Hielo y Fuego (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 15 Sorpresas.

---Hiroki---

Tome mi abrigo y salí de la empresa ya que tenía que ver a uno de los inversionistas de mi empresa, en verdad últimamente me he vuelto muy impaciente y es que la culpa la tienen los trabajadores por no tener a tiempo la cantidad de material que les pido.

-Buenas tardes. –salude y me senté en una silla.
-Buenas tardes señor Kamijou, me alegra que haya venido.
-Y bien, ¿de qué querían hablarme?
-Es que recordé que usted había solicitado conocer a nuestro inversionista y aquí lo tiene. –comento señalando a un tipo pelinegro y ojos color celeste.
-Mucho gusto Kamijou Hiroki yo soy Wataru Kenji, un placer conocerlo. –estiro su mano.
-Lo mismo digo. –comente y estreche su mano.

Nos quedamos platicando acerca de cómo dirijo la empresa, la cantidad de empleados que tengo y los nuevos proyectos que se avecinarían.

Al terminar la reunión Wataru me invito a comer con él pero tuve que rechazar su oferta ya que tenía cosas que hacer, intercambiamos tarjetas y me dirigí hacia mi casa.

Me sorprendió que alguien quiera entrar a la empresa aun cuando coloque en el periódico que sea una persona capaz de trabajar bajo presión, ese chico se me hizo conocido pero como conozco tanta gente no le doy importancia, solo es un trabajador más…

Las únicas personas que saben de mi lado bueno son mi familia, Kaito y Akihiko, ya que a nadie más le he abierto mi corazón y jamás lo volveré a hacer, la verdad no recuerdo el por qué, solo sé que en el pasado fui lastimado y preferí no encariñarme con nadie.

Al llegar a mi casa encontré todas las luces encendidas, así que di un gran suspiro y entre a la casa.

-Al menos podrías apagar las luces…
-Hiroki, bienvenido. –sonrió y me beso.
-Estoy cansado. –lo abrace.
-Pero ya estás aquí.
-Lo sé. –reí- ¿Qué hay para cenar?
-Tú, -me abrazo y me acostó en el sofá- tengo ganas de comerme a Hiroki.
-Baka. –reí.

“No puedo creer que ya llevamos 4 años juntos…”

---Nowaki---

Los días pasaban lentamente, era como si no quisieran que me encontrara con mi bello castaño, en verdad aun no puedo creer que trabajare para él, lo que me dijo Kaito seré como su mano izquierda…

Aunque me sorprendió que no me haya reconocido cuando le dije quien era, pero no me importa porque me encargaré de recordarle quien soy y así ser felices, quitar todos estos años que han pasado y dejarlos en el pasado…

El lunes me levante muy temprano y me arregle, tome mis cosas y me dirigí a la empresa en mi carro. Como nuevo empleado me dieron un lugar donde estacionarme, subí por el ascensor y de nuevo me esperaba Kaito en la entrada.

-Buenos días Kusama.
-Buenos días Kaito, y por favor solo dígame Nowaki.
-Así será, por favor acompáñeme, te mostraré tu oficina.
-Muchas gracias.

Caminamos por toda la empresa hasta que nos paramos en la entrada de una oficina del lado izquierdo del lugar, en medio había una más amplia y del otro lado una del mismo tamaño que la mía.

-Aquí será tu oficina, la mía es esa de allá, -señalo el lugar- la del medio es la del presidente de la compañía.
-Entiendo. –asentí.
-Buenos días. –suspiro una voz que hizo que mi corazón latiera como un loco.
-Buenos días Hiroki, ¿Cómo estás? –pregunto Kaito.
-Muy bien gracias. –comento y Kaito le entrego unos papeles.
-Buenos días Hiro… -dije y me interrumpió.
-Por favor dígame Kamijou que no me gusta que los desconocidos pronuncien mi nombre. –me miro y frunció el seño.
-Lo lamento presidente Kamijou no volverá a pasar. –comente.
-Eso espero. –dijo y se metió a su oficina seguido de Kaito.

Entre a mi oficina y me encanto. Todo tenía un cierto estilo, había un gran ventanal, un librero grandísimo, un escritorio, unos sofás por si recibía a alguien. Me senté en mi silla.

Mi amado Hiroki, parece que no me recuerda…

Pero ¿Dónde está el dulce chico? ¿Dónde quedo sus hermosos sonrojos, o su sonrisa única cuando conocía a personas? ¿Dónde quedo su empatía y alegría?

Ahora parece otro, alguien frio…

Aunque yo también cambie, ya no soy el mismo que era… Ni un rastro queda…

Pero mi Hiroki, mi amado castaño, ¿Qué fue lo que paso?

Luego de unos minutos entro Kaito con muchas carpetas.

-Nowaki te traje los informes para que estés al corriente de cómo trabajamos aquí.
-Muchas gracias.
-Si necesitas ayuda ya…
-HIROKI. –pronuncio alguien en voz alta.

Tanto Kaito como yo nos fuimos a asomar a la puerta.

Era un hombre peliplata con ojos color lila que abría las puertas de la oficina de mi castaño.

-¿Akihiko? ¿Qué haces aquí?
-Por qué no me dijiste nada…

Kaito suspiro y se acerco a la oficina y cerró las puertas.

¿Quién es ese hombre?

Luego de unas horas Kaito me trajo algunos libros y dijo que saldría un momento y que me encargaba que nadie entrara a la oficina de mi castaño.

Cuando termine de ver los informes quise estirar un poco las piernas, salí de mi oficina y note que la de mi castaño estaba entreabierta cuando me acerque a cerrarla, escuche algunos murmullos.

Quería escuchar un poco pero solo negué con mi cabeza y comencé a cerrarla hasta que…

-Feliz aniversario. –comentaba aquel hombre y le entregaba una caja.
-Lo mismo digo Akihiko. –sonrió mi castaño mientras le daba un regalo.

Aquel hombre todo a mi castaño de la cintura y le planto un beso apasionado.

-Será mejor que le demos privacidad. –comento Kaito y cerró la puerta.
-Ellos… -no podía articular alguna palabra.
-Son amantes, -sonrió a medias- y están comprometidos.
-¿Qué?
-Llevan 4 años de relación, ¿mucho tiempo no?

“No es verdad, este hombre me está mintiendo, Hiroki no puede… No debe…”