-¿Qué? -pregunta sorprendido girando su cara hacia mi- ¿Ya has tomado una decisión?
-No, en realidad no, -le digo apenada- pero te quiero, quiero estar contigo Dougie, creo que nos merecemos una segunda oportunidad, pero no se me ocurre ninguna forma de que podamos hacerlo, es decir, mi vida está en España y la tuya aquí, en Inglaterra -añado tristemente.
-¿Me quieres? -vuelve a preguntar.
-Claro que te quiero -respondo sin pensármelo dos veces.
-¿Quieres estar conmigo?
-Claro que si Dougie, no fue justo que lo nuestro solo durase dos semanas.
-Pues si ambos queremos estar juntos encontraremos la forma de hacerlo, te lo prometo -dice alargando su mano para coger la mía que descansa sobre mi regazo.
-Pero es muy complicado Dougie -repito preocupada.
-Shhhh, lo conseguiremos -me tranquiliza- nadie dice que vaya a ser fácil pero estoy seguro de que podremos hacerlo, encontraremos la forma. ¿Me quieres? -pregunta de nuevo.
-Ya te he dicho que si.
-Lo se, pero me gusta escucharlo -contesta riéndose.
-Ah, que gracioso -le digo fingiendo estar ofendida- ¿y tu a mi?
-Claro que te quiero, te quiero muchísimo Elena, ya te lo dije, nunca he dejado de quererte. Bueno, ahora lo importante ¿Quieres ser mi novia? -dice poniendo tono cursi.
-Mmmmm, no se, no se -le hago rabiar un poco- claro que quiero -añado sonriendo-. Te quiero.
-Te quiero. ¡Dios, me muero por besarte! -grita riéndose.
-De momento conduce, que solo falta que nos matemos -le digo riéndome. Pero me suelto el cinturón de seguridad, me inclino hacia él y le doy un suave beso en la mejilla, provocando que suelte una carcajada.
El resto del camino vamos en silencio, cuando llegamos a su casa Dougie aparca y nos bajamos del coche. Cuando estoy rodeando el coche para ir hacia la puerta de entrada Dougie me está esperando en la parte trasera, me coge por la cintura y me besa tiernamente, después caminamos de la mano hasta la entrada.
Entramos en la casa y nada más cerrar la puerta Dougie vuelve a besarme, pero esta vez no es un beso tierno, sino un beso completamente apasionado, como si necesitase mis labios, como si yo fuese el último vaso de agua en el desierto.
-¡Joder! Ni te imaginas lo mucho que necesitaba eso -dice cuando nos separamos mirándome a los ojos mientras sonríe.
-Que tonto eres -le digo riéndome.
-Te lo digo totalmente en serio, estuve ocho años soñando con esos labios, deseando volver a tenerte entre mis brazos.
-Oh, Dougie -le digo mientras le acaricio la mejilla justo antes de darle un suave beso en los labios.
-Y entonces, aquel día en la playa me besaste y te juro que lo que sentí en ese momento fue indescriptible, pero entonces dijiste que solo podíamos ser amigos y al fin y al cabo para mi lo más importante es tu felicidad.
-Lo siento.
-No pasa nada, pero ni te imaginas lo mucho que me costó apartarme ayer cuando intentaste besarme -añade riéndose-. Lo bueno es que ahora estás aquí, vuelves a ser mi novia y creo que no podría ser más feliz.
-Oh Doug -le digo antes de besarle de nuevo y esta vez soy yo la que le necesita a él.
-Ufff, Sweetie, ¿crees que deberíamos retomar nuestra relación donde la dejamos o quieres volver a empezar e ir despacio?
-La verdad es que no lo había pensado, pero creo que podremos retomarlo donde lo dejamos -le digo sonriéndole mientras le paso los brazos por el cuello empiezo a jugar con su pelo entre mis dedos.
Dougie, que me estaba abrazando por la cintura desliza sus manos suavemente hacia mis axilas por donde me levanta ligeramente del suelo, así que yo rodeo su cintura con mis piernas y le beso. Él empieza a subir las escaleras sin ninguna dificultad, a pesar de no ver por dónde va. Cuando llegamos a su habitación me deposita suavemente en la cama y se pone encima de mi. Le quito la camiseta, me sujeta por la cintura y gira de forma que yo quedo encima de él, me quita el vestido.
-¿Te has hecho un tatuaje? -me pregunta sorprendido al ver la frase dibujada sobre mis costillas.
-Si -le digo riéndome- me lo hice al poco tiempo de volver a casa cuando vine la primera vez.
-¿Te lo hiciste por...? -pregunta mientras lo acaricia.
-Si -le contesto poniéndome colorada.
-Estás loca -me dice riéndose y me besa.
-No, no lo estoy, fue algo muy especial y que no iba a olvidar de todas formas, así que ¿por qué no iba a tatuarme el título de nuestra canción? -le digo sonriéndole.
-The heart never lies -lee en voz alta-. Pero ¿cómo no lo he visto cuando estuvimos en España? Si fuimos a la playa varias veces -pregunta confuso.
-Muy fácil, el verano pasado acababa de dar a luz y todavía tenía barriga del embarazo, así que usé bañador todo el verano y el bañador tapaba el tatuaje -le aclaro riéndome.
-Tiene sentido -añade él riéndose-. Bueno, ahora que veo esto creo que yo también tengo algo que enseñarte -dice levantando el brazo derecho y señalando un pequeño corazón rojo en su antebrazo, dentro del cual está escrito Sweetie, el apodo que me puso cuando estuvimos juntos, también me lo hice al poco tiempo de que te fueras, tenía un hueco en el que no sabía qué poner y pensé que te merecías una representación en mi cuerpo.
-Oh Dougie, es precioso me encanta -le digo antes de empezar a besarle de nuevo.
![](https://img.wattpad.com/cover/92785026-288-k466839.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Te tengo a ti
FanfictionSegunda parte de Mi corazón nunca miente. Han pasado ocho años desde que Elena volvió de Inglaterra, está casada y esperando un bebé, ya no sigue en contacto con los chicos, aunque sigue al día de sus vidas gracias a las redes sociales. Es feliz con...