Hermosa-Mente

Capítulo 39

Jessica se terminó de bañar y salió de la bañera, se miro al espejo y su cuello tenía marcas, moratones y en su mejilla un fuerte moreton quebrantaba su belleza. Sus ojos estaban apagados, ya no tenían la misma luz.

Jessica tomó una toalla y la enrollo en su cuerpo, salió del baño y fue directo a su guarda ropa, sacó unos shorts y un suéter azul profundo, tomó una coleta y frente a su espejo se hizo un moño alto. Tomó unas botas y se las puso, se vió por última vez al espejo y se miró a los ojos.

Había demorado mucho dentro de la bañera, platicando con Amarok,  se habían pasado un par de horas ya, se hicieron las 10 y ya todos en la casa dormían.

Jessica abrió la puerta de su habitación y  asomó su cabeza mirando al pasillo, no había nadie, estaba desierta la casa.
Bajo las escaleras y fue a la cocina, abrió unas gavetas de abajo donde se guardaban productos de limpieza, tomó una esponja y un cepillo, subió a su habitación silenciosamentey  entró a su baño, tomó su champú y acondicionador.

También tomó su toalla y la puso en su hombro, bajo nuevamente las escaleras silenciosamente, fue a la cocina, se volteó y miro a su alrededor, las luces estaban apagadas y todos dormían.

Jessica abrió la puerta de la cocina y salió al patio, la lluvia había bajado un poco su intensidad, pero no tanto, aun chispeaba mucho.

Jessica cubrio su cabeza con la toalla y corrió diagonal a los establos, entró a él y siguió corriendo hacia el último cubículo, Amarok estaba echado con la cabeza recostada en el suelo.

-Amarok!-exclamó Jessica
-Si?-dijo Amarok abriendo sus ojos poco a poco y levantando su cabeza.
-Prepárate!-
-Para que?-
-Para el baño que te voy a dar.-
-Baño?-
-Si, te voy a lavar ese montón de cabello sucio y te pondré acondicionador, quedarás muy limpio, tu me lavaste cuando me viste sucia, ahora me toca a mi.-
-Estas segura de que quieres hacer esto?-
-Más que segura!-
-Esta bien...-
-Traeré la manguera...-

Jessica dejó las cosas en el suelo, camino al final de los establos allí había una manguera conectada a un grifo que estaba en el suelo, ella tomó la manguera la estiró hacia el cubículo de Amarok, regresó al grifo y giró la manija, dejando que el agua escapara por la boquilla de la manguera.

-Bien...-dijo agarrando la manguera.

El agua comenzó a salir y ella se acercó la manguera  a las patas de  Amarok, se mojaron sus grandes patas y el agua rápidamente se tornaba roja.

Jessica subió poco a poco la manguera mojando el pecho de Amarok, Amarok   estaba completamente sumiso a todo, Jessica mojó su rostro y su hocico, el agua bajaba tornándose roja por la sangre que se que tenía esa bestia en su cuerpo, Jessica guió el agua ahora por todo el cuerpo de Amarok, era hipnotizante ver cómo el pelaje grueso de Amarok se mojaba.

Jessica ya había mojado cada parte de Amarok, estaba empapado y él sólo obedecía a todas las peticiones de Jessica, parecia un pequeño niño de 5 años obedeciendo a su madre tranquila y calladamente.

Jessica se agachó y tomó el champú que  utilizaba para su cabello, lo abrió y lo puso en todo el torso de Amarok, movió sus manos en círculos sobre el  cuerpo de Amarok esparciendolo y haciendo espuma.

Se puso de puntillas para poder descansar un poco la cabeza de Amarok  y así poner también champú allí, puso champú en medio de sus orejas.

Ejecutó los movimientos con las manos, haciendo espuma en su cabeza y esparciendola por el cuello y pecho.
Puso también en sus patas y en su cola.

-Ahora necesito que te pongas boca arriba.-dijo ella.
-Boca arriba?-
-Si, como si fuese a arrascarte la panza.-
-Esta bien...-Dijo Amarok dudando un poco.

Al fin y al cabo se puso boca arriba dejando expuesto su estómago, parecía un perrito normal en esa posición, Jessica puso champú en su estómago, hizo círculos con sus manos, la espuma se tornaba roja al hacer contacto con la sangre que se estaba secando en el cabello de Amarok.

Jessica tocó sus costillas y pudo sentir latidos, los latidos del corazón de  Amarok, puso su otra mano en su pecho y sintió sus propios latidos, latian a la par sus corazones como si hubiesen nacido para estar unidos.

-Pasa algo?-
-No, sólo me pregunto si los cuadrúpedos sienten cosquillas...-dijo con una sonrisa muy pícara.
-No... Jessica, no.-

Jessica comenzó rápidamente agitar sus dedos sobre las costillas de Amarok, estaba haciéndole cosquillas sin piedad.

Amarok se retorcía y jadeaba, ella reía como loca.
Ella casi nunca reía a carcajadas.

-Basta! BASTA POR FAVOR!!-exclamó Amarok
-Jajajajajajajajajaja! Te gusta? Dime que te gusta y me detengo.-dijo ella
-Me gusta! Ya! Me gusta!-
-Esta bien...-dijo Jessica deteniendo sus manos.

La cola de Amarok se movía como una vez se movió hace mucho tiempo mientras jugaba con sus hermanos.
Esos hermanos que nunca volvió a ver.

Jessica estaba de espaldas a Amarok, recogiendo la manguera.

Amarok, sin ser visto por Jessica que estaba de espaldas, puso su pata alrededor de la cintura de Jessica y la jaló hacia el, tirándola al suelo y mojandola, llenándola de espuma.

-NOOOOOOOOOOOO! NO SE VALEE!!!!-exclamó Jessica.

Amarok sonreía y reía junto a ella.

-NOOOOOO DEJAMEEEE!!!-dijo Jessica entre risas.

Amarok le lamía el rostro y la llenaba cada vez más de espuma, apretándola contra su pecho contra su peludo y espumoso pecho mientras ella trataba de zafarse.

Esos dos nacieron para estar juntos y el destino los unió por una razón.