RUN: JUNTOS HASTA EL FIN: CAPITULO EXTRA 2

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NARRA LUCIA.

Los minutos pasaban como horas, no podía concretar el tiempo que ha pasado desde que leí la noticia hasta ahora, estoy encerrada en mi cuarto con mi la cara apoyada en la almohada, cientos de lágrimas caían por mis mejillas como gotas de lluvia en día de tormenta, aún estaba en shock por el contenido del periódico, mi madre había muerto, seguramente se habría suicidado tirándose por el barranco tal y como refleja el titular, no entendiendo nada, ¿porque me afecta cuando me causó tanto daño?, tampoco comprendo por qué lo hizo, me siento culpable, una mezcla de remordimiento, pena y alegría pasan por mi mente cada vez que intento asimilar la noticia, y eso hace que me sienta mucho peor.

Ella no me quiso, me trató mal, me apartó de mi hermano sin ningún motivo, estoy segura que el "secuestro" también fue ideado por ella, pero eso no evita que estos sentimientos afloren en mí, me avergüenzo de que al principio un halo de alegría recorriese mi cuerpo, lo primero que pensé antes de encerrarme en mi cuarto a llorar fue que ya todo pasó, que podía tener la tranquilidad que tanto necesitaba. Pero ella es mi madre, la mujer a la que mi padre amaba, la que me dio la vida y en cierto modo intento comprender porque me tenía tanto odio, supongo que no le fue fácil tener que dar a su hijo en adopción, en su situación yo no hubiese sido capaz de hacerlo, lo alimentaría como pudiese incluso quitándome la comida de mi boca para dárselo a él, soy madre y un tiempo también estuve sola, cuando Daniel se fue lo pasé muy mal, pero mi hijo es lo primero. Quiero pensar que estaba celosa de mí, papá me daba mucho cariño hasta el día que murió, me dejó la empresa a mi nombre, yo era su princesita, la niña de sus ojos, y ella no lo amaba, estoy segura que estaba con él por dinero, por tener una comodidad que sin él no la tendría, después se hizo cargo del internado, e hizo sufrir a algunos niños, sobre todo a mi hermano y sus amigos... era una mala persona, y en parte se merecía todo lo que le ha pasado.

Después Daniel se lo comunicó a mi hermano, al fin y al cabo también es su madre, pero él tuvo una reacción más calmada, la noticia no le afectó ni lo más mínimo y siguió preparándole la merienda a Ariadna, en parte comprendo su actitud, le hizo mucho daño incluso más que a mí, le da la indiferencia que se merece, en eso lo envidio, no haber sabido darle la importancia necesaria para que no me sobresaltara.

Pese a los intentos de mi marido, que bien suena esa palabra cuando la pienso, y de mi hermano para que abriese la puerta, no lo había hecho, quería estar sola, necesitaba echar todo esto que llevaba dentro, la rabia, la impotencia, el dolor e incluso la pena que me provocaba todo esto...

- Venga princesa – Daniel volvía a la carga, para que de una vez por todas abriese la puerta- te quiero abrazar, besar, sé que no le debes estar pasando bien, nena, pero ábreme por favor, Danielín quiere verte, ha llorado han pasado más de 4 horas que estás ahí adentro...

- Estoy bien, pero quiero estar sola – respondí sacando la mayor de las fuerzas, no quiero que me escuche llorar-

- Lucía, cariño, come algo, al menos ábreme para darte la cena y me voy te lo prometo, esta noche duermo en el sofá si quieres... pero quiero que comas algo – seguía detrás de la puerta era muy tozudo y no se cansaría, al decir esto pensé en que realmente llevaba mucho tiempo encerrada, si era la hora de la cena debía ser muy tarde. En cuestión de segundos escuché unos pasos que venían hasta mi cuarto-

- Soy yo el rubio ¿a mí sí me abres? –la voz de mi desesperado hermano inundó la puerta- nena tengo varios problemas, Ariadna no me deja tranquilo no sé qué le pasa esta tarde que está muy alterada y solo me pide que le lleve comida y tengo a tus pequeños a mi cuidado y no doy a basto, como alguien más me pida algo o lloren voy a explotar – desde aquí lo escuchaba como empezaba a gimotear- no puedo más, los gemelos son dos monstruitos, Ariadna me saca de quicio y regaña cuando no le echo cuenta, y Danielín llora y llora, y cuando no llora es porque me tira del pelo, de las orejas o directamente me está pegando, ah – lanzó un suspiro y siguió hablando- quería que le diera de comer , ¡no puedo más! ¿y en mí? ¿Quién piensa en el rubio? – estaba cada vez más desesperado, tengo que dejar de llorar y centrarme en lo que realmente me importa, no puedo seguir depresiva por algo que ha pasado y que a la vez no puedo cambiar-

Al instante reaccione, y me levanté hasta la puerta para apretar el pomo que diera paso a Daniel y mis pequeños, ellos eran los que realmente me reconfortaban.

- Pasa tú – le dije a Daniel con voz de niña pequeña, mientras entornaba la puerta, en sus manos llevaba un plato de macarrones, Calum se hizo hueco entre la puerta y soltando un suspiro me entregó a Danielín que lo llevaba entre sus brazos, cogí a mi hijo decidida y Calum se fue hasta su cuarto, seguramente a seguir cuidando de Ariadna, que está en sus últimos días de embarazo y está más pesada de la cuenta, y esto lo digo en todos los sentidos, mi novio, o marido como me gustaba llamarlo desde que nos casamos, cerró la puerta con su pierna justo cuando se había dado cuenta que los gemelos estaban dentro, para ser sincera desde que nos casamos está mucho más atento a todo, ha madurado y eso se nota, no quiere repetir los errores del pasado, dejó en la mesilla el plato y se tiró en la cama junto a mí, a nuestro alrededor había dos gemelos y un bebé que se hacían hueco entre nosotros-

- Tienes los ojos rojos princesa, has llorado mucho – dijo dándome un beso en los labios mientras que se intentaba zafar del agarre de los gemelos- te quiero, te quiero mucho y lo siento, no llores por ella, no tienes que estar así por ella, te hizo mucho daño y no merece la pena, si mi madre apareciese igual intentaría tomar la actitud que ha tomado tu hermano, os hizo mucho daño y si piensas y estás así lo seguirá haciendo – me dio otro suave beso en los labios y me empezó a tocar las orejas- ¿quieres que te dé de comer? – puso una sonrisa- como le hago a los gemelos, si quieres te doy de comer, te pongo un babero... te quiero mucho princesa, mi princesa y no quiero que estés triste – tomó el plato y me empezó a dar los macarrones poco a poco, mientras que los gemelos se reían y decían cosas que no lograba a entender-

Los minutos pasaron y Daniel terminó de darme los macarrones, seguíamos tendidos mientras me daba un leve masaje en el brazo, los 5 en la cama, los pequeños gemelos ya habían conseguido dormirse y Danielín estaba empezando a protestar seguramente porque tendría hambre o querrían que le cambiaran el pañal, pero había conseguido quedarme más tranquila y si algo no cambiaba en segundos me dormiría. Pero los gritos de mi hermano inundaron la casa, cada vez se escuchaban más cercanos y unos pasos más fuertes.

- Daniel, Lucía – gritó llegando a la puerta- Ariadna , Ariadna acaba de ponerse de parto – estaba en un estado muy alterado e iría a más... - 

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BUENO BUENO BUENO BUENOOOOO... pues otro capitulo más ¿no???? el segundo de los extras madre míaaaaaaaaaaaaaa el segundo yaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!

¿que os ha parecido? ¿os ha gustado? ¿os esperabais quien era? ¿y la reaccion de Lucía? ARIADNA SE NOS HA PUESTO DE PARTO madre miaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa puajajajajajajajajajajaa

el siguiente viene cargado de algo que no esperais... ya vereis.. ya vereis ya vereisssssssssssssssssssssss... esa es la trama para la que hice esta parte...

MUCHISIMAS GRACIASSSSSSSSSSSSS POR VOTARME COMENTARMEEEEE Y POR TODO LO QUE HACEIS POR MI GRACIAS GRACIASSSSSSSSS Y GRACIASSSSSSSSSSS

RUN II : no te alejes de mí (gemeliers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora