Capítulo 33

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Antes de darme cuenta llega la navidad. Iremos a pasarla a España, Sam y Jazzie vendrán con nosotros. Antes de ir celebraremos nuestra particular McNavidad en casa de Tom y Gi con los chicos.

Pasamos la noche en su casa, cenamos todos juntos, nos damos los regalos, incluidos algunos para el futuro bebé de Danny y Georgia, que ya está enorme, y después pasamos la noche todos allí. Los niños duermen todos juntos en lo que antes era la habitación de Dougie, que ahora es la de Buzz; Dougie y yo dormimos en la que era mi habitación, que ahora es la de Buddy; Danny y Georgia duermen en lo que antes era la sala de música de Tom, que ahora es la habitación de invitados; y Harry e Izzy duermen en un colchón hinchable en la sala de cine.

-Se me hace súper raro volver a estar durmiendo en esta habitación después de tantos años -le digo a Dougie mientras nos metemos en la cama.

-La verdad es que si que es raro -responde.

-Si el pobre Buddy supiera las cosas que hemos hecho en su habitación... -le digo riéndome.

-Todavía es muy pequeño, pero algún día lo sabrá -me dice uniéndose a mi risa.

-Le causarás un trauma.

-Se lo contaré cuando ya sea adulto y sexualmente activo.

-Madre mía, si todavía es un niño...

-Bueno, Buzz ya es casi un adolescente, pronto podré contarle lo que hemos hecho en su habitación -dice riéndose.

-Dougie -le digo dándole un manotazo.

Seguimos riéndonos, hasta que oímos un grito desde el piso de arriba seguido de unos pasos apurados por las escaleras y alguien llamando a nuestra puerta y preguntando por mi. Cuando abro al otro lado encuentro a Danny mirándome con cara de pánico.

-Elena, te necesitamos, a Georgia le ha empezado a doler mucho la barriga -me dice preocupado.

-Está bien, voy, pero no creo que sea nada grave -le digo tranquilizándole.

Danny se echa a correr escaleras arriba y yo lo sigo lo más rápido que puedo. Cuando llegamos a la habitación encuentro a Georgia tirada en la cama sujetándose la barriga.

-¿Cuando te ha empezado a doler? -le pregunto acercándome a ella y tocándole la barriga.

-Llevo toda la noche con molestias, pero no quise preocuparos -dice.

-Bueno, me gustaría comprobar cómo tienes el cuello del útero, pero yo diría que estás de parto -le digo sonriente.

-¿Qué? -pregunta Danny alterado- Pero si no sale de cuentas hasta dentro de una semana, no puede ser -dice mientras los demás entran en la habitación preguntando qué pasa.

-Vale chicos, necesito que salgáis, voy a comprobar si efectivamente está de parto, Danny tú puedes quedarte -digo. Después salgo al baño a lavarme las manos y reconozco a Georgia, efectivamente tiene el cuello del útero borrado, está de parto.

-Rápido hay que llamar una ambulancia -grita Danny saliendo al pasillo.

-Tranquilo, es primeriza, os da tiempo de sobra a ir en coche, no os preocupéis -le digo frotándole el brazo.

Todos se emocionan mucho, después las chicas ayudamos a Georgia a vestirse y Danny y yo nos vamos con ella al hospital, yo iba a quedarme en casa con los demás, pero Georgia me pide que vaya con ella, que me necesita a su lado para tranquilizarles, tanto a ella como a Danny.

Pasamos la noche entera en el hospital, las contracciones son cada vez más seguidas, pero todavía no está lo suficientemente dilatada como para que la lleven al paritorio. A las diez de la mañana seguimos en la habitación cuando alguien llama a la puerta, pedimos que entre y de repente entran todos.

-Sorpresa -dicen en tono bajo todos a la vez.

-¿Qué hacéis aquí? -pregunta Danny emocionado- ¿Y los niños?

-Hemos llamado a mis padres para que se quedasen con ellos -dice Tom sonriente.

-No queríamos perdernos esto -añade Izzy.

Nos quedamos los ocho en la habitación charlando alegremente hasta que finalmente llega la hora de ir al paritorio. Georgia le había pedido a su médico que yo fuese su enfermera, así que bajo con ellos al paritorio, allí me dejan un uniforme y la asisto en el parto.

Una hora más tarde Danny y Georgia son padres de una preciosa niña, la limpio, le hago los tests necesarios y mientras los médicos terminan de atender a Georgia yo pido permiso y salgo a enseñarles ala niña a los demás que están esperando en la sala de espera para familiares del paritorio.

-Es una niña -anuncio saliendo por la puerta con la niña en brazos.

-Oh Dios mío es preciosa -exclama Gi cuando todos se acercan a ver al bebé.

-No me puedo creer que nuestro Danny sea padre -dice Tom emocionado.

-Estoy seguro de que algún día se la olvidará en el supermercado o en el parque -dice Harry mirándola emocionado.

-¡Harry! -le reprocha Izzy dándole un manotazo en el brazo- Déjame coger a esa cosita -añade extendiendo los brazos.

-Después me toca a mi -dice Gi dando saltitos.

-No puedo esperar para que nosotros tengamos uno así -me dice Dougie abrazándome en cuanto suelto al bebé.

-Ni yo – le contesto besándolo.

-Es preciosa.

-Lo se.

Al cabo de unos minutos Danny sale diciendo que el médico dice que la niña tiene que volver con su madre. Todos lo abrazan y lo felicitan, él todavía tiene los ojos llorosos de lo que lloró de emoción cuando vio por primera vez a su hija. Cojo la niña, se la doy a su papi, que la coge torpemente y los dos volvemos a entrar a junto de Georgia.

Te tengo a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora