recuperar todas las ilusiones perdidas, es un chico joven risueño que lo ha pasado muy mal, desde que su hermana se fue sin decir nada, se ha convertido en alguien muy especial, no sé qué me pasa cuando estoy a su lado estoy bien, y me siento fenomenal, aquel chico ha hecho que recupere la fe en mí, en mi profesión y que cuando me toca consulta junto a él aunque tenga el peor y más triste de mis día me siento feliz.

Justo al pasar por delante del mueble, mi blusa se quedó enganchada con una foto, la casualidad de la vida quiso que fuera exactamente con una en la que salimos los tres sonriendo, Adrián, un poco más pequeño, yo y por ultimo mi ex marido mientras sus manos se ajustaban a mi cintura, como ellas sola lo hacían, la cogí para desengancharla y una lagrima empezó a brotar por mi cara mientras que miles de recuerdos se amontonaban por mi mente, tenía que dejar de llorar, no podía hacerlo más por él todo era pasado, me había hecho mucho daño, pero por mi hijo y su custodia debía ser fuerte, ahora más que nunca no me podía venir abajo, me senté en una silla para coger fuerzas, seguía llorando por ese hijo de la gran... malnacido, ojala su nueva y radiante novia le haga tener más cueros que el padre de bambi, ojala sufra, la mitad de lo que me hizo sufrir a mí aquellas navidades, en la que papá Noel me trajo el regalo más amargo que le puede llevar a la vida de una persona.

Pero de como si se tratase de una señal, el timbre volvió a sonar, me limpié las lágrimas que bajaban por mi cara, justo ahora no esperaba ningún paciente, guarde la foto que hace unos segundos tenía entre mis manos para ir corriendo a abrir la puerta, miré por la mirilla y pude reconocer a una silueta de un chico, pero no logré descifrar quien era.

- Marta –habló el chico justo antes de abrir la puerta- soy Calum - aquel chico era Calum, una sonrisa instantánea apareció por mi cara, como si fuese un arcoíris justo después de la lluvia- tengo que decirte algo – quité mi mano del marco de la puerta recién abierta en señal de que pasara, y así hizo a los pocos segundos el chico ya estaba sentando en el sofá que tenía para mis clientes- voy a tener que dejar de venir a las consultas - en ese momento el mundo se vino abajo, el destino no podía ser tan cruel de quitármelo justo ahora que parecía que volvía a recuperar la ilusión, no podía irse me negaba no-

- Calum no –traté de contener las lagrimas pero fue inútil, las mismas que cayeron antes volvieron a aparecer por mis mejillas de nuevo, últimamente no estaba bien y cualquier noticia hacía que me pusiese así- no puedes irte – logré recomponerme, para pensar bien las palabras- te falta mucho, necesitas hablar con alguien, contar tus problemas... y yo estoy dispuesta a escucharte siempre. Justo al terminar y como síntoma de toda la emoción que estos últimos momentos estaba pasando un largo suspiro fue pronunciado por mi boca-.

- Pero no tengo dinero suficiente para pagarte las sesiones – en ese momento se pudo dar cuenta de cómo yo lloriqueaba- ¿Marta te pasa algo? –preguntó curioso-

- Joder Calum, no estoy bien, todos las personas que quiero me abandonan, estoy sola, no tengo a nadie y estoy mal, mi marido me dejó el día de navidad por otra, me ha pedido la custodia de mi hijo, aquí no tengo a mi familia... no tengo a nadie estoy sola, lo estoy pasando fatal, no estoy bien – pude decir todo de golpe sin contener mis lagrimas, él rápidamente se acercó a mí para darme un abrazo de los que reconfortan, justo el que necesitaba olía tan bien, era tan cariñoso, es como un bebé pequeño al que hay que cuidar, muy adorable, alguien que no se encuentra todos los días- necesito a alguien que me escuche y me apoye...

- Aquí estoy yo –dijo a mi oído- yo te escucho y te comprendo y ese gilipollas debió ser muy tonto para perder a alguien como tú y tu pequeño, la vez que lo vi en el colegio me pareció un niño entrañable Marta...

- No te vayas, no te cobro, lo hago gratis ¿es por el dinero? Pues no te cobraré, pero a cambio tu me escucharas cuando yo este mal, ¿de acuerdo? –mientras seguía abrazado a mí pude ver como asentía con la cabeza, sin dejar el abrazo- 

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 

BUENOO BUENOO BUENOO PUES YA SABEMOS CON QUIEN ESTA MARTA JEJEJEJEJEJJEEJ.... la que he liado pollito...  la que va a liar Ariadnaaaaaaaaaaa la que va a aliarrrrrrrrrrrrrrrr lo sabemos todossssssssssssss.... 

¿que os parece la novela???? ¿que creeis que ocurrira?? ¿os va gustando? vamos vamos vamoss que ya queda muy poco para el reencuentroo ehhh.... jajajajajajajajajajajaaj la que nos queda

FELIZ DIA DE REYES MAÑANA QUE OS TRAIGAN MUCHAS COSISS EHHH A LOS GEMES INCLUSOOO JAAAAAAAAAAAAAAAAA QUE LO HABREMOS TRAIDO. 

RUN II : no te alejes de mí (gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora