Hielo y Fuego (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 75 Falsa evidencia.

---Iori---

Salí un poco tarde de la sesión de fotografías, me molesta que me llamen a último minuto y me quiten mi valioso tiempo con mi amado Kaito, me alegra que me haya aceptado, le rogué tanto una cita que después de varias semanas acepto.

Me enamoré de él cuando acompañe a mi primo a una junta de la empresa Kamijou. La determinación con la que habla, la mirada seria y la pasión con la que dirige, simplemente perfecto.

Nunca me llamo la atención un hombre, pero con él aprendí que no importa el sexo, ni la edad, sino los sentimientos.

Soy feliz al tenerlo conmigo, y más ahora que pienso casarme con él, espero le guste el anillo que le he comprado.

Al llegar al edificio me extraño que los de seguridad no estuvieran en la entrada, siempre hay dos personas vigilando, al igual que otra persona en el piso principal.

Entre al edificio y empecé a buscar, no había señal que alguien estuviera. Se veía algo oscuro, intenté apretar el interruptor pero no funcionaba, así que subí rápidamente las escaleras esperando que no estuviera pasando nada malo.

Me moriría si Kaito le llegue a pasar algo.

Al llegar al piso principal encontré a los tres guardias muertos.

-PERO QUE RAYOS.

Corrí hasta la oficina de mi amado y abrí la puerta de golpe. Lo empecé a llamar pero nadie contestaba, sentí como mi corazón se detenía y el miedo empezaba a invadirme.

Camine hasta su escritorio y encontré un sobre.

Sé que no son mis asuntos pero tal vez me pueda ayudar a resolver esto que está sucediendo.

En el sobre se encontraban varios documentes, informes y traslados de dinero, exactamente en la cuenta de Kaito.

-E-Esto no es verdad...

También aparecían fotos, donde estaba mi Kaito en los brazos de diferentes hombres, sentí tanto rencor y odio, pero él no es así, nunca me engañaría. Saque una nota que estaba adherida a las fotos.

Después de tanto tiempo manejando está estúpida empresa, he decidido marcharme, sin antes tomar lo que me pertenece, una jugosa comisión, simplemente me quede para obtener ganancias, no por una inútil amistad, me voy para nunca volver, y ni piensen que estoy arrepentido...

Mi querido Iori, espero te gusten las fotos que te he dejado, son mi recuerdo de despedida para ti...

De pronto unas ganas de reír me dieron, y eso hice me reí y deje caer mis lágrimas de felicidad.

No es Kaito, él no haría esto, no tiene ni la necesidad ni el atrevimiento de herir a Hiroki, el no hizo esto, además él prefiere hacer cartas o notas a mano, ya que odia usar la computadora, no es Kaito...

-MALDICIÓN. –grite.

Alguien ha tratado de perjudicarlo y por todo lo que ha pasado aquí tal parece que se lo llevaron, no sé qué quieren conseguir con eso, pero no lo permitiré...

Me limpié mis lágrimas y tome mi celular llamando a la policía para reportar el incidente en la empresa, les comente que lo hicieran con cautela ya que no queremos que los medios se enteren.

No lo hice por cuidar a la empresa, sino por cuidar a Hiroki, ya que en su estado puede alterarse y es algo que Kaito no me lo perdonaría.

-Mi amor aguanta un poco haré lo imposible por encontrarte, no me dejaré llevar por estas estupideces, así que no te desesperes.

---Akihiko---

Me desperté muy temprano, demasiado para mi gusto, pero me siento muy nervioso y emocionado, no puedo controlar estos sentimientos, en verdad lo amo, quiero que esté a mi lado para toda la vida.

Aunque ese hombre que se lo llevo, él tal ¿Chris? Me miraba con recelo, enojo, es como si no quisiera que estuviera a lado de Yudai, será que ese hombre...

No, no quiero pensar de esa forma, además Yudai me ama a mí y no podría ver a otro que no fuera yo, eso es lo que espero.

No sé cómo me di cuenta de mis sentimientos hacía Yudai, pero surgió la necesidad de abrazarlo, besarlo y protegerlo, quiero tenerlo a mi lado, debo recuperar el tiempo perdido, debo mostrarle que mis sentimientos son sinceros.

Camine hasta la cocina y tome una taza de café.

-Señor Usami, ¿va a salir? –pregunto una chica.
-Así es.
-¿Quiere que prepare la comida?
-No lo creo, llegaré tarde.
-Entendido. –hizo una reverencia.
-Espera, -comente- quisiera preguntarte algo.
-¿Sí? –me miro.
-¿Sabes qué le gusta a Yudai?
-¿Eh?
-Sí, hablo de flores, peluches o chocolates.
-Oh, -sonrió- él ama las orquídeas, los chocolates blancos y prefiere los osos panda.
-¿Cómo es que sabes tanto? –me sorprendí.
-Digamos que nos hicimos muy amigos.
-Entiendo.
-¿Está enamorado de él?

Me sorprendí ante su pregunta y sonreí ampliamente.

-Sí.
-Me alegro que Yudai sea correspondido.
-¿Cómo?
-Él sufrió una decepción amorosa, no habla de ello porque no le importa, pero se iba a casar hace casi año y medio pero, pero el hombre con el que se iba a casar lo engaño un día antes de la boda.
-¿Qué?
-Así fue, su primer amor, pero prefirió olvidar esas cosas, y más cuando se enamoró de usted.
-¿Lo sabías?
-¿Qué sí no? –rio- Sus acciones, la forma de mirarlo, todo esos detalles demostraban el amor que le profesa.
-Soy un idiota. –murmure.
-¿Por qué lo dice?
-Lo rechace cuando se me confeso.
-Pero si usted lo ama, ¿luchara por él?
-Con todo lo que tengo.
-Entonces no veo el motivo por el cual no deban estar juntos.
-¿Y sí no quiere escucharme?
-Sí tanto lo ama como dice, -me miro- encontrará las palabras necesario.
-Gracias.
-No tiene que agradecerme, -comento- espero puedan ser felices.

La chica se retiró y yo tome mi cartera y mis llaves, faltaba una hora para las 3. Así que subí a mi auto para pasar a una florería.

Al entrar me quede viendo las flores que había y pedí las orquídeas más hermosas, compre una tarjeta y camine hasta una banca y me senté esperando a mi niño amado.

Los minutos pasaron, hasta que el reloj central comenzó a sonar marcando las 3 de la tarde, me levante de la banca y observe por todo el lugar, no había rastros de Yudai.

"Seguramente se le hizo tarde..."

5 minutos, luego 10, después 15, para terminar convirtiéndose en 30...

Me sentía desesperado, no podía aguantar más, mis esperanzas por verlo iban disminuyendo, las horas pasando, necesitaba verlo, decirle cuanto lo amo y hacerlo feliz.

-¡¡¡USAMI-SAN!!!

Mire a Yudai en la tienda principal, corrió hasta mis brazos y yo lo recibí con un fuerte abrazo.

-Lo siento, no pude, no quería venir, pero, mi corazón necesitaba verlo, en verdad deseaba hacerlo, lo amo y no puedo alejarme de...

No aguante más y lo silencie con un beso, sus labios tan cálidos, su sabor único, su aroma su calor, todo de él extrañaba, no puedo alejarlo.

-Te amo Yudai. –lo tome de las mejillas.
-Por favor no...
-No miento, -junte nuestras frentes- te amo, me enamoré de ti y quiero que estés a mi lado por siempre.
-Usami-san.
-Dime Akihiko.

Sus mejillas se sonrojaron y se aferró más a mí.

-Te amo Akihiko.
-Entonces, -lo mire- ¿quieres ser mi pareja?
-Sí. –sonrió.

Caminamos hasta la banca y le entregue las orquídeas.

-Son hermosas.
-No tanto como tú. –acaricie su cabello.
-N-No lo diga. –desvió su mirada.
-Es la verdad.
-Akihiko lamento lo que hice, yo, -me miro- estaba a punto de no venir.
-¿Por qué?
-M-Me sentía confundido, cuando dijiste que me amabas pensé que solo no querías que me alejara porque soy como un amigo para ti.
-Pero estás aquí. –tome su mentón.
-Porque me gano la desesperación y tenía que verte, quería acercarme a ti, debía comprobar tus sentimientos.
-Te amo Yudai.
-Y yo a ti Akihiko.

Lo besé tiernamente y él abrazo mi cuello.

---Nowaki---

Regrese a la casa de Ryu con algunas de nuestras cosas, en la entrada me recibió Hayato que me ayudo a colocar las cosas en la habitación que me quedaría con mi amado.

-¿Dónde está mi Hiro-san?
-Sé quedo dormido a lado de Ryu, se ven tan tiernos que no quise despertarlos.
-¿Enserio?
-Es más, -rio- tome unas fotos.
-Déjame verlas.

Me mostro su celular y le pedí que me pasará las fotos.

-Creo que dormiré en otra habitación. –suspiro.
-Supongo que nuestras parejas se extrañaban y querían convivir más.
-Es verdad, Ryu ama a su hermano y haría lo que fuera por él.
-Hiro-san también lo haría.
-Eso está más que comprobado.

Bajamos a la sala y empezamos a tomar una copa de vino brindando por nuestros amados, hasta que mi celular comenzó a sonar.

-Disculpa. –comente.

Camine a la cocina y conteste.

-¿Sí?
-¿Usted es el señor Kusama?
-Así es.
-Lamentamos comunicarle que la empresa Kamijou sufrió un atentado.
-¿Cómo?
-Alguien entro y mato a las personas de seguridad, al igual que se ha llevado a Usami Kaito.
-No es posible. –me sorprendí.
-Habla Iori.
-Sí, ¿es su pareja no?
-Así es, la policía me ha pedido comunicarme con los más allegados a Kaito, aún no le llamo a Akihiko porque quise comunicarme con usted primero.
-En un momento estaré ahí.
-No es necesario, lo mejor sería que se quedará con Hiroki, yo los mantendré informados.
-Seguramente fue Wataru. –masculle.
-¿Wataru?
-Sí.
-Imposible, acabo de hablar con él.
-¿QUÉ?
-Es que alguien dejo cosas sobre manejo de dinero, culpando a mi Kaito.
-NO ES VERDAD, -comente- FUE WATARU...
-ESE INFELIZ...

No puedo creerlo, ¿Por qué pasa todo esto?